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EE.UU, imperio decadente?
En muchas ocasiones hemos escuchado o leído algunos refranes fruto de la sabiduría popular, los cuales encierran muchas verdades y que, de una manera fácil, amena y sencilla nos descifran muchas conductas, acciones o sentir de la vida cotidiana de los seres humanos y de algunas situaciones. Podemos citar como ejemplo aquel que dice: «Una cosa piensa el borracho y otra el tabernero. En consecuencia, no todo lo que pensamos, queremos o deseamos puede convertirse en una realidad fácil sólo porque así lo deseamos. Digo esto, porque como ya he explicado en otros de mis humildes trabajos publicados en éste diario, desde que se hizo a la luz pública el Manifiesto Comunista, escrito por Karl Marx y Friederich Engels el 21 de febrero del 1848 y pasando por los líderes comunistas como Vladimir Lenín, Josef Stalin, Ho Chi Minh, Mao Tse Tung, Kim il Sung y Hugo Chávez, todos han bajado a lo profundo del averno sin ver la decadencia o la destrucción del modelo económico capitalista y de su mejor exponente que lo es Estados Unidos. Y, como sabemos, ha sido el mayor deseo de los dos tiranosaurios cubanos que quedan, Fidel y Raúl Castro, cuya existencia están ya en sus últimos estertores de vida y que también no verán cristalizados sus protervos anhelos. A los líderes socialistas de pacotillas que todavían pululan en el mundo actual, aún les embarga ese difícil sueño socialista, al ver que el propio sistema que ellos esperaban que sustituyera al capitalismo, sucumbió hace tiempo, dejando a los Estados Unidos y el modelo que encarna, como el hombre del whisky: caminando muy campante, algo que así será a pesar de algunos escollos que hoy se viven y que produce en algunos aquello que se conoce popularmente como «la alegría del tísico». Pero, cuáles son las razones que me motivan tener semejante convicción? Siempre he sostenido que una teoría, sea cual sea el campo en que se concibe, para ser creíble tiene que comprenderse a la luz de los acontecimientos y estar sujeta la misma a ciertas condiciones demostrables. En ese tenor, voy a explicar las razones por las cuales creo, considero y entiendo que habrá Estados Unidos y capitalismo para rato, siendo ello la mejor opción que pueda tener la humanidad en estos momentos y en el porvenir. Para nadie es un secreto que las naciones que eran cabeza visible del social-comunismo, como lo fueron la exURSS, Alemania Oriental y la República Popular China, entendieron que el método socialista no era ni viable ni rentable y que, de seguir ese camino, la nación iba en franca decadencia. China es el mejor actual ejemplo de ello, la exAlemania Oriental así lo entendió y lo mismo pasó con la exURSS. Ha cambiado el escenario, pero los actores siguen siendo los mismo, ya no enfrentado en una «Guerra Fría» como antecedió, sino más bien, en una guerra económica y de supervivencia, en donde el comercio es el arma de guerra. Razones para Estados Unidos y el capitalismo no sucumbir: Actualmente la patria de William Howard Taft, atraviesa momentos difíciles y se ha fomentado la idea de una «decadencia» inminente del imperio y hasta se ha tratado de que su moneda, símbolo del capitalismo como modelo económico, deje ser tomada como patrón de referencia. De igual manera, vemos como un populista cocalero analfabeto como el de Bolivia; un orate conductor de autobús como el colombiano de Venezuela y un guapetón altaneros como el de Ecuador, han proferidos insultos, expulsados diplomáticos y han provocado confrontaciones con la primera potencia del mundo, obviamente, dándose con ello «cierto baño de importancia» internacional. Eso da en cierta forma a entender, una visión frívola de que en realidad los Estados Unidos están en franca decadencia y que su poderío ya no influye respeto alguno. Es la apariencia, pero no es así. A mi entender, eso está sucediendo porque en la Casa Blanca hay un timorato, un idealista sin horizontes, un demócrata con aire de populista, cuya labor ejecutiva está concentrada no ha engrandecer aún más a los Estados Unidos como nación rectora del mundo, sino en darle la residencia y la ciudadanía como gran premio a 12 millones de indocumentados que han violado las leyes migratorias de la nación y de hacer de América una guardería infantil para albergar a todos los niños centroamericanos que sus padres irresponsablemente han enviado de manera ilegal, antojadiza e impulsiva hacia el territorio estadounidense a buscar una mejor vida y un futuro promisorio. Pero claro, nos conforta saber que es una nube negra, pasajera y que pronto finalizará su gestión para obra y bien de la nación americana. Pero, al igual como mencionara al comienzo, «una cosa piensa el borracho y otra el tabernero». A pesar de todo ello, hay razones de mucho pesos para afirmar con toda serenidad y confianza que habrá Estado Unidos para rato y que, el modelo económico que representa sustentando en su moneda, superará todo escollo. Veamos las razones que aludo para que yo piense así. Como había sostenido en un artículo anterior, en un lapso no mayor a 6 años, los Estados Unidos habrán logrado su independencia energética al explotar en su suelo marino mediante el sistema del fracking, una inmensa reservas de gas de esquisto y petróleo. Pero, independientemente de ello, hay razones que hacen casi imposible que el mundo se desligue de este imperio, su modelo económico y su moneda. Quiérase o no, el mundo actual globalizado está inmerso en la madeja capitalista y en la moneda norteamericana que le da sustento. El dólar norteamericano ejerce las funciones de reserva mundial, de la misma manera, sirve de respaldo para las demás monedas, es clave en las transacciones comerciales y financieras en todo el planeta . La caída de los Estados Unidos como imperio militar y económico en el mundo, generaría per se, una crisis financiera sin precedentes en todo el planeta algo a lo cual ningún país hoy en día pudiera sobrevivir o desearía. Vamos a desglosar estas razones económicas y políticas. a) El dólar estadounidense es la moneda de cambio y de reservas internacional y la misma es usada en sus transacciones comerciales desde Europa hasta Australia, teniendo todos esos países sus reserva monetarias en dólares y no en sus monedas nacionales. b) Más del 80% de las reservas internacionales estás basada en la moneda estadounidense, en comparación a sólo el 25% del euro de la Unión Europea. c) El sistema financiero mundial están «dolarizado» y casi todas las agencias financieras a nivel mundial operan con la moneda norteamericana, siendo la Bolsa de Valores de New York el más grande mercado de dinero en el mundo. d) Las naciones hoy llamadas «emergentes» y las naciones económicas desarrolladas generan casi el 75% del PBI mundial en dólares. f) La moneda norteamericana está presente en el 86% de las transacciones de los US$3,000 billones que a diario se realizan en todo el mundo. Como podemos ver, con estas razones económica, innegable y a la vista de todos, el mundo estás ligado de una manera muy íntima a la economía de mercado de los Estados Unidos y lo que representa : el capitalismo y su moneda como instrumento de pago. La primera economía del mundo es la de los Estados Unidos, la segunda (como bloque) es la de Europa y la tercera es la de China. Si la economía de norteamericana colapsa y por ende la nación y con ello, el modelo que representa, ello sería una catástrofe para la Unión Europea y China, pues junto son los mayores compradores y vendedores de todo del planeta. Que quede bien clar los Estados Unidos no dominan al mundo por discursos frívolos de sus presidentes o doctrinas políticos-diplomáticas, sino porque impone al resto del mundo su moneda como instrumento económico unido a su poderío militar indestructible y en constante evolución muy superior a los demás. Es la única nación en toda la faz terrestre que tiene 7 flotas con el mayor poder atómico concebido por el hombre y que puede desplazarse por todos los océanos y ser la única nación que se da el lujo de tener más de mil bases militares rodeando todos los puntos estratégicos del planeta tierra, sin contar haber conquistado el espacio. Ante esa realidad, debo concluir con un merismo del gran poeta castellano Jorge Manrique de Figueroa, autor del clásico «Coplas de la muerte de su padre», cuando escribió: «Ni contigo ni sin ti tienen mis males remedio; contigo, porque me matas y sin ti, porque me muero