Crisis en las huestes chavistas
Para el extinto Hugo Chávez, los colectivos eran el brazo armado de la revolución bolivariana. Estos grupos paramilitares, jugaron su papel en la represión violenta, contra las movilizaciones populares escenificadas durante meses por estudiantes y personas comunes, para oponerse a las políticas dictatoriales del régimen comandado por Nicolás Maduro. La muerte violenta de José Odreman, quien lideraba el colectivo 5 de Marzo, y de cuatro mas de sus camaradas a manos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), abre muchas interrogantes. Muchos se preguntan si es que el gobierno de Maduro quiere romper la alianza estratégica del chavismo con esos grupos, muchas veces relacionados con la delincuencia descomunal y la rampante violencia social que padece Venezuela en estos momentos. No hay estadísticas que reflejen la cantidad de colectivos activos operando a nivel nacional. Pero de acuerdo al periódico venezolano El Nacional, sólo en Cotiza, zona popular del oeste de Caracas, donde está ubicada la “Ciudad Socialista Frente 5 de Marzo”, la cual alberga damnificados, está el centro de operaciones de la organización homónima que agrupa a 100 colectivos de Caracas, donde desde hace 4 años mantienen el control en dicho barrio caraqueño. Investigaciones realizadas por el canal Vivo Play, revelan además, que en la ciudad de Caracas operan al menos ocho grandes colectivos, siendo el “Frente Francisco de Miranda”, los “Tupamaros”, “Alexis Vive” y “La Piedrita”, los grupos con mayor influencia en la capital venezolana. De los mismos se desprenderían cerca de 96 células. Existen serias sospechas de que la muerte de José Odreman, junto a su lugarteniente Carmelo Gonzales, está relacionada con el asesinato del diputado Robert Serra, quien habría estado vinculado al colectivista fatalmente acribillado. El régimen de Maduro ha estado utilizando el asesinato brutal del legislador para desviar la atención, acusando del hecho –como siempre– a conspiradores extranjeros, principalmente al ex presidente colombiano, Álvaro Uribe. En declaraciones públicas dadas por asesinado, en tono desesperado y temeroso, minutos antes de su muerte a NTN24, hizo graves acusaciones que involucran a funcionarios públicos de alto nivel, comenzando por el Ministro del Interior, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres. Sin embargo, el comisario José Gregorio Sierralta, director nacional del CICPC, declaró a los medios de comunicación que las personas abatidas estaban siendo investigadas por llevar a cabo una serie de asesinatos en la capital venezolana. Con la baja popularidad del “presidente obrero” , la suma de estos acontecimientos que desatan una nueva confrontación, ahora contra sus aliados, y la baja continua en los precios del petróleo, luce bien complicada la situación en Venezuela. La estrategia chavista de buscar apoyo paramilitar, armando y subsidiando a los llamados colectivos, se ha transformado en un peligroso búmeran que en su reversa, puede atizar la ya grave crisis política y social, en la patria del gran libertador Simón Bolivar. joseflandez@hotmail.com