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BARAHONA: Desastre con la glorieta del parque
BARAHONA.- Alguien de quien, siendo honesto, no recuerdo su nombre en este momento, dijo una vez: “La represión no hace a los hombres dóciles, sino los convierte en hipócritas”. Comienzo con esta aseveración para referirme a la situación que se ha creado en este pueblo de Barahona, con relación a la llamada remodelación del Parque Central de Barahona, que dicho sea de paso no es una remodelación ni siquiera una reconstrucción, sino una “construcción”, con Planos diferentes a su estructura original. Hay que decir o entender que es una construcción, debido a que lo que se está llevando a cabo, es un cambio estructural que modifica todo lo que allí existía y que de quedar algo, no quedaría en condiciones de dar ni siquiera una idea de lo que era o fue el legendario parque central de Barahona, para aquellos que lo conocieron durante su historia. Hay que decir las cosas claras para que se entiendan. Pero la situación principal no se crea por el hecho de la construcción de un nuevo parque, sino por lo que se ha querido imponer a la fuerza y que es algo a lo que lo mínimo que el pueblo tiene es el derecho de pedir informaciones, pero además, de plantear sus puntos de vista con relación a lo que se hace, dentro de lo cual se inscribe, exigir calidad total en su realización, pero también disentir con la extinción de lo que es un patrimonio cultural, que nadie ignora lo que significa para los pueblos la conservación de sus reliquias y sus monumentos. Se ha planteado en una forma poco responsable hasta el momento, la demolición de la Glorieta del parque la cual fue donada por el ilustre ciudadano suizo don Luis E. Del Monte, hace más de un siglo, aunque esto ha sido negado por la ingeniera Mildred Peña, quien ha manifestado que esto no está contemplado en el plan de trabajo que ella tiene a su cargo. Por otro lado, ha habido reclamos por parte de munícipes locales en el sentido de la calidad y las condiciones en que se realizan los referidos trabajos, dado que estamos en una zona altamente riesgosa o ciclónica. En ninguno de los casos lamentablemente, se ha tratado de dar las correspondientes respuestas a la ciudadanía y con en necesario nivel de respeto a la dignidad ciudadana, tal fue el caso Jean Elías García, un prestigioso profesional al cual se le ha faltado el respeto, en una forma inaceptable, entre otros. Todo profesional que se prepara, con los sacrificios que implica, lo hace para dar respuestas públicas a la sociedad y la sola investidura que ostenta, le obliga a dar respuestas profesionales, tanto a profesionales como a no profesionales; es decir que debe actuar con equilibrio y sobre todo, con apego a la ética. Entendemos, que el pueblo tiene derecho a reclamar o a hacer planteamientos, claro está, siempre conservando el debido respeto, pero asimismo, tiene derecho de recibir respuestas oportunas y convincentes. En lo relativo a la Glorieta, es importante sopesar los aspectos técnicos intrínsecos y no tomar medidas por simples opiniones, sino a través de estudios verdaderamente profesionales y escuchar a la vez el parecer en tal sentido de voces como las del CODIA, la cual parece que no existe en Barahona. ¿Por qué no se ha pronunciado al respecto?, porque vimos que lo hizo para justificar los contratos que avalan dichas obras, creemos que también debe hacerlo con relación a éste tema. Por último, si hubiese la imperiosa necesidad de demoler ese patrimonio cargado de historia, cultura y sentimentalismo, creo que no debe ser objeto de discusión, el hecho de que deberá construirse una réplica del mismo, de manera que conserve intactos los valores que para este pueblo encierra. ¿O no es eso posible?. ¡No hay que ser represivos ni intolerantes, sino todo lo contrario!.