Ampliar los debates y consensos para replantear esa reforma
El corrientazo que ha recibido el gobierno de parte de la población luego de que depositara el proyecto de Modernización Fiscal en el Congreso Nacional, es un claro indicativo de que se verifica un movimiento creciente de conciencia de clase en amplios sectores de la sociedad dominicana.
La señal es clara para los gobiernos, los partidos políticos, las organizaciones gremiales, profesionales, deportivas, culturales y no gubernamentales, que piensan o han seguido pensando que la actual sociedad es la del siglo pasado.
Ya no es así, la sociedad dominicana de hoy es una nueva República Dominica, la era a parido un nuevo ciudadano, un hombre nuevo, que es capaz de descifrar en fracciones segundos cuando lo quieren manipular, narigonear y engañar de manera descarada.
Los líderes y tomadores de decisiones, al parecer, no se han percatado de eso y pretenden seguir jugando al engaño entendiendo de que se trata del mismo colectivo social del siglo XX al que pueden seguir maniatando y embaucando con discursos y relatos engañosos.
El ciudadano dominicano de hoy, señores dirigentes, tienen a su disposición un montón de canales informativos y formativos tecnológicos nacionales e internacionales que le permiten analizar, comparar, discernir y generar conciencia para distinguir lo bueno de lo malo y la verdad de la simulación.
Repudio
El repudio cuasi colectivo al proyecto de reforma fiscal presentado por el gobierno del presidente Luis Abinader debe ser asimilado por los proponentes o impulsores como un indicativo de que no tienen un respaldo indefinido con el pueblo.
Lo que se evidencia es que ese mismo pueblo que en las últimas dos elecciones celebradas en el país le ha dado dos victorias (2020-2024) y (2024-2028) con el voto mayoritario, no está en disposición de aguantar todos los golpes y caprichos que le venga en ganas.
Ahora bien, esto que estamos viendo no ha sido sólo para el actual gobierno, no, es un fenómeno que se ha venido poniendo de manifiesto con más intensidad hace más de una década con la aparición del nuevo orden mundial a partir de finalizada la Guerra Fría cuando sale a escena la vibrante Sociedad Civil.
Pero nada, cerrado este ciclo tormentoso, lo inmediato es ampliar los debates y consensos que permitan replantear esa reforma, hay muchas cosas que se pueden y deben ajustarse como, por ejemplo, la Ley de Seguridad Social, las exenciones al turismo, comercio fronterizo, combustible al transporte, cine, entre otras. ¡Que corrientazo al gobierno¡.
jpm-am