Negociar para gobernar
El presidente Donald Trump y Joe Biden ganaron 25 estados cada uno, el segundo obtuvo 77 millones de votos, el primero 73.
En Michigan, por “error”, una máquina le contabilizó a Biden 4.000 votos de Trump, eso se corrigió.
Trump alega que esos “errores” le quitaron dos millones de votos, de comprobarse, ambos empatarían con 75 millones.
Los recuentos manuales en Wisconsin y Georgia, comprobarán si Trump tiene razón.
En la cámara baja los demócratas retendrán el control, aunque perdieron 13 escaños, los republicanos aumentaron seis.
En el senado los republicanos bajaron de 53 a 50 escaños, los demócratas aumentaron de 45, a 48. Una elección especial en Georgia decidirá dos escaños, si los demócratas ganan ambos empatan, la vicepresidenta Kamala Harris tendrá el voto decisivo. Con uno, los republicanos retienen el control, nadie tendrá mayoría aplastante.
Hay un claro mandato electoral, tendrán negociar para gobernar.
Esto claramente significa otros cuatro años de estancamiento político total, a menos que no se produzca una división en uno de los grupos antagónicos.
El recuento de Georgia debe terminar esta semana, porque la ley electoral estatal impone el 20 de noviembre como fecha límite para tener todos los cómputos.
Ahora es que Trump inicia su contra-ataque y parece que sus esperanzas están en que los conteos manuales muestren que le hicieron aun sea una trampa.
Sidney Powell, la nueva abogada de Trump, dice que la empresa Dominion, que provee las máquinas electorales, fue fundada para hacer fraudes por Hugo Chávez en Venezuela.
Powell alega que grandes corporaciones tecnológicas y mediáticas están detrás del fraude que ella asegura demostrará en los próximos días.
Todo debe hacerse antes del 14 de diciembre, ese día los colegios electorales deben haber votado para enviar esa votación al Congreso en Washington para su certificación.
of-am