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Lo bueno, lo malo y lo feo de la Globalización. (Parte 1)
POR HUGO GIL
La globalización no es nada nuevo ni es algo que nadie haya planificado ni deseado. Es una realidad que nos ha tocado vivir a todos los seres humanos través de los siglos. Es cierto que los que pertenecemos a la actual generación (la generación del siglo XXI), hemos sentido los efectos de la globalización de una manera más notoria que las generaciones que nos precedieron; pero este fenómeno social ha estado siempre presente y lo estará mientras exista el planeta tierra.
Aunque es un fenómeno claramente identificable a través de la historia, la globalización como fenómeno social ha alcanzado su mayor expresión con el avance de la tecnología, especialmente en lo concerniente a la transportación y la comunicación. Siempre hemos pertenecido al mismo globo, el terráqueo; pero nunca habíamos estado tan susceptibles ni tan conscientes como ahora de que nos necesitamos unos a otros y de que lo que afecta a unos, nos afecta también a todos.
Ya no son los tiempos en que un país podía darse el lujo de mantenerse totalmente aislado del resto de las naciones mediante una gran muralla, como el caso de China. Tampoco es generalmente aceptable que un país pueda dividirse a sí mismo mediante un muro, como el caso del muro de Berlín en Alemania. Los muros que antes nos separaban y aislaban de los demás han caído casi todos y los que pretenden erigirse ahora deben contar con el repudio de las grandes mayorías.
Concomitantemente con los muros físicos de piedra, varilla y cemento han ido también cayendo los muros raciales, religiosos, económicos y culturales. Al mismo tiempo en que estos muros van cayendo, se han ido creando y fortaleciendo lazos de relaciones de todo tipo entre los conglomerados humanos del mundo. Todos estamos abocados a encarar la realidad de la globalización querámoslo o no, ya sea que estemos a favor o en contra de ella.
Como casi todas las cosas en la vida, la globalización tiene sus puntos positivos, pero también sus cosas malas y sus realidades feas. Sí, así es, como la tan famosa película de vaqueros que nos gustó tanto a los de mi edad: “El bueno, el malo y el feo”.
Es muy importante que analicemos sin prejuicios y sin banderías de ninguna clase la viva realidad de la globalización en su contexto general. Ello nos permitirá encarar los efectos negativos de ésta con una mayor eficacia y una más alta responsabilidad, pero también nos ayudara a aprovechar sus ventajas con una mayor conciencia..
Si somos capaces de entender que la desforestación, por ejemplo, en una determinada nación, afecta de forma neurálgica no solamente a esa nación, sino a las naciones circunvecinas, y aún más, a las naciones del mundo, entonces estaremos en disposición de aunar nuestros esfuerzos para resolver ese problema de todos y para antes aún prevenir tales ocurrencias.
En los momentos en que escribimos estas notas las naciones del mundo están avocadas a enfrentar las nefastas consecuencias del Coronavirus, enfermedad contagiosa actualmente originada en una ciudad de China y cuyos efectos se ha propagado prácticamente por todos los continentes del mundo, afectando la industria, la economía, el turismo y las relaciones sociales de todas las naciones.
Así como cuando una nación está operando de una manera próspera y pacífica trae alegría y tranquilidad a las demás naciones del mundo, cuando una nación está atravesando por serias dificultades, debe ser motivo de preocupación para todos y todos debemos estar dispuestos a colaborar mancomunadamente en la confrontación de esas dificultades.
(En artículos posteriores continuaremos desarrollando esta temática).
JPM
gil. si no mal entendí. tu dice que la globalizacion no es creada por nadie, sino que es algo que siempre a existido en el mundo. a mi entender, tu esta diciendo, que la globalizacion no es una estructura economica creada por el sistema capitalista? bueno vamos a esperar la segunda parte de tu análisis económico.
muy buen artí**** hugo!
muchisimas gracias, amado leonel.