La cacería de EEUU contra inmigrantes indocumentados

Luego de iniciar una cacería contra inmigrantes de diversas naciones, poniendo en el ojo del huracán a millones de indocumentados, Estados Unidos acelera el ritmo de las deportaciones, con medidas drásticas que afectan a familias que durante varios años residen en el país, pagan sus impuestos y que de acuerdo con instituciones protectoras de los inmigrantes, no tienen problemas con la justicia.

 

Desde el punto de vista óptico y haciendo un enfoque retrospectivo de las inminentes deportaciones de inmigrantes, las cuales tienen un efecto multiplicador en todos los estados, resulta incierto que estas se realicen iniciando el 2016 y faltando unos meses para finalizar la campaña electoral que decidirá el sustituto del presidente Barak Obama en la Casa Blanca.

 

Al igual que todos los países, Estados Unidos tiene sus leyes que regulan la inmigración, sobre todo, cuando se trata de protegerse íntegramente; y así lo establece su servicio migratorio al insistir que “la deportación (o repatriación) es el proceso legal mediante el cual se repatria formalmente de los Estados Unidos a un extranjero (es decir, una persona en el país que no es un ciudadano naturalizado), debido a que ha violado las leyes de inmigración estadounidenses”.

 

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos

(U.S. Inmigración and Customs Enforcement, ICE), destaca que las prioridades están dirigidas a quienes son considerados una amenaza para la seguridad nacional de la frontera o pública (terroristas, personas involucradas en espionaje, criminales, pandilleros, personas con historial extenso de violaciones de inmigración que crucen la frontera después del 1 de enero de 2014), personas con cargos por violencia doméstica, explotación sexual, robo y cualquier delito que tenga más de 90 días como penalidad de cárcel e inmigrantes con una orden final de deportación, acápites que al parecer no se están cumpliendo, porque hay sectores que aseguran que la medida tiene un tinte político, porque afecta a todos los indocumentados.

 

Desde nuestro punto de vista, la medida también responde al interés marcado por el precandidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump, que con un discurso xenófobo, machista y racista ha encendido la llama contra los inmigrantes, haciendo peticiones horrorosas para que sean deportados, incluso, confirmando su ingratitud de sacar del país a todos aquellos ilegales en caso de ganar las elecciones.

 

Un ejemplo valioso está reflejado en un estudio realizado el 2011 por el Instituto de Tributación Fiscal y Política Económica, que arrojó resultados trascedentes para la estabilidad económica de Estados Unidos y destaca que al 2010 los inmigrantes indocumentados pagaron $11.200 millones en impuestos locales y estatales por conceptos de impuestos, compras y otros movimientos, a pesar de no tener acceso a ningunos de los servicios públicos.

 

Aunque las denuncias sobre las deportaciones de latinoamericanos y caribeños son constantes, no existe un número determinado sobre las personas devueltas a su país, a excepción de 121 indocumentados, supuestamente vinculados en actos violatorios de las leyes estadounidense. Sin embargo, ICE reveló que entre el 1 de octubre de 2014 y el 31 de agosto de 2015 habían sido deportados 214,264 indocumentados, de ellos 126,283 (equivalentes al 58.89%) que tenían antecedentes criminales y el restante, 87,981 (equivalente al 41,1%) no tenía antecedentes”. El Gobierno de Obama supera los 2.5 millones de deportados, pero finalizado el año fiscal 2015, el ICE no revela el número total de indocumentados devueltos a sus países de origen.

 

Mientras el tema de la reforma migratoria se caldea en el Congreso de los Estados Unidos, el multimillonario Donald Trump, continua con sus ataques ofensivos y sistemáticos contra los inmigrantes, dispara sus lanzas en contra de  millones de personas residentes en ese internacionalizado país, mientras las encuestas lo apuntalan como ganador de la candidatura presidencial, lo que sin lugar a dudas pone en juego la estabilidad de los indocumentados.

 

En definitiva, la inmigración es un paradigma del que no puede deshacerse ningún país del mundo, aunque dependa de bajas o altas riquezas, porque cada individuo anda en busca de mejorar su estatus de vida, sin importar el riesgo y donde deba trasladarse para poder subsistir.

mbaez@gmail.com

jpm

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Fraser River
Fraser River
8 Años hace

Cacería?
No relajes, muchachón.
El relajo tiene que acabarse.
Qué bueno es apoyar gobiernos sinvergüenzas y corruptos en tu país, y luego tener que salir huyendo del mismo a un país más civilizado, **** ilegal en él, exigir que no te deporten y que te den de todo con el sudor de los que trabajan allí.
Se acabó el chantaje.
Ay, si el loco de Trump se cuela.

Carlos gil
Carlos gil
8 Años hace

Amigo todo Los paises tienen sus leyes fronterizas y migratorias o que used Cree que se esta haciendo en dominicana? No estamos repatriando Los haitianos que estan de manera illegal?

Y cuando otro pais atacar a RD por esas medidas RD en su derecho legitimo recalca que como nacion libre el pais ejerce sus leyes migratorias y deporta al que no esta legal.

Con que derecho atacamos a otro pais cuando en ver dad estan haciendo lo mismo que nosotros ?

Sigfrido Alberto Bueno Oviedo
Sigfrido Alberto Bueno Oviedo
8 Años hace

La gran popularidad adquirida por Trump demuestra claramente el apoyo y respaldo que nosotros los ciudadanos norteamericanos le damos a sus ideas y proposiciones, que no son en si antiemigrantes, si no anti ilegalidad y pro orden, las cosas hay que llamarlas por sus nombres, los deportados son ilegales criminales. Gastan miles para llegar, pueden subsistir, en sus paises aunque puede ser que no tengan uno de los I-Phone de ultima generacion.

Butifar Comillas
Butifar Comillas
8 Años hace

Si la ley establece que usted rompe la ley entrando a un pais sin los documentos requeridos, usted esta rompiendo las leyes de ese pais y por tanto es un criminal ya sea Mexicano, Chino, Centroamericano, Haitiano o Dominicano. Los Americanos tendran que crear millones de leyes que se adapten a cada caso en particular, buena suerte.