Dos coyunturas….
La mejor explicación-justificación o lectura a la derrota del PLD en el 2000 fue que, como no entendió porque ganó -de la mano de Balaguer-, tampoco entendió porque perdió; y aunque la historia, parafraseando a Karl Marx, solo suele repetirse como “farsa”, sí hay paralelismos innegables. Sin embargo, en la que llegó el PRM tiene, aunque distinta, un símil coyuntural en término de sustentación: el contexto-antesala de una ola de agitación social y mediática -Marcha verde y plaza de la bandera-, agotamiento político-electoral -no previsto del todo e insuficiente maniobra política-electoral (PLD)- y de una pandemia global. Y habría que ver: hasta dónde el PRM y su gobierno están consciente de esa realidad fáctica, porque podría suceder que, como el PLD en el 2000, esté obviando el alcance y volatilidad de esa coyuntura.
Y es que estamos observando cómo, desde el poder, hay tendencia a la dispersión y como las mismas olas que facilitaron el momentum -la victoria del PRM- se van evaporando y lo que se proyecta es lo que todos sabemos: una recesión económica global por los estragos-secuelas sanitarias, social y de salud mental de la pandemia. Súmele a ello, el hecho sociológico-mediático de una insatisfacción social y un descrédito de la clase política que, como pieza de orfebrería, fue labrada por una parte de la “sociedad civil”; y, en menor medida, por las cúpulas de los partidos y una periferia política-periodística-
Fue una mancuerna perfecta -sociedad civil-empresariado y una claque técnica-burocrática, al menos públicamente- que, en parte, el PLD privilegió pendejamente, y que, post-julio-5, migró, camaleónicamente, hacia el PRM-gobierno.
Desembarazarse de esa compleja telaraña corporativa no será fácil; y menos aún, si no se lee bien la coyuntura de sustentación que precedió la actual realidad política matizada por la pandemia y una “opinión pública” cada vez más de redes sociales y tendencias de actores amorfos que hoy detentan pedazos de poder y atención pública en amplios dichos poblacionales que solo siguen aullidos mediáticos, cual disparo de olimpiada, para tomar las calles….
De modo que estar en la cima de esa ola, no es, bajo ningún concepto, tener el control, sino más bien, estar sosteniendo: una bomba-social; o, si hay conciencia, un momento de prudencia y equilibrio sociopolítico. Pero ¿se está leyendo así? ¡Definitivamente, no!
JPM
fran *sica esa situación que describe la creó tu perverso dictadorzuelo de arroyo cano y su asociación de malhechores.los peores ocho años que registrará nuestra historia política en tiempos de paz nacional e internacional.
el pld,prsc,prd y otros mas pasaran a la historia como basura,porque jamas voveran al poder,por corruptos,ladrones y complice de la impunidad del gobierno de danilo.parece que este periodista piensa que al pueblo pueden seguir mintiendole,que no tenemos memoria para recordar las barbaridades cometida contra nuestros ciudadanos
me parece que la mayor parte de los interesado en la política dominicana, sobre todo los articulistas, pasan por alto a quien verdaderamente pone y quita presidente en la mayor parte de piases latino americano. quien paro la reforma a la constitución, para la candidatura de danilo, las protestas de un grupo de pequeños burgueses, o, las amenazas de pompeo?
parece que francisco cruz piensa que los que leemos integró la babosada que escribe somos imbeciles, se olvida que la sagrada casta que asaltó la dirección del pld entendió que ellos imponen la agenda del país, al inicio del movimiento marcha verde lo calificaron de «marchita», llegaron a descalificar a quienes se opusieron al desmadre de gobierno de danilo medina y el alto nivel de corrupción, la gente se hartó, el pld no volverá jamás.