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Danilo se reelegirá o Leonel tampoco va
Dice un refrán popular que «cuando el fin de semana va a ser bueno, desde el viernes se percibe». El presidente Danilo Medina ha estado jugado con Leonel Fernández a la aplicación de «Las 48 leyes del poder». La número 15 de esas sentencias dice: «Aplaste por completo a su enemigo. Si se deja encendida una sola brasa, por muy débil que sea, siempre se corre el riesgo de que vuelva a desencadenarse un incendio. Se ha perdido más por una aniquilación a medias que por una exterminación total: el enemigo se recuperará y buscará venganza. Destrúyalo por completo, no sólo física sino también espiritualmente».
Nada menos ha hecho el Presidente con Leonel Fernández desde su llegada al poder. Ha sido tanto el daño aviesamente provocado, que el mandatario en su sano juicio no sería capaz de entregarle el poder a su otrora jefe; sino que tiene muy claro que de no poder retenerlo en sus manos, condicionaría no presentarse como candidato, siempre que Leonel tampoco lo haga y dejen libre el escenario a las nuevas generaciones del partido. El presidente Medina sabe que en un nuevo gobierno de Leonel, independientemente de ser culpable o inocente. podría ocurrirle lo mismo que a Jorge Blanco y su grupo en el año 1986.
El objetivo del mandatario luce igualarse a Leonel en materia presidencial y superarle en otros aspectos. Para lograrlo sólo le hace falta dos cosas: la primera sería imponer su reelección en el 20; y la segunda dejar el espacio para que Leonel entre con un PLD desgastado y pierda las elecciones en el 24, con lo que perdería el invicto que marcaría la diferencia. Aunque no tengo el privilegio de la intimidad del presidente para conocer como piensa, puedo colegirlo por su manera de actuación.
Es alguien metódico y sistemático que no deja nada al azar; como El Chapulín Colorado, todos sus pasos están fríamente calculados; dirige en sus guiones desde cada toma que le hacen sus camarógrafos y fotógrafos y la manera de ubicarse de sus acompañantes, hasta las mas elevadas ejecutorias de sus gobiernos. Sería iluso pensar que las cosas que le ocurren a Leonel son fortuitas. Todas y cada una de ellas obedecen a un libreto muy bien elaborado, del que se mide incluso el efecto que producirá; de todo lo demás se encarga la DICOM, con mas del 70% de la prensa nacional y los principales espacios de medios a su servicio, para repetir como papagayos todo cuanto a ese grupo se le ocurra.
Si citar necesario fuese: 1. El boicot orquestado contra Leonel Fernández en cada punto de los Estados Unidos en donde se presentaba; 2. El Quirinazo, en donde lo vincularon con un confeso narcotraficante a quien supuestamente debía cuatro millones de dólares; 3. La farsa en la advertencia de atentado en su contra por el mismo «acreedor»; 4. La amenaza de involucrarlo en el caso de los aviones super tucanos; 5. El alimento al morbo de la vicepresidenta, pagando encuestas que la ubiquen por encima del esposo, para enfrentarlos entre sí y debilitarlo; 5. El plan de desmembrarlo para dejarlo sin extremidades.
Detallando el quinto punto es preciso mencionar: a) La cancelación del visado y «congelamiento de las cuentas bancarias y bienes» de Félix Bautista y toda su familia en EE.UU; la cancelación de la visa de Abel Martínez, de Medina y Medina, Víctor Crispín, Florentino – Florentino y Guzmán Fermín; ya que en este país ese documento se ha convertido en un «corruptómetro» que a quien de él despojan es corrupto aun sea el Papa Francisco.
Como si todo lo anterior poco fuese, Reinaldo Pared Pérez, Secretario General del PLD y pupilo del mandatario, sin aparente motivo suspende a Félix Bautista como Sec. de Organización y a Víctor Díaz Rúa como Sec. de Finanzas, las dos extremidades superiores del cuerpo de Leonel Fernández, cuyo objetivo no es otro que colocar en la Secretaría de Organización a uno de sus lacayos para asegurarse el control del padrón interno del partido y de todas las estructuras de base.
Para propiciarle el tiro de gracia, mientras Leonel recorre el país vendiendo un RD2044 que nadie sabe quien lo administrará, Danilo le tumba el pulso con la Ley de Partidos, imponiéndola sin primarias cerradas; como regalo de cortesía se queda presidiendo el Congreso Nacional con uno de sus principales activos en cada cámara. Si todo lo anterior le parece suficiente, ahora vendrá una cancelación masiva de los leonelistas que aun quedan en la nómina pública, empezando por aquellos cuadros que insistan en permanecer al lado de su líder.
Con el pasar del tiempo, con la abeja reina enquistada en la colmena del palacio, cada día abejas del panal de Leonel huyen hacia su nuevo habitad. De 17 senadores «firmes», una decena ha cambiado sus lealtades; de los diputados, ni decir. Lo peor de todo no ha llegado, el último, mayor y demoledor golpe que le tienen preparado al ex presidente y que mas le dolerá, será un plan que están orquestando para sacarlo de la Fundación Global, sólo que ésta sería dirigida por un vasallo del príncipe de la casa rosada, pero que nadie conoce como tal.
Si el presidente impone ahora su reelección, cederá el timón del barco a uno de la nueva generación del PLD o a la oposición. En cualquiera de los casos con una reelección, para las elecciones del 2032 Leonel estaría entrando a los 80 años de edad, un anciano que desde el lugar en donde se encuentre no representará ninguna amenaza para quien hoy tanto teme de su retorno al poder. A Dios que coja confesado al León.