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Policía de NY, una autoridad que no escucha
NUEVA YORK.- Recientemente, el contralor Scott Stringer lanzó un mapa de todos los juicios iniciados contra la policía de Nueva York en 2013. La representación gráfica de la mala conducta policial es un informe convincente e ilustra la extrema necesidad de una reforma exhaustiva.
El informe difundido por el más alto funcionario de la Contraloría, titulado Claimstat, muestra que las demandas se derivan “principalmente de las denuncias de mala conducta policial, violaciones de los derechos civiles, y lesiones y / o daños causados por accidentes con vehículos de la policía”. El informe fue dado a la luz pública en julio de 2014 y se utiliza como una forma de utilizar métodos basados en datos para tratar de ahorrar dinero a la ciudad.
Sin embargo, no parece que contar los incidentes de brutalidad policial esté sirviendo para salvar el dinero de la ciudad, puesto que el informe original de Stringer, dijo que el presupuesto de 2015 tendría que incluir $ 674 millones para los juicios e indemmizaciones (una cantidad mayor que el presupuesto para el Departamento de Parques, Departamento de la Vejez y la Biblioteca Pública de Nueva York combinados).
La decisión de liberar estos datos se hizo en un esfuerzo para aplicar una mayor transparencia a la policía de Nueva York
Si bien las demandas estaban presentes en los cinco condados que conforman la ciudad de Nueva York, el mapa muestra que eran cualquier cosa menos que uniformemente distribuidas.
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El punto de acceso más grande en el mapa es claramente El Bronx, pero hay otros. Un vistazo a la cantidad de demandas presentadas por un millar de residentes en cada municipio, también muestra que los residentes del Bronx tienen más de dos veces la probabilidad de presentar una demanda que los residentes de Brooklyn y seis veces más de probabilidades que los residentes de Staten Island:
Se analizó la vecindad de Eric Garner, descubriendo que había 109 demandas que se originaron en Staten Island y tres dentro de un radio de dos cuadras de la casa de Garner.
3.800 demandas pueden parecer un número no tan grande, pero hay que tener en cuenta que estas son demandas reales de personas que son capaces de encontrar un abogado que los represente. Muchas veces, las víctimas de abusos policiales son incapaces de obtener consejo legal por el simple hecho de que es su palabra contra la de los oficiales.
Hay literalmente decenas de miles de denuncias presentadas contra la policía de Nueva York cada año y este número va en aumento. Si esas cifras asombrosas nos muestran algo, es que el tiempo para discusiones sobre soluciones está bien atrasado.
Una forma segura de forzar la rendición de cuentas de la policía sería contar con funcionarios que lleven su propio seguro de responsabilidad personal. Cada vez que a una víctima de la brutalidad policial se le otorga una indemnización monetaria, son los contribuyentes inocentes que son responsables, no el agente de policía.
Si el trabajo del individuo se efectuó directamente por la calidad de su servicio, se podía estar seguro de que el exceso de demandas de fuerza caerían en picado.
El dilema de la brutalidad policial, sin embargo, no surge de la falta de soluciones, sino a partir de una falta de escucha por los que tienen la “autoridad” para ponerlas en práctica.
Fueunte: LONG ISLAND AL DIA
jt/am
