Para qué quiere el gobierno una reforma fiscal (OPINION)

imagen
El autor es economista. Reside en Santo Domingo

POR MARCELINO LARA

Desde el punto de vista estrictamente económico la actual administración de gobierno sólo tiene dos razones para querer imponer al pueblo dominicano una reforma fiscal en las actuales circunstancias económicas que vive nuestro país.

La primera es de orden interno, y está asociada al exagerado Déficit Presupuestario generado por la imprudencia financiera con que ha sido manejado el gasto corriente en los últimos cuatro años disparando la nómina pública a casi un Millón de empleados y disparando el gasto de publicidad y elevando sueldos de altos funcionarios.

Y la segunda es de origen externo, y está asociada al excesivo endeudamiento externo por más de 40 mil millones de dólares que han sido tomados prestados por actuales autoridades, y que ya han empezado a enfrentar la realidad que significa para la economía dominicana tener que pagar semejante monto de intereses por dichos préstamos. Y eso afecta la cuenta corriente de la balanza de pagos.

Ese desparpajo en el manejo del presupuesto nacional ha empezado a generar déficits internos y externos. No sería casualidad que el FMI nos exija firmar un acuerdo de pagos que implique una reforma fiscal ante la realidad de un escaso crecimiento económico que impide producir suficientes recursos para pagar la deuda.

Sin embargo, la medicina podría resultar peor que la enfermedad porque ya los bolsillos de la clase media, que es quien siempre paga los platos rotos, cada vez que se aprueba una nueva reforma fiscal, están exhaustos y vacíos, no aguantan un impuesto más.

De manera que, una nueva reforma fiscal debería ser orientada a fortalecer la Administración Tributaria para que pueda cobrar el 40% del ITBIS y el 60% del Impuesto sobre la Renta que hoy día, al parecer la Administración no sabe cobrar, según estudios realizados por técnicos del Banco Mundial. Y obviamente, las autoridades del gobierno deben aprender a respetar el Presupuesto Anual que aprueba el Congreso Nacional, y disminuir significativamente el dispendioso gasto corriente y aumentar el gasto de capital para generar nuevos empleos y aumentar la producción nacional y el consumo.

Ningún país del mundo puede hacer crecer su economía aplicando impuestos a la clase media y a los pequeños y medianos emprendedores. Lo primero es el crecimiento económico con estabilidad y después podríamos hablar de impuestos, pero no antes.

Aplicar más impuestos a la economía dominicana en las actuales circunstancias, es simplemente arriesgarse a provocar un estancamiento, o hasta una recesión económica. Son ya varios años que la economía dominicana no alcanza ni siquiera su crecimiento potencial del 5% establecido por el Banco Central, mientras la inflación sigue subiendo. Y ni hablar aquí del negativo impacto social que provocaría la aplicación de más impuestos a la población.

marcelino.lucas172001@gmail.com

jpm-am

Compártelo en tus redes:
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
7 Comments
Nuevos
Viejos Mas votados
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios
Así Lo Veo
Así Lo Veo
5 meses hace

la reforma fiscal viene, le guste a los críticos o no. el oponerse a ello solo por enfrentamiento político, sin considerar necesidad e importancia, pone al descubierto la inteligencia de quien lo hace. por qué es así? porque sin tener un sistema contributivo que sea competitivo no hay progreso, ni en la economía, ni en el desarrollo de la nación. todo tiene que ponerse al día con el paso del tiempo. esa es una verdad que no necesita demostración.

Así Lo Veo
Así Lo Veo
Responder a  Así Lo Veo
5 meses hace

aqui tambien noto la insistencia de la oposición querer enfatizar que la motivación de esa reforma es para pagar deudas. por favor, no seamos tan ingénuo, esa deuda empezó con danilo, desde hace tiempo, y exponencialmente aumentó con el cierre de la nación y el mundo por el covid. de dónde se financiarían los gastos públicos cuando no habian transacciones comerciales? y luego durante el tiempo de recuperación? son ustedes tan estúpidos?

Ralph
Ralph
5 meses hace

tu estupidez polÍtica no te permite ser sincero del por qué, en realidad, se necesita una reforma fiscal. esto no es un asunto de este gobierno, es una necesidad de nación. los mismos economistas, empresariado, financistas, etc, reconocen esa necesidad. hace tiempo que se debió haber hecho una integral, pero el pld por beneficiar a cierto sectores y marginal otros no lo hizo. ahora quieren pintarlo como que es interés para este gob.

Ralph
Ralph
Responder a  Ralph
5 meses hace

alguien sincero que no esté buscando beneficios políticos, reconoce que el país debe reformar el sistema tributario, reevaluar incentivos, y eliminar excepciones. desde qué tiempo no se pone al día el sistema fiscal? todo demanda actualidad, y el sistema fiscal del país no es una excepción. el decir que éste es un juego del presidente de turno, suena estúpido, y solo por estar jugando a la oposición. es un error que terminará perjudicandolos más.

El bruto
El bruto
Responder a  Ralph
5 meses hace

el país con tantas botellas no va para ningún lados.

Ignorancia
Ignorancia
Responder a  El bruto
5 meses hace

si esa es tu respuesta a la situación del fisco, tienes la vista muy corta, porque por muchas botellas que eliminen, y deben de hacerlo, eso no corregirá la desigualdad en las contribuciones al estado. eliminar botellas se debe hacer, pero eso no es sufiente. corporaciones, comercio, empresariado, y otros, tienen que pasar por el sedaso de la reforma para que termine beneficiándose el que menos gana.

Ignorancia
Ignorancia
Responder a  Ignorancia
5 meses hace

hay empresas hoy que no pagan impuestos porque están protegidas por excepciones, y otras con subsídios, eso hay que corregirlo para disminuir la necesidad de ****r préstamos. si no entra lo suficiente, cómo se cubrirán los gastos? por mágia? y si no hay entradas para cubrirlos hay que acudir a prestamos, tal y como se hace en un hogar. por eso se necesita la reforma fiscal, para corregir esa aberración de desigualdad.