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OPINION: A 25 años de los Juegos Olímpicos Barcelona 92
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Los Juegos de la XXV Olimpiada se desarrollaron en Barcelona, España, del 25 de julio al 9 de agosto 1992 y es precisamente que nos corresponde rememorar los 25 Años de esa gesta deportiva.
En el máximo evento multidisciplinario vieron acción 9356 atletas con la representación de 169 países de igual número de Comités Olímpicos Nacionales en 28 deportes.
Era un gran anhelo de los munícipes de Barcelona pues la ciudad había sido candidata en 1924, 1936 y 1940 y fue el 17 de octubre de 1986 cuando en la ciudad de Lausana, Suiza y en la 91 sesión del Comité Olímpico Internacional donde lograron la sede al vencer a París en una tercera votación.
La República Dominicana participò con una delegación de 32 atletas de los cuales 30 eran hombres y 2 mujeres, ambas de la disciplina de judo, Eleucadia Vargas Reyes y Altagracia Contreras, compitiendo en béisbol, boxeo, judo, levantamiento de pesos y lucha olímpica teniendo al ingeniero Rafael Damirón como Jefe de Misión, al doctor José Joaquín Puello Herrera a la sazón presidente del Comité Olímpico Dominicano y Cristóbal Marte Hoffiz era el Secretario de Deportes del momento.
La destacada judoka Altagracia Miosotis Contreras fue la abanderada de la delegación dominicana como tributo a su medalla de plata obtenida el año anterior en los XI Juegos Panamericanos realizados en Cuba.
El judo lo completaron Ekers Raposo Peña y Gilberto García Piña, así mismo, Héctor Ávila, Agustín Castillo, Victoriano Damian Sosa, Fausto del Rosario, Cesar Ramos y Rafael Romero en boxeo.
En levantamiento de pesas Juan Manuel Cueto y Ulises Valentín en lucha olímpica para completar la nòmina con 24 peloteros cuyos nombres correspondieron a Felix Nova, Manuel Guzmán, Roberto Casey, Rafaelito Mercedes, Teofilo Peña, Fausto Peña, Cipriano Ventura, Juan Viñas, Silvestre Popoteur, Benjamin Heredia, José Ramón Veras, Fabio Aquino, Eugenio Valdez, Felix Tejada, Alexis Peña, Teodoro Novas, Juan Sánchez, Roque Solano, Elías Olivos y Jos
El atleta de menor edad por la delegación dominicana lo fue Félix Tejada con 16 años y el de mayor Benjamín Heredia con 29, ambos, de la disciplina de béisbol.
Las Ceremonias de Apertura y clausura fueron en el Estadio Olímpico Montjuic y el Rey de España, Juan Carlos I, dejò oficialmente inaugurados los juegos donde su hijo Felipe, hoy Rey de España como Felipe VI, fue el abanderado de la delegación española.
El importante y emotivo juramento deportivo correspondió al regatista Luis Doreste Blanco y el encendido del pebetero de manera muy original por Antonio Rebollo lanzando una flecha en cuya punta relucía el Fuego Olímpico que se apagaría al final de la contienda deportiva de primer nivel mundial.
En la inauguración participaron los tenores Monserrat Caballe, José Carreras, Placido Domingo, Alfredo Kraus y Sarah Brightman.
El Comité Olímpico Internacional estaba presidido por el español y mejor barcelonés Don Juan Antonio Samaranch.
Fue la vez en que las 12 antiguas repúblicas que formaban parte de la Unión Soviética participaron bajo la misma bandera, la olímpica, y con el nombre de Equipo Unificado y Sudáfrica volvió a los juegos luego de 32 años de ausencia por causa del Apartheid.
Letonia, Lituania y Estonia ya separadas de la Unión Soviética participaron cada una con su propia delegación y bandera.
Por su parte Cuba volvía a los juegos luego de su última participación en Moscu 1980 y Alemania competía unificada por vez primera luego de la caída del Muro de Berlín.
Por primera vez jugadores de la NBA conformaron un Dream Team con los estelares Magic Jhonson, Michael Jordan, Larry Bird, Karl Malone, Scottie Pippen y Charles Barkey, entre otros estelares.
La vistosa mascota de los juegos recibió el nombre de Cobi y el pegajoso slogan «Amics per sempre», «Amigos Para Siempre» fue el deleite de las diferentes delegaciones que disfrutaron de una ciudad preparada exquisitamente para recibir las diversas y mas variadas culturas, religiones y razas.
España trataba de internacionalizarse y en ese 1992 además de los Juegos Olímpicos ya había inaugurado la Exposición Universal, Sevilla 1992 el 20 de abril, Madrid era la Capital Europea de la Cultura, la II Cumbre de Presidentes y Jefes de Gobierno de Iberoamèrica celebrando los 500 años del descubrimiento de América, esto y mas fueron las cartas de presentación de España en democracia transmitiendo imagen de modernismo.
En los resultados finales del majestoso y multitudinario certàmen multidisciplinario el Equipo Unificado (EUN) logrò el primer lugar de la justa con 45 medallas de oro, 38 de plata y 39 de bronce seguido `por los Estados Unidos en segundo lugar, tercero Alemania, cuarto China, quinto Cuba y los anfitriones españoles sexto.
La gran inversión en infraestructura trasformò a Barcelona en una gran ciudad pasando de un millón de visitantes a nueve, hoy día producto de la terciarizacion y la gran promoción hacia el exterior, entre otras cosas.
Para los dominicanos era la segunda vez que se presentaban a unos juegos tratando de obtener alguna presea olímpica acorde con la obtenida por Pedro Julio Nolasco, boxeo, quien en los Juegos de Los Ángeles 1984 logrò el bronce y la primera medalla para un país caribeño con menos de 10 millones de habitantes y a lo sumo 48 mil kilómetros cuadrados.
Hoy día los propios españoles refieren que para 1992 se creían mundialistas aunque prontamente despertaron a los problemas inherentes a los regímenes democráticos, sus intereses políticos y la corrupción en sus diversas vertientes, no obstante, cabe resaltar la unificación de todos los sectores y actores políticos en un proyecto común como lo fue Barcelona 1992.
En mi caso particular estuve en esta cita olímpica como delegado del equipo de judo siendo mi segunda incursión pues anteriormente lo había hecho en los Ángeles 1984 y ciertamente que es una experiencia interesante pues nos permite, en el área deportiva, actualizarnos con el deporte mundial al mas alto nivel.
Las anécdotas de este y otros certámenes deportivos internacionales pueden llevar varias pàginas lo que merece capítulos aparte y siempre con reservas dado que algunas son impublicables.
of-am