La época de los cristeros (primera aproximación)
Por MANUEL ANTONIO GARCIA SALCEDO
La Cristiada en México, tierra de Nuestra Señora de Guadalupe, Emperatriz de América, la Morenita, fue un violento conflicto que nos remonta al siglo pasado, a sus primeros 25 años, con todos los antecedentes de lo que ocurría en esta nación envuelta en el ideal de la revolución.
Guerra, confusión y la falta de unidad imperaban en un estado de corte republicano liberal anticatólico.
Paradójicamente la Iglesia Católica tan asentada, especialmente en las zonas rurales, ve nacer de sus adentros, del pueblo llano, una sublevación civil en el centro y sur del país. Alrededor de 250,000 muertos fue el saldo de la violencia armada entre las partes. Hubo un sector de la población católica que hizo pública opción por la no violencia.
Hemos de señalar, además, las continuas conversaciones entre el gobierno y la jerarquía eclesiástica mexicana, los llamados arreglos, a los que siguieron los periodos del llamado Silencio.

El conflicto tuvo su raíz en un atentado en la antigua Basílica de Guadalupe, lo cual produjo mucho malestar entre la población mexicana a nivel nacional. Surge el movimiento espontáneo de los cristeros, católicos armados, no autorizados por los obispos, en los diversos estados mexicanos.
Un Cristero asesina al presidente Álvaro Obregón, a quien sucede Plutarco Elías Calles, quien dictamina la prohibición de todo culto católico, el ejercicio de sus ministros y la expropiación de las propiedades de la Iglesia. La violencia armada se desata.
El Papa Pío XI, quien tenía tantos frentes abiertos: Hitler, Mussolini, Stalin, la guerra civil española, Francia y ahora México, entre muchos otros, busca la manera más diplomática de llegar a un acuerdo con el gobierno de la nación azteca.
En una próxima entrega pretendemos detallar la situación acontecida, las acciones de sus actores, los sucesos acontecidos determinantes y la gravedad de los mismos, la conducta y suerte final de los violentos, la resistencia pacífica hasta el día de hoy de los católicos practicantes, los jerarcas eclesiales ante un estado no amigable con la fe católica.
También pretendemos presentar las resoluciones para poner fin a tan grave conflicto, y las condiciones en que se desenvuelven las relaciones, en muchos casos de tensión, con el gobierno mexicanos, así como los hechos paralelos y similares acontecidos en diversos países en que la Iglesia Católica realiza su misión.
(Wilkipedia: La Guerra Cristera, también llamada Guerra de los Cristeros o Cristiada, fue una guerra civil en México que se prolongó durante tres años, desde el 3 de agosto de 1926 al 21 de junio de 1929, entre el Gobierno y milicias de religiosos católicos que se resistían a la aplicación de la llamada Ley Calles, la cual proponía limitar y controlar el culto católico en la nación, el cual es mayoritario en este país. Fue la penúltima guerra que tuvo México en su territorio).
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¡Gracias por compartir esta publicación tan interesante! Es fundamental recordar estos episodios históricos como La Cristiada. Conocer el pasado de la Iglesia, con sus aciertos y errores, nos permite aprender de ellos y evitar que se repitan hechos que empañen la buena obra y la misión de las autoridades eclesiásticas. Solo así podremos construir un futuro donde la fe y la sociedad coexistan en armonía.