Trump elige a Susie Wiles como jefa del gabinete en Casa Blanca
Abinader entrega muelles en Río San Juan y Cabrera para la pesca
Primer Ministro Haití seguirá en Puerto Rico, su futuro es incierto
Nuevo secretario General del PLD se reúne con bloque de diputados
Las pensiones políticas especiales (OPINION)
Decomisan equipos sonoro en negocios de Plaza Universitaria
Trump elige fiscal general al polémico congresista Matt Gaetz
EU: Mayoría de latinos rechazó deportaciones y apoyó a Harris
NY rechaza deportaciones pero pide solución a crisis migratoria
Repatrían a 17 migrantes a la RD tras llegar a costas Puerto Rico
230,765 han vuelto a Haití desde RD en lo que va del año 2024
Abinader valora aportes sector construcción al desarrollo de RD
México confisca 750 kilos de marihuana cuyo destino era RD
Hacia un pacto social con la diáspora
Por Juan Villar
El presidente Luis Abinader gano en las tres circunscripciones del exterior de forma plebiscitaria. Los votantes abrazaron su consigna del “cambio sigue” y creyeron que era necesaria para garantizar las reformas pendientes dentro de la sociedad dominicana. Aunque diseñada para impactar a los votantes en el territorio nacional, los que residimos fuera del país nos sentimos incluidos y masivamente lo respaldamos en las urnas. Lo hicimos, además, para terminar de sepultar aquella vieja frase que peyorativamente nos identificaba como “dominicanos ausentes”. Somos una fuerza vigorosa que impacta dentro de los principales renglones de la economía nacional como remesas, turismo, bienes raíces y pequeños negocios.
En este periodo con mayor experiencia de estado, el control del congreso y los ayuntamientos del país, Luis Abinader tiene que dar pasos solidos para reconocer el valor de la diáspora con una serie de medidas publicas que beneficien a los residentes en el exterior y a sus familiares en el país. Instalar una mesa de dialogo con la diáspora es el primer paso en la dirección correcta. Ese es el camino. Una garantía para el éxito de esta iniciativa resulta ser la capacidad concertadora del presidente. Una y otra vez, en el plano nacional, ha demostrado que cree en el dialogo como motor propulsor de la democracia. Su insistencia en incluir a los mas diversos sectores para explorar salidas a temas como el caso Haití, Agua, Policía Nacional, etc. Indican una ruta inclusiva para el exterior.
Los actores a seleccionar deben representar el capital humano de alta valía que poseemos; y, darle voz y voto proporcionalmente en la Mesa de Dialogo con la Diáspora; por ejemplo, académicos, científicos, investigadores sociales, periodistas, empresarios y comerciantes, lideres comunitarios, trabajadores de la salud, deportistas, sindicalistas, taxistas, estilistas de pelo, vendedores ambulantes y amas de casas, entre otros.
Una sociedad mas justa y democrática es posible incorporando la participación de las comunidades en el exterior. Hay que decirlo, la participación efectiva e integradora de la diáspora seria un factor que aceleraría el paso a una sociedad mas segura. En un esfuerzo combinado del gobierno con la diáspora, haciendo inversiones puntuales y creando programas sociales rigurosos y con efectividades comprobadas en el campo sociológico y psicológico disminuirían los niveles de delincuencia barrial, la inseguridad ciudadana y los crímenes.
Avanzaríamos, como nación, mejorando las condiciones materiales de vida de los sectores mas necesitados. Las políticas para reducir los niveles de pobreza tendrían un efecto directo si existiese un plan articulado con la diáspora para atacar la raíz de los mismos. Por ejemplo, el dominicano es leal al lugar donde vive -que es muchas veces el mismo donde nació; por eso, es tiempo para elevar nuestra creatividad y en vez de edificar nuevos proyectos tenemos que poner la vista en mejorar las viviendas que existen en nuestros barrios.
En alianza con el gobierno, La Mesa podrá diseñar un plan de renovación, construcción y titulación de viviendas para las comunidades receptoras.
El estado y nosotros seriamos los inversionistas y las comunidades receptoras serian potenciales proveedores de la fuerza de trabajo.
Imagínense el impacto que tendría asegurar que el 70% de los que trabajen sean residentes del barrio. Estaríamos haciendo una revolución social, económica y política repercutiendo en mayor influencia para promover los valores ciudadanos que nos enaltecen y hacen hijos dignos de la patria que nos vio nacer.
Presidente Abinader, usted tiene la palabra. Le hago el llamado para que instale una comisión multisectorial lo antes posible.
Esa comisión le entregaría en un plazo prudente los ejes temáticos, la ruta para su discusión y una visión metodológica para su implementación.