OPINION: Demócratas y Republicanos de cara al Súper Martes
Las elecciones internas norteamericanas entrarán en una fase crucial con vista a la nominación presidencial de los dos grandes partidos estadounidense. Este martes 1ero de marzo se celebrarán las primarias y de caucus tanto republicanas como demócratas en 15 estados de la unión norteamericana al mismo tiempo, lo que irá a definir el panorama electoral en norte de América.
A pesar de todo, serán los recursos económicos los que determinarán el poderío de las personas aspirantes en esta carrera hacia la Casa Blanca. Es de ahí que el establishment norteamericano invierta multimillonarias sumas de dinero con miras a preservar canonjías y prebendas del poder gubernamental.
En la carrera por colocarse la “ñoña norteamericana”, únicamente Bernie Sanders, (que se apoya en donantes del pueblo), y Donald Trump (que financia su campaña con sus propios recursos), no acuden a las contribuciones de las grandes corporaciones.
Transcurridas las primarias y de caucus tanto en Nevada como en Carolina de Sur, en donde Donald Trump se impuso cómodamente en las republicanas, y con el retiro de Jeb Bush de la contienda ( votos que serán buscado por Marco Rubio), y luego de la victoria de Hillary Clinton sobre Bernie Sanders, el ambiente electoral se va definiendo.
El panorama proselitista de cara a este Súper Martes a celebrarse este 1ro de marzo permitirá a ciencia cierta definir quienes pasarán a la convención el 18 de julio en Cleveland, de los republicanos, y el 25 de julio en Philadelphia, del lado de los demócratas.
Siendo justo, hay que reconocer que el mejor discurso de candidato alguno en estas internas del bipartidismo norteamericano está siendo enarbolado por Bernie Sanders, a pesar de que no ha sido asimilado por las mayorías, que sufragan mayoritariamente por Clinton. En las elecciones de caucus escenificadas en Nevada el pasado sábado 20 de febrero, Sanders sólo obtuvo 47.2 por ciento de los votos, en contra de un 52.7 por ciento obtenido por Hillary Clinton que se alzó con la victoria demócrata.
Los resultados electorales de Sanders deberían hacerlo cambiar el estilo de su campaña, y asumir una postura más aguerrida en todo el trayecto que queda de la competencia. Tiene que convertir el debate en una especie de ring de boxeo. Debe evitar por todos los medios ser “la candelita que quema”, y atacar con más vehemencia. Y es que el candidato demócrata está obligado por las circunstancias a emplazar, arremeter, desafiar, denunciar, enarbolar, etc., lo que podría acorralar a Clinton en una esquina del cuadrilátero, y le impida la capacidad de ofensiva.
Para el senador de Vermont no hay mañana, y necesita pelear sus votos uno por uno con la maquinaria clintonista, principalmente dentro de la población joven. Para este Súper Martes las encuestas favorecen mucho a poco a Hillary Clinton.
Claro está, la candidatura de Hillary Clinton cuenta con mayores recursos económicos que la de Sanders, ya que tiene donantes de Wall Street, y también cuenta con más de cien millones de dólares acumulados por ella y su esposo fruto de charlas y conferencias. Un logro de Sanders ha sido conseguir el apoyo de una parte del movimiento Black Lives Matter, lo que le da una parte del voto afroamericano, aunque ni eso evitó su derrota en Nevada, ni parece que la evitará este martes 1ro de marzo.
Sanders inclusive, ha debido hacerle fuertes críticas a la administración Obama, no importándole que sea un gobierno de su partido, pues es seguro que esos caucus afroamericano votaron en su mayoría por Clinton, no solo por el trabajo que la ex canciller ha hecho dentro de ellos, sino también que Obama por detrás, de seguro les exhorta a darle el apoyo a Hillary, que a veces funge como una apologista de su administración.
Sanders ha podido buscar votos dentro de la comunidad latina presentando a Obama como de doble moral en lo referente a la inmigración ilegal, pues por un lado habla de reforma migratoria, y por el otro produce masivas deportaciones, principalmente de personas hispanas, lo que acercaría a Sanders a ese importante voto. Sanders tiene que “quemar los barcos” si quiere superar a Clinton. Es mandatorio que asuma un poco el discurso nihilista de Donald Trump, guardando las distancias entre ambos aspirantes.
Mientras por el lado republicano, la candidatura de Trump se mantiene puntera y muy por encima de los demás aspirantes de ese partido, situándose en las encuestas como vencedor en el Súper Martes, del lado demócrata Clinton también “come con su dama” y después de cambiar su discurso de campaña, ha logrado un impulso inusitado en sus aspiraciones presidenciales con muchas posibilidades de ser la seleccionada por el Partido Demócrata.
Por lo que se ve a grosso modo, la candidatura de Trump luce imbatible, y ni siquiera una parte importante del establishment norteamericano que lo objeta por su ácida crítica al estado de cosas estadounidense, lo ha podido detener. Y es que realmente el discurso trumpista pone en peligro a una parte de los grupos dominantes de ese país, luego de estos haber hecho un manejo de la gran crisis mundial salvándose, protegiéndose y beneficiándose de la misma, todo eso en contraste con las mayorías norteamericanas que cargaron con las amarguras sobre sus hombros.
La candidatura del empresario de bienes raíces ha llegado tan lejos que hasta un comercial se ha elaborado en donde el atractivo de una isla en Canadá es servir como “refugio” a un posible triunfo del magnate enganchado a político. Ni las amenazas del multimillonario Michael Bloomberg logran rebajar la simpatía de la gente por Trump. Bloomberg ha dicho que se meterá también en campaña como forma de detener el huracán Trump, invirtiendo por lo menos mil millones de dólares de su fortuna, la cual está calculada en 49,000 millones de las codiciadas papeletas verdes.
Esperemos pues los resultados del marte 1ro de marzo, los cuales definirán el cuadro electoral a lo interno del bipartidismo norteamericano.
jpm

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Totalmente de acuerdo con este artículo en que Sanders estado bastante pasivo en los debates a pesar de su clara desventaja en recursos económicos y carisma,factores que Clinton parece tener de sobra y en cuanto a Trump su candidatura es una realidad y será cuestión de acostumbrarse a la idea. excelente escrito
Sanders en el debate de anoche en CNN por un momento salió en defensa de Obama. Clinton se vio más sosegada y como dice Valoy, parece que en el super martes Clinton lo derrotará.