Los presidentes no pueden conocer todo
“El dinero proveniente del crimen organizado y de actividades ilícitas, como el narcotráfico, se presume que ha tenido en la región un peso relevante en el financiamiento de las campañas” (Daniel Zovatto, DEA, 2007).
En los gobiernos presidencialistas, el clientelismo político les exige el cumplimiento de lo prometido durante su proselitismo en busca de la presidencia de la república, prometiendo solucionarles a las necesidades básicas de la comunidad con la finalidad de ganarse la confianza de los ciudadanos para que voten por ellos; es decir, lo que se define como demagogia. ¡Es una degeneración de la democracia!
El proselitismo político sobre la base del clientelismo, demanda inversión de mucho dinero, por la influencia y el poder que ejerce en la vida política; es por eso, que los candidatos demandan capital económico para financiar sus campañas. Por esa necesidad económica, los aspirantes a cargos electivos navegan sin radar, en busca de la logística para sufragar el costo de su campaña, lo que provoca que reciban dinero de quien sea, sin importarles su procedencia, terminando en los brazos de empresarios corruptores y narcotraficantes.
El dinero es lo que ha afectado a las ideologías política, base del origen de los movimientos y partidos políticos como organizaciones que, se promueven como la solución de los problemas y el afianzamiento de la democracia, en busca de libertad y justicia social; sin embargo, la debilidad de la democracia está dentro del sistema clientelista, por la corrupción pública y privada. Uno de los problemas y riesgos más graves dentro de la legitimidad política es que, dirigentes, líderes, candidatos de los partidos se van alejando cada vez más de los valores éticos. En política nada es para siempre. ¡El fin justifica los medios!
La política necesita dinero. El financiamiento exógeno de los partidos, fuerza a los candidatos a comprometerse a futuro (venden en la flor el producto), con los agentes financieros, cumplirles sus deseos, dependiendo la actividad del cooperante; sea empresario o narcotraficante. El primero, privilegios para su empresa y el segundo, protección judicial para actuar libre. Con esta situación, sólo se benefician ellos en perjuicio de la sociedad, debilitando la capacidad de ejercer el poder en beneficio de la ciudadanía. En ambos casos, se trata de corrupción política.
Cuando el proselitismo busca re-postularse al término de su mandato, sus actividades demandan recursos, por lo que incurren en corrupción provocada por empresarios corruptores, blanqueo, lavado del narcotráfico y uso de los fondos públicos. Estos actos de indelicadezas conllevan la elaboración de expedientes penales para sometimiento a la justicia. En la mayoría de los casos, actúan a espaldas de su organización política o del presidente de la república, tomando dinero de estos señores en nombre de su partido.
Para evitar que los movimientos y partidos políticos reconocidos por la ley, se vean influenciados por los aportes económicos para proselitismo político de, se promulgó la Ley Núm. 26-15, el estado aporta anualmente dinero del pueblo, asignado en la Ley de Presupuesto General de la Nación, para el funcionamiento de sus campañas; fondos que los distribuye la Junta Central Electoral (JCE), de acuerdo con el porcentaje de los votos obtenidos. Podrán recibir recursos privados en cantidad limitada de acuerdo con la ley, anotando las aportaciones para fines de reportar los ingresos-egresos. Esto impide que sea utilizado exclusivamente para los gastos corrientes de los partidos.
Cuando algunos de estos señores al dejar los cargos, son sometidos por actos de corrupción administrativa. Si los recursos económicos recibidos por dirigentes provienen del narco, se les acusa de financiamiento de campañas del narcotráfico. Esta situación, afecta a los expresidentes que son señalados de utilizar dinero sucio; y es que esta actividad se ha ido centrando cada vez más en el costo que representa y en la competencia de los partidos para obtener más dinero. Los partidos como institución, ¿reciben físicamente dinero en sus manos?
Dirigentes, jefes, líderes y candidatos reciben de manos del crimen organizado, gran cantidad de dinero que, muchas veces se los embolsan, no lo reportan o entregan una parte de lo recibido. Es lamentable que cuando son descubiertos estos casos, tiran un chinchorro donde entran lo que estuvieron y los que no supieron de esas ayudas comprometidas previamente. ¿Porqué en algunos casos incluyen a los presidentes, si no tienen conocimiento de esos aportes?
Para la década de los 60s, se instaura con el primer gobierno democrático de Juan Bosch, quien fuera informado de un acto corrupción hecho Virgilio Gell, su jefe de su seguridad personal. Fue destituido y sometido. El triunviro Donald J. Read Cabral, fomenta la corrupción con las famosas “Cantinas” para las guardias y la Policía. Balaguer se hizo el sordo y el ciego para no ver ni escuchar los actos de indelicadezas de sus funcionarios. Antonio Guzmán Fernández, se suicidó al enterarse del desvío de las ayudas por el huracán David y la Tormenta Federico. Salvador J. Blanco, sometió a uno de sus funcionarios por un acto de corrupción.
Los militares compraron berenjenas a precios alterados, por lo que Salvador fue sometido a la justicia acusado de corrupción administrativa. Así siguieron en los sucesivos gobiernos, conatos de corrupción de parte de funcionarios que, coaligados con otros, no les informan a los presidentes que son los administradores de las cosas públicas. No se enterarán de los actos de corrupción cometidos por ellos. Si no existen pruebas de que los candidatos recibieron en sus manos dinero sucio, ¿cómo se puede acusar si prueba?
Reflexión: “Los presidentes no pueden conocer todo; pero se les pegan todas las indelicadezas”.
jpm-am
Estoy de acuerdo con usted. Es una gran verdad: Los Presidentes no pueden saberlo todo.Lo importante es que actúen con firmeza ante las irregularidades y que se sigan fortaleciendo las instituciones del Estado.
Pues que renuncien si no lo saben en un pais la persona mejor informada es el presidente asi es que Pelao esta engañdo al lector o te quiere pasar de listo por escribidores como uste es que existen los mas de 8 mil millones de pesos para pagar mentira como la que uste esta escribiendo.