Los restos de la heroína Rosa Duarte Díez se perdieron en Venezuela!
“Ahí como en nuestros días de juventud y ventura, todo nos sonríe, la felicidad nos tiende los brazos, nosotras, tristes, anhelantes en nuestro solitario albergue, sostenidas por débil esperanza, velamos el supremo instante en que como Melitón Valverde, vayamos a morir en donde se meció mi cuna, en donde únicamente se encuentra el verdadero reposo, la perfecta felicidad., Rosa Duarte Díez, en su diario.
En mi incesante afán de recuperar los restos de la heroína, trinitaria, luchadora independentista, hermana del patricio Juan Pablo Duarte Díez, Rosa Duarte, descubrí que sus restos mortales se perdieron y (por vergüenza nacional) ningún organismo oficial se atreve a divulgarlo. Rosa Duarte Díez fue sepultada en el Cementerio General de Sur, en Caracas, Venezuela.
Rosa Duarte, 1845 a los 24 años de edad y en condición de expatriada, había nacido en el seno de una familia que, como ella misma expresara, “pertenecía a la primera sociedad siendo muy estimados de propios y extraños“. (Rodríguez Demorizi Sup. Cit. 1970:40).
Partida Eclesiástica de Defunción Rosa Duarte Díez.
Arquidiócesis de Caracas. Parroquia de Santa Rosalía.- Caracas, Venezuela. “El infrascrito Párroco de Santa Rosalía de Caracas certifica que, en el Libro IX de Defunciones, al folio 208, del archivo a su cargo, se encuentra la partida del tenor siguiente: En veintiséis de octubre de mil ochocientos ochenta y ocho, yo el Cura Rector interino de la parroquia de Santa Rosalía de Caracas, di sepultura eclesiástica al cadáver de la adulta Rosa Duarte, soltera, natural de Santo Domingo, de sesenta y un años, hija legítima de Juan Duarte y Manuela Díez, difuntos. Recibió los santos Sacramentos de Penitencia y Extremaunción“.
Los datos de Acta de Inhumación dice textualmente:
“Octubre 26. Rosa Duarte.- El día 26 de octubre de 1888, de sesenta y un años de edad, falleció ayer a las 10 p.m., en la casa Nº 129, Calle Sur 1, de disentería según certificación facultativa del Dr. Federico Tejera, y ocupó el 2º Cuartel del 77 la fosa
Nº 1.428“.
Durante esas mismas investigaciones superficiales, leyendo partes de la prensa venezolana sobre las pésimas condiciones urbanas de salubridad y en ruinas del otrora Cementerio General de Sur, “que por su acervo histórico y artístico se granjeó el título de Monumento Histórico Nacional de Venezuela“, nos surgió el gran temor sobre el destino final de los restos de la heroína.
Un enorme silencio se siente de parte del Congreso Nacional sobre un intento, propuesta de exhumación y repatriación de dichos restos. En conversación con un diputado amigo a quien cuestionamos sobre dicho proyecto, nos respondió: “No sé, voy a investigar. Aquí nadie habla de eso“. De inmediato confirmé la triste verdad de que los restos de la prócer Rosa Protomártir Duarte Díez se perdieron.
En un trabajo de Cecilia Ayala Lafée, Werner Wilbert y Ariany Calles, «‘Juan Pablo Duarte en la Venezuela del siglo XIX. Historia y leyenda» ya se había confirmado la dificultad en la década de los 70’s para localizar sus restos, pero se entendía (al menos yo) que en investigaciones posteriores, de parte de autoridades dominicanas y venezolanas encargadas de preservaciones históricas, su localización era un hecho. Proyecto de ley exhumación y repatriación restos Rosa Duarte, realizar un descenso forense a la tumba de Rosa Duarte
“En febrero de 1976, el Dr. A. Frías Gálvez y quien esto escribe, visitamos el Cementerio General del Sur, con el fin de ubicar el lugar exacto de la fosa Nº 1.428 del 2º Cuartel del 77, donde el registro de inhumación notificaba, había sido enterrado el cadáver de Rosa Duarte. Una vez en el sitio, fuimos informados que el área del cementerio identificado como sección 77 había sido socavada y reexcavada para habilitar nuevas tumbas. Por tanto, se hacía imposible la ubicación de los restos de Rosa Duarte. Manuel Duarte Díez”. Página 1161.
Finalmente, sin más ánimo de continuar, sólo nos resta constatar a medida que profundizamos en la lectura e investigación sobre (primero) las persecuciones por las autoridades de ocupación haitiana, luego por parte de sus compatriotas el destierro de Juan Pablo Duarte Díez y su familia completa, acompañada de la desaparición, no sólo física sino de todos sus apellidos y recuerdos de una familia revolucionaria, independentista “de toda potencia extranjera“. Fue un plan de siempre convertir al patricio en una figura inalcanzable, espiritual, mesías mitológico, no terrenal.
El contraste, una magnífica tumba del descubridor Cristóbal Colón, de cuyos restos hasta se duda estén ahí. Pedro Santana, vil asesino, persecutor, enemigo a muerte de Juan Pablo, su familia y todos los héroes trinitarios, en el Panteón de de los Héroes Nacionales en vergonzosa afrenta a la memoria de quienes él, personalmente fusiló y pateó sus nobles cadáveres.
Enero 26 – febrero 27, colguemos nuestras banderas, como se tiende la ropa al sol después de lavarlas.
Los restos de la heroína Rosa Duarte Díez se perdieron, una vergüenza divulgarlo.
sp-am
así somos, nos ocupamos de lo intrascendente o de lo que brilla, pero nos olvidamos o no nos interesa lo sublime como son nuestros hombres y mujeres que lucharon o han luchado por nuestra amada patria. es doloroso, muy doloroso que la mayor parte del tiempo lo empleemos en ridiculeces.