Ve hay “revolución” en transparencia
SANTO DOMINGO.- El Gobierno de la República Dominicana ha logrado una “revolución histórica” en el sistema de transparencia pública, afirmó el director general de Etica e Integridad Gubernamental, Marino Vinicio Castillo.
Dijo que eso se debe a su exigencia de más participación, justicia y equidad social a través de licitaciones, compras y contrataciones, junto aLey 200-04 de Acceso a la Informacióny la publicidad de sus acciones.
Sin embargo, el fun cionario opinó que hace falta una mayor difusión y conocimiento de la referida ley, la que definió como un “juguete sofisticado en manos de niño pobre”.
“La gente, el pueblo no la conoce, no sabe lo que tiene en sus manos, pero tampoco se difunde para un real empoderamiento, es lamentable”, agregó el funcionario.
Asimismo, destacó el trabajo que realiza la DIGEIG, vía el desarrollo de las mesas IPAC, como modelo de «Gobierno Abierto» en las provincias del país, con el objetivo de fomentar el diálogo, recibir denuncias sobre sospechas de corrupción, reclamos y demandas sociales.
Vincho Castillo habló en un taller auspiciado por la Dirección de Compras y Contrataciones públicas, ante la presencia de Yocasta Guzmán,directora de esa dependencia.
Fue desarrollado en las instalaciones DIGEIG. Participaron Miguel Suazo y Berenice Barinas, director ejecutivo y encargada de transparencia gubernamental respectivamente, entre otros.
sp-am

Trump elige a Susie Wiles como jefa del gabinete en Casa Blanca
Abinader entrega muelles en Río San Juan y Cabrera para la pesca
Primer Ministro Haití seguirá en Puerto Rico, su futuro es incierto
El autoengaño en la transparencia: El caso SENASA
Rinden homenaje al legado del cantante Luis «Terror» Días
Abinader resalta trabajo de los periodistas en Palacio Nacional
Premian al Banco Popular como el mejor del país y la región
Veinte omisiones en el expediente SeNaSa
Mariotti dice Ley de Residuos castiga injustamente mipymes
Sol Amantina Delgado electa presidenta Unión de Enfermería
El cristianismo y su fracaso
SENASA: caso siniestro y cruel (OPINION)
Micheros, pero no ausentes (OPINION)













