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TENERIFE: Explican contrato a Juan Luis Guerra se ajusta a legalidad
ESPAÑA.- La concejal de CC-PNC y exconcejal de Fiestas en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife Gladis de León ha afirmado que la contratación de Juan Luis Guerra para el Carnaval se ajustó a la legalidad, no supuso sobrecosto alguno al presupuesto y contó con el visto bueno de la Intervención.
La edil realiza estos comentarios en un comunicado en relación a las informaciones publicadas en medios de comunicación acerca de la participación del cantante dominicano Juan Luis Guerra en la última edición del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife.
Gladis de León señala que la contratación del cantante Juan Luis Guerra para su participación en la pasada edición del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife se ajustó a la legalidad y cumplió con todos los requisitos exigibles «como no podía ser de otra manera»
Dicha contratación, junto a la del grupo Orishas, se realizó conforme a la ley de Contratos del Sector Público y a la vista del objeto y prestaciones para la realización de un evento musical, su calificación corresponde a la de un contrato de servicios, añade.
Explica que en este caso su razón es de carácter privado y el procedimiento de adjudicación se efectúa a través de un negociado sin publicidad, como representación artística única, como es el caso de los artistas mencionados, para los que la carta de exclusividad correspondía a Alfredo Moré.
Dicho expediente pasó la fiscalización previa de Intervención, igual que los dos pagos posteriores, afirma Gladis de León, quien indica que dentro de las condiciones pactadas con el representante para España de los artistas figuraba la realización de dos pagos.
El primero era el adelanto del 50 por ciento del importe (250.597,16 euros) para la gestión de pasajes, visados, habitaciones de hotel y otros, lo que fue «correctamente fiscalizado» por Intervención, y un segundo pago con el 50 por ciento restante, una vez celebrado el concierto, en el plan de pagos del Organismo de Fiestas, fiscalizado igualmente por Intervención.
Al contrario de lo publicado, prosigue la exedil de Fiestas, en ningún momento se “inflaron” las cuantías, pues el importe barajado fue siempre de 501.000 euros.
Lo que sí existió fue un error humano por el que se envió a través del portafirmas un archivo erróneo a la Gerencia por parte de asesores jurídicos del Organismo de Fiestas, detalla.
En concreto, se trató de un pliego de cláusulas técnicas que se pasó a la firma sin concluir las negociaciones «obrando las cantidades auténticas en el pliego de cláusulas administrativas debidamente fiscalizado», asegura De León.
Indica también que el Organismo de Fiestas no determina en estos casos el importe de la contratación de los artistas, sino que son sus representantes los que ponen precio para sus actuaciones y consultados presupuestos anteriores y ofertas de artistas similares –incluso de estos mismos–, pudo constatarse que se movían en las cifras indicadas.
Una vez comprobado que era Alfredo Moré quien disponía de la exclusividad para la contratación de estos artistas, el Organismo de Fiestas procedió a los pagos como establece la ley, y Radio Club Tenerife se dedicó a las labores de difusión y promoción del evento con acuerdos comerciales con este departamento municipal.
Indica que se buscó siempre la máxima repercusión de este evento artístico y musical, como posteriormente sucedió, tanto con la masiva asistencia de público, cifrada en 400.000 espectadores, como por la difusión exterior del Carnaval y de la ciudad, así como por el extraordinario impacto económico y social que tuvo en el municipio, con el consiguiente retorno en la economía de muchas pequeñas y medianas empresas, que superó con creces el coste del mismo.
Reitera que la contratación realizada no supuso aumento alguno en el gasto presupuestado por la Concejalía de Fiestas, que permaneció igual en los últimos años.
Muy al contrario la participación de estos artistas en el Carnaval de Santa Cruz fue posible gracias a la óptima gestión de ingresos privados efectuada por el organismo, en conceptos como publicidad y ocupación de la vía pública con kioscos.
Igual que en el control del gasto, con ejecuciones presupuestarias del 99 por ciento, que hicieron posible en 2018 un remanente de tesorería de 2,2 millones de euros, permitiendo afrontar en 2019 el gasto referido.
Añade que la afirmación del concejal de Fiestas, Andrés Martín, respecto a que el presupuesto del área se ha visto comprometido para llegar a fin de año no se ajusta a la realidad, puesto que el anterior equipo gestor dejó comprometidos, con la financiación correspondiente, actos como el concierto de Los 40 Principales, la Fiesta de la Cerveza, el primer pago a los grupos del Carnaval, el gasto de Navidad y Fin de Año y las fiestas patronales, además de gastos generales y unos 120.000 euros más para imprevistos.