Reflexiones boschistas: Conflictos de visiones
Estamos en la hora de las grandes definiciones. Nuestro país vive momentos decisivos que van a definir su rumbo y su destino. Esto significa que hay que estar claros y tener los conceptos que nos ayudarán a entender la situación en la que nos encontramos, estableciendo las relaciones causales entre los acontecimientos que se van produciendo, a fin de descifrar los planes que se esconden detrás.
Dicen, con toda la razón del mundo, que muchas veces lo que no se ve es más importante que lo que la vista puede apreciar. Y de eso se trata, de desvelar la estratagema, de descubrir la trampa, la celada que se busca tender para decidir la jornada, y ver con anticipación hacia dónde conducen los planes macabros que se pueden estar tramando a lo interno de un gobierno que luce atrapado en las patas de sus propios caballos.
En la política nada sucede al azar, todo obedece a un frío cálculo que busca provocar un efecto deseado. Partiendo de esta premisa, hemos visto que el Gobierno y el Partido Revolucionario Moderno, PRM, han emprendido un tenaz y furibundo ataque contra las fuerzas políticas que en diferentes grados están ligadas al boschismo.
Es en este contexto, donde hay que ubicar los intentos de desmantelamiento del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y las furiosas embestidas contra la Fuerza del Pueblo (FP), con la finalidad de que el boschismo regenerador no pueda sacar la cabeza y salir al rescate de lo más sano que pervive en ambas entidades políticas.
Porque no todo es malo en el PLD ni todo está contaminado, y la impronta que dejó en las obras positivas realizadas son muy numerosas y visibles, las cuales dejan muy empequeñecida a la actual visión y gestión de Luis Abinader y su PRM.
Es ahí, donde la reemergencia del boschismo es lo que puede hacer salvable al partido morado, para reestructurarse mejor, conforme a ideales más puros e inspiradores, como los que están encarnados en la Fuerza del Pueblo, de verdadera vocación boschista de servicio al país.
Así las cosas, vemos que el PRM maquina enfrentarse a una oposición dividida entre el PLD y la FP, dos partidos que tienen raíces y un tronco común afincados en el boschismo, cuyos ideales y principios del primero fueron sustituidos y asaltados por el clientelismo, el oportunismo y el individualismo, muy ajeno a la esencia que dio origen a esa organización política.
Dado que tienen dichas organizaciones en el boschismo un vínculo común fuerte que en el fondo los une, aunque en la superficie se vean muy separados e irreconciliables por heridas recientes, nadie quita que, si ambos se ven en el espejo de sus orígenes boschistas y se reconocen aspiracionalmente como tales, pueda tejerse entre ambas fuerzas, PLD y FP, un frente común para enfrentar los embates del perremeísmo gubernamental que busca destruir y hacer desaparecer del ámbito político, las ideas germinante del boschismo.
De ahí su actitud casi rabiosa de querer cambiar hasta el nombre de todo aquello que se relacione a los gobiernos del PLD, muy especial las encabezadas por el líder de la oposición dominicana, el Dr. Leonel Fernández.
Realidad en marcha
Y ese plan de destrucción no es una quimera, una suposición o una elucubración política sino una realidad que está en marcha y un plan que está en ejecución. Es así, como hay que ver y traducir el patrocinio y el incentivo del transfuguismo y la compra de alcaldes y legisladores por parte del abinaderismo desesperado ante su creciente pérdida de popularidad e incapacidad de seguir revirtiendo la mentira en verdad.
Todo parece indicar que ciertos grupos dentro del PLD no han entendido bien esto, aunque otro sector sí parece que ya lo entendió. Sin embargo, en la FP, un poco más práctico y menos emocionales, comprenden perfectamente esta situación.
De ahí parece que la idea de la Fuerza del Pueblo es buscar unificar el boschismo como paso previo para la conjunción de fuerzas con objetivos similares que beneficien a la nación, y por ende reempodere de nuevo el boschismo en la conducción de los destinos nacionales.
De modo que, al embestir al PLD y a la FP, el PRM busca aprovechar las debilidades per se de una oposición dividida, para ellos posicionarse mejor electoralmente de cara al próximo proceso venidero.
Sin embargo, este ataque frontal de descabezamiento y de descredito moral va más allá de la coyuntura electoral, porque el mismo apunta a desaparecer el posible resurgimiento de los ideales boschistas, representados por las corrientes que en ambas organizaciones propugnan por el boschismo como guía y práctica para la acción política y el ejercicio del Gobierno en la Republica Dominicana.
De estas reflexiones, se desprende que el boschismo puede unir y cohesionar a las fuerzas coincidentes bajo un mismo manto político-ideológico, que a la vez reivindique y corrija el modo de hacer política para bien del país y de las organizaciones que enarbolen la bandera de sus nobles principios, valores e ideales.
Ojalá que en las filas del PLD y de la FP todos se tomen ideológicamente el tónico reconfortante y energizador que constituye el boschismo, como elemento catalizador de mejores y esperanzadores procesos políticos que, reivindique el boschismo que una vez fue asaltado en el viejo partido y que, hoy se esfuerza por reconstruir y unificar el más avanzado discípulo del boschismo, el Dr. Leonel Fernández y la Fuerza del Pueblo.
jpm-am
cuando hablen de juntar las fuerzas boschistas, no se oviden de incluir a la fnp de vincho, al partido reformistas, y por qué no,al ped de ramfis trujillo…
no cabe duda de que usted es de los analfabetos politiqueros incapaces de entender las alianzas tácticas. es de los que todavía lloriquea y se amarga la vida por la derrota sufrida por sus favoritos politiqueros ante el frente patriótico de 1996. ¡ah, derrota que le dio duro y duradero a ciertos antiboschistas de siempre! todavía siguen actuando como aquel que no sabe ni el color de la patana que lo atropelló. ¿anotaste la placa? salud.
no hay duda de que las bases del pld, mayoritariamente se identifica con leonel fernandez, el problema es que danilo medina le tiene un odio y una envidia sin limite a leonel,mientras el pld tenga a danilo dirigiendo ese partido, no hay esperanza de que levante cabeza. juan bosch no se merecia que su obra maestra fuera destruida por el clan de los medina.
amigo, ni el pld ni la lfp encarnan ni representan el boschismo. esos partidos tienen sus dos lideres, leonel y danilo , que tienen sus propias ideologias y propositos. el boschismo no fue la lucha por el poder sino por una revolucion.
disiento de usted. el leonelismo si representa al boschismo, solo que ajustado a la nueva etapa histórica, la posmoderna del siglo xxi venida luego de la caída del muro de berlín, el fin de la guerra fría, la desaparición de la unión soviética y el bloque socialista con el triunfo definitivo de los ee. uu. y sus aliados en ese conflicto global. ninguna mente racional puede siquiera pensar que el boschismo se iba a mantener sin cambios…
…, tras esa serie de cambios terremóticos en lo político, social, económico y cultural, que afectaron a la humanidad. los paradigmas del tiempo de la guerra fría, o desaparecieron, o fueron afectados de manera significativa por esa oleada de acontecimientos. y el boschismo no un dogma, ni un fetiche, ni un conjunto de ideas fanatizadas, sino un pensamiento político para orientar y aglutinar a los dominicanos al servicio del pueblo dominicano en su lucha por el avance y el progreso.
a propósito, recuerdo que ya para 1990, ante el proceso de cambios que se daba desde la ascensión de mijail gorbachev a la jefatura soviética, don juan expresaba con mucho tacto sus ideas y era claro que reajustaba sus tesis como era normal y natural que ocurriera, a esas nuevas realidades. quien quiera recordar eso solo tiene que leer lo que escribía y declaraba el gran maestro don juan bosch en aquellos días. esos cambios estremecieron a todas las organizaciones políticas y más, decretando un giro inevitable a la derecha en todo el mundo.
solo los dogmáticos, los esquemáticos, los excesivamente sectarios, fanatizados, fantasiosos y utópicos, colocados al margen de la realidad y de las masas de los pueblos, se negaron a asumir lo que los hechos establecían, reafirmando su falta de visión y su sentido de las ideologías como especie de religiones políticas basadas en deseos, terquedades y soberbia. quienes no han tenido la sabiduría de apegarse a los hechos se han reducido a grupos y personas parlantes sin ninguna incidencia real en los pueblos y en las luchas por el poder. el boschismo actual, encabezado por leonel, por el contrario es un… Leer mas »