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Reforma constitucional integral es la Constituyente
EL AUTOR es periodista. Reside en Santo Domingo.
Hay que olvidarse de esos políticos y hacer algo nuevo para reformar la Constitución dialogando con los campesinos, los obreros, los periodistas, los estudiantes, los abogados, los médicos, los maestros, los militares y policías, las iglesias, los pensionados, los asegurados, los empresarios, la diáspora y las amas de casas.
El pacto político que está promoviendo el presidente Luis Abinader para consensuar la modificación constitucional y blindar la independencia de la justicia será un fracaso porque se trata de dialogar con los mismos líderes políticos vinculados a la corrupción que han secuestrado el Congreso y la justicia para saquear el país.
Esa propuesta es absurda y tremendista no solo porque supone sentarse a discutir con Danilo Medina vinculado al caso Punta Catalina, Leonel Fernandez a los Tucanos, Miguel Vargas al Agua y Luz, Quique Antun al Bandex e Hipolito Mejía a sus casas veraniegas sino también porque nadie en su sano juicio va a crear las condiciones para cuando la justicia los llame sean arrestado y encarcelados.
Lo mejor que le puede pasar al pueblo es que ese diálogo se diluya y estos políticos que nos han hundido en la corrupción por más de 60 años no se reúnan porque nada bueno puede salir de tramposos y aun se reúnan impedirles que usen la ley de leyes para seguir controlando políticamente la justicia.
La Constitución con o sin pacto se ha modificado mediante la Asamblea Revisora más de cien veces después de 1844 a la fecha. Y salvo excepciones, ninguna ha beneficiado al pueblo y el actual Congreso lo controlan los mismos del barrilito y las exoneraciones que han aprobado constituciones elitistas al servicio de los ricos.
Aún así, apoyamos las buenas intenciones del presidente para reestructurar el poder moral (la Procuraduría) sacar la política de la justicia (SCJ) y (TC), despolitizar la fiscalización (la Cámara de Cuentas) sanear el Poder Electoral (JCE) pero hacer estos cambios con la Asamblea Revisora será otro traje político a la medida.
La modificación constitucional del 2010 fue un retroceso porque ha restringido la participación de la ciudadanía al excluir el Referendo Revocatorio y muchas de sus disposiciones de derechos civiles y políticos han echado por tierra el concepto de soberanía y el estado social y democrático de derecho.
El ex presidente Leonel Fernandez y los que están hoy en el poder, nos dejaron una Constitución que solo les sirve a las clases dominantes pues da mucho poder al presidente y a elites económicas pero debilita y reduce el Estado cuando debiera ser todo lo contrario hacer un Estado fuerte al servicio de la mayora.
Estamos harto de que en RD se siga utilizando la Constitución para beneficiar intereses particulares, políticos y empresariales porque la Carta Política de la Nación está contemplada y diseñada para beneficiar a la población general con igualdad y sin discriminación.
En el 2016 el candidato Abinader propuso la Constituyente para modificar la Constitución. Aunque sabemos que fue pura demagogia lograr el apoyo de la Convergencia Unitaria 2016, esta idea, de modificar la Carta Magna a través de un congreso de diputados constituyentes es hoy un clamor general de los pueblos.
Es el momento de desempolvar y aprobar el Referendo Aprobatorio que está archivado en el Congreso para consultar al pueblo como el soberano, sobre si está de acuerdo que se modifique la Constitución y que se permita que se incluya la Constituyente en la Carta Magna y que su respuesta sea vinculante.
Con estos congresistas constituyentes electos por el voto popular por un año podemos transformar al estado para quitarles poderes al presidente, distribuir con justicia el presupuesto, reducir la dependencia, aprobar el Congreso Unicameral, vincular el Referendo Revocatorio y activar al Referendo Municipal y Provincial.
Se trata de escoger una Asamblea Nacional Constituyente ANC compuestas en un 60% por diputados regionales y del 40% de diputados territoriales escogido por asambleas de campesinos, obreros, médicos, abogados, estudiantes, maestros, empresarios, y ama de casas para a través del debate refundar la Nación.
Hagamos una pausa con la Asamblea Revisora que le ha hecho tanto daño institucional a la Nación. Si es verdad que estamos cambiando como dice el presidente en la publicidad de la radio y la televisión, aprobemos de urgencia el Referendo Aprobatorio para modificar la Constitución.
Es una necesidad impostergable incluir la ANC en la Ley Sustantiva para crear un congreso de diputados con el objeto de redactar la nueva Constitución para transformar el Estado y sanear la justicia.
JPM
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que raro que caco de loca no esta escribiendo sobre los sueldos de los funcionarios, ya se harto o lo llamaron a capitulo? uno nunca sabe, ese tipo es un loquito.