No sea vencido por el malo
La vida es sumamente dura, pero hay que vivirla, como un regalo de Dios, de la naturaleza y de nuestros progenitores. Ella es producto de un plan del Creador, afectado por el enemigo y por los deseos de los seres humanos. Por eso, cada día trae su propio mal, a una vida que debe vencer cada circunstancia y sobre todo evitar lo más posible las situaciones antagónicas a la misma. No se puede dejar que el mal venza a la vida, pues ella es en sí, lo que da sentido al ser y a la sociedad.
Cada persona como energía viva y como receptora del conocimiento, debe emplear todo esfuerzo para producir una vida próspera y permanente. Ella no es automática, sino que cada quien tiene la responsabilidad y privilegio de conducir su vida hacía un objetivo determinado por sí mismo. De ahí que, cada quien es responsable de construir su historia y de su destino. Es un deber único y real, que el sabio entiende, comprende y pone en marcha paralograr lo mejor.
Si la vida no tuviera sus adversarios fuera más hermosa, pero como dijera Maquiavelo: «Las cosas son como son, no como debieran ser». Negar la realidad, sería el peor error humano cometido. Ya se está donde se está, por lo que, se debe buscar la solución luchando para salir adelante, con grandes o pocos esfuerzos, pero bien determinado a salir del abismo, en que el hombre ha caído. No es una naturaleza caída, ni una creación hecha para caer, sino un error humano.
Gracias a Dios, que ha sido el hombre que se ha desviado del camino correcto, por tanto, éste tiene la oportunidad de enderezar sus pasos, para volver al camino para el cual existe. Llegar a ser un ser humano de bien, capaz de fortalecer valores morales, espirituales y divinos, que le permitan edificar una vida buena, y que responda tanto al propósito de Dios, como al de la naturaleza y a la de sus progenitores; una vida fértil en felicidad, proyectando el bien como su razón de ser.
El mundo en que se vive, está lleno de males, es como que el fin del hombre es hacer lo malo. Esta actitud evidencia el egoísmo de los que viven, pues no se está pensando en los que vendrán después, quienes encontrarán un mundo en crisis. Pero, es tiempo de reflexionar, puesto que se debe velar por los descendientes, para que éstos encuentren un mundo mejor que el actual. Un mundo de paz, de armonía, de valores y en crecimiento humano y material.
No sea vencido de lo malo, es un llamado a que se luche contra el mal, para no caer en sus trampas o redes. Es una manera de no propagar el mal, o más bien, es una forma de estar alerta ante todo aquello que disminuye la condición humana. Llámese malo, todo lo que en la Biblia, en lo que respecta a Jesucristo y el Espíritu Santo, definen como malo. En ese sentido, los creyentes en Dios, deben conducir sus vidas apegados, en todo lo posible, a lo que Dios dice; eso implica vivir conforme a la voluntad de Dios.
Por otro lado, se debe vencer el mal con el bien. Esta aptitud, no es únicamente religiosa, sino que es una adherencia de la vida misma. No es un requisito sólo religioso, sino que es un deber social y humano, como parte integral de la vida. Pero, algunos creen que quienes tienen que terminar con el mal, son los religiosos. Estos olvidan que la religión, en algunos, puede llegar a ser parte del mal, de ahí que, hay una vergonzosa historia religiosa, a pesar de los grandes aportes que ella ha dado.
Una de las dificultades para vencer el mal, es que muchas actividades malignas dejan grandes recursos en el mundo del placer, del poder, de las vanidades, y más que todo en el diario vivir. Estos comportamientos son los que enorgullecen a las personas, considerándose superiores a los demás, y así también surgen como respuestas a situaciones anteriores pagando mal por mal, o haciendo venganzas. El mal no debe utilizarse como medio de obtener ningún beneficio, pues en realidad es peor lo que produce.
El apóstol Pablo escribió: «No paguéis mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza. No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal» Rom. 12:17- 21.
jpm-am
en este artí**** fausto piña se distancia un poco de sus creencia autoimpuesta, cita a maquiavelo «las cosas son, no como debieran ser», dice «si la vida no tuviera adversidades fuera mas hermosa.» la vida es mas hermosa por las adversidades que nos presenta cada día, si todo fuera color e rosa la vida fuera muy aburrida, el problema de los ministro cristiano es que están arropado por la teología de la prosperidad, no creo en sus predica.
el mismo cuento…el mismo telele de siempre….el mismo blah blah blah…..y ni el dios ni el diablo han sido visto por nadie con un iphone?