Licey presenta a Adriana Fernández como madrina temporadas 2020-2022

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La madrina entrante Adriana Fernández de Pou y la saliente Montserrat Alsina Díaz, con líderes de la Rama Femenina del Licey: por la izquierda Sandy Pou de Fernández y la presidenta Mercedes Elmúdesi. A la derecha Jocelyn Baba de Pichardo y la vicepresidenta Matilde Dargam.

SANTO DOMINGO (Licey.com).- La Rama Femenina del Club Atlético Licey Inc. presentó a su madrina para las temporadas de béisbol invernal dominicano 2020-2022, Adriana Fernández Pou, estudiante del décimo grado del Colegio Carol Morgan.

La nueva madrina es hija de Sandy Pou de Fernández y Miguel Ángel Fernández Elmúdesi, pasado presidente, directivo desde hace más de 20 años y actual tesorero del club. Es nieta de Don José Manuel Fernández, presidente y directivo por más de 40 años del Licey, a quien se le dedica el torneo de 2020-2021; y de Mercedes Elmúdesi de Fernández, presidenta de la Rama Femenina. 

Es tataranieta de Don Geo Pou Primet, fundador del glorioso club y mecenas del béisbol, quien fue exaltado al Pabellón de La Fama del Deporte Dominicano. Adriana tiene un hermano mayor, José Manuel. Su tía Lourdes F. de Defilló fue también madrina del glorioso conjunto, al igual que sus primas Paloma y Brissa Esteban Pou.

El íntimo acto de imposición de banda fue en la residencia Fernández-Elmúdesi, con estricto protocolo de bioseguridad y que encabezó el presidente del Licey, doctor Domingo Pichardo, quien se mostró muy emocionado por ser Adriana nieta de Don José Manuel Fernández, a quien consideró como un mentor suyo, dada la gran amistad que tuvo con su padre, el legendario presidente del club, ingeniero Domingo Ernesto “Monchín” Pichardo.

Fernández Pou, quien ha sido liceísta desde que nació, le fascina aprender cada día más sobre el béisbol dominicano. Desde que tenía 4 años empezó a asistir al estadio Quisqueya, algunos fines de semana, para ver los juegos de pelota, aunque a esa edad todavía no comprendía, pero le gustaba ir a apoyar a su equipo favorito.

Afirma que ser la madrina del Licey es un gran honor y un gran compromiso. Dice sentirse muy orgullosa con este nuevo rol y comprometida a pesar de la época que atravesamos, en representar de la mejor manera posible al equipo más antiguo y emblemático de nuestro país.

Para mí es todo un reto ser madrina en estos tiempos atribulados, pero como a mí me encantan los desafíos, sé que pondré mi mayor y mejor esfuerzo para lograr hacer la diferencia e impregnar toda mi energía positiva a mis amados Tigres”, se expresó.

of-am

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