Ley Luz Verde de Nueva York bajo asedio de la Casa Blanca
NUEVA YORK.- La Ley de Luz Verde que otorga la licencia de conducir a indocumentado sigue creando tensión entre el presidente Donald Trump y el gobernador Andrew Cuomo.
Cuomo defendió la directriz esta semana durante una entrevista con la radio pública.
«Es primordial garantizar que las personas que conducen en nuestras carreteras han aprobado un examen de manejo», declaró.
«Es un problema de seguridad pública. Incluso si estos residentes no cumplen con las leyes de inmigración, aún así pueden obtener una licencia de conducir si aprueban el examen. El Estado debe asegurarse de que están capacitados para conducir en nuestras carreteras”, añadió el mandatario.
Cuomo enfatizó que su gobierno no cederá a la demanda de las autoridades de inmigración de tener acceso a la base de datos del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV).
“Es un riesgo para el público y para nuestros oficiales. En la actualidad están en mayor peligro al carecer de esa información», dijo Matthew Albence, director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), durante una conferencia prensa el jueves.
Albence, acompañado de un séquito de agentes de la Patrulla Fronteriza, arremetió contra la directriz desde la Cárcel del Condado de Rensselaer, en el norte del estado.
“(La ley) hace menos efectiva las acciones de las autoridades de inmigración para realizar su trabajo (…) se decretó con objetivos políticos. Necesitamos esa información para hacer nuestro trabajo, sin importar si el sujeto de nuestra investigación es un ciudadano estadounidense, un residente permanente legal o un indocumentado”, sentenció Albence.
El funcionario argumentó que, durante el ataque del 28 de diciembre en la casa de un rabino judío jasídico en Monsey, condado de Rockland, los agentes de ICE que pretendían colaborar con la policía local no pudieron rastrear las placas por la prohibición de acceso a la base de datos del DMV.
«No pudimos ejecutar esa tarea. Tuvimos que llamar a uno de nuestros oficiales de la fuerza de tarea para que lo hiciera por nosotros. ¿Y saben cuándo obtuvimos esa información? Una hora y media después”, expresó.
“REPRESALIA POLÍTICA”
Albence viajó a Nueva York días después de que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) suspendió la inscripción de Nueva York en el programa Global Entry, que facilita la entrada de viajeros confiables por los cruces fronterizos y las garitas de seguridad del aeropuerto.
El DHS canceló el programa como “represalia política” por las políticas santuario de Nueva York, contrarias a la política de tolerancia cero del gobierno de Trump.
“Liberan a extranjeros criminales peligrosos para que se aprovechen del público”, dijo Trump en el tercer Estado de la Unión sobre las políticas santuario.
Cuomo, por su lado, acusa al gobierno federal de «extorsionar» a Nueva York para que anule sus políticas santuario y afirma que Trump usa la ley de inmigración como pilar de su campaña de reelección.
«Es una persecución política», dijo Cuomo el jueves. «El Gobierno federal tiende a tomar represalias. Es una extorsión política lo que está haciendo al suspender el programa Global Entry”.
Cuomo señala que ICE quiere los registros del DMV para recopilar información sobre los inmigrantes indocumentados que acudieron en masa en diciembre para solicitar las licencias de conducir después de que la Ley de Luz Verde entró en vigor.
“ICE quiere detectar a los inmigrantes para deportarlos por miles, incluso aquellos que viven en paz, que no han cometido un crimen, que no son violentos», acusó Cuomo.
Pero Albence negó que ICE planee deportaciones masivas en Nueva York.
«Ejecutamos acciones específicas», declaró. «No necesito que el estado de Nueva York me diga quién está aquí de forma ilegal y quién no. Para eso estamos entrenados».
Un portavoz de Aduanas y Protección FRONTERIZA (CBP) confirmó en días recientes los detalles del despliegue planificado que informó por primera vez el New York Times.
La agencia informó que un grupo agentes de la Unidad Táctica de la Patrulla Fronteriza (BORTAC) se desplegarán en ciudades clave, incluidas Nueva York y Newark, Nueva Jersey.
Los oficiales de BORTAC, considerados el equipo SWAT de la Patrulla Fronteriza, están entrenados para operaciones de alto riesgo y en general encabezan operaciones contra objetivos violentos.
Otros 100 oficiales de la CBP serán desplegados en enclaves proinmigrantes como Chicago, San Francisco, Houston, Los Ángeles, Boston, Nueva Orleans, Atlanta y Nueva Orleans.
“ICE intenta militarizar nuestras calles, aumentar las redadas e intimidar a los neoyorquinos. Continuaremos haciendo lo correcto y haremos frente a la guerra de esta administración contra las comunidades de inmigrantes», dijo Unión de Libertades Civiles de Nueva York en un comunicado.
Fuente: TELEMUNDO