La tribuna de la AIRD
Compartiendo este año mesa con los colegas Juan Bolívar Díaz, Fausto Rosario Adames, Persio Maldonado, Luisín Mejía y Danny Alcántara, concurrí al almuerzo anual de la Asociación de Industrias de la República Dominicana, en el que correspondió la exposición central a Franklin Báez Brugal, un dominicano merecedor de la admiración y el respeto que se le dispensa en el mundo empresarial y en otras áreas de la sociedad.
La tribuna había quedado abierta con las palabras del presidente de la AIRD, Campos de Moya: “El industrial y empresario de décadas anteriores fue el fruto de circunstancias que ya no existen pero que nos han llevado a donde estamos hoy. El nuevo industrial es producto de otra coyuntura, donde son claves conceptos como la competitividad y la transparencia…Es momento de que como sociedad dejemos atrás ese régimen paternalista al cual nos hemos acostumbrado, en el que esperamos que el gobierno sea quien resuelva todo…”
La charla de Franklin Báez Brugal, “Experiencias, inquietudes y anhelos”, fue llana sin rebuscamientos conceptuales y con apenas una cita, Winston Churchill: “La democracia es el menos malo de los sistemas políticos”, pero se trató de una descripción nada pesimista, si muy crítica y profunda sobre la realidad dominicana. Tratando de resumir, me quedo con siete anotaciones:
1-20 años atrás la industria generaba el 23.4% del valor agregado nacional, en 2014 apenas era responsable del 14.4%, nueve puntos porcentuales menos, incluyendo en esto a las zonas francas.2-Luce que existe un serio problema de competitividad, (esto lo dijo en referencia a relación desventajosa para el país en todos los tratados de libre comercio que ha suscrito).3-Los sueldos que reciben la mayoría de los empleados del sector público y privado son bajos, y no son suficientes para cubrir sus necesidades básicas, pero la preparación que estos tienen no llenan los requisitos mínimos necesarios para poder ser competitivos.
4.-“Somos inmunes a los ciclos, porque aquí si hay sequía sube el PIB, al igual si llueve mucho; si el precio del petróleo sube también sube el PIB, y si baja continúa creciendo, si las exportaciones se disparan sube el PIB, pero si caen también sube. La verdad es que parece que estamos bendecidos por alguien. 5- No necesitamos más leyes de las que tenemos, de lo que estamos carentes es de comportamientos ejemplares.
6-Los políticos quieren controlar, pero no quieren ser controlados, y aspiran a perpetuar sus privilegios en detrimento de quienes les dan su voto. (En ese contexto cuestionaba la no aprobación de la ley de partidos)
7-En nuestro país abundan casos como el de políticos que han pasado de la pobreza a la opulencia en un abrir y cerrar de ojos, empresarios que se enriquecen evadiendo impuestos, y narcotraficantes que han hecho fortuna con su actividad, y se pasean en todos los ambientes.
Aparte, estuvieron los galardones entregados en dos renglones, Labor Institucional de Apoyo al Desarrollo industrial, que correspondió a Proindustria, en la persona de su directora Alexandra Izquierdo, y al Mérito Industrial, a los hermanos José Miguel y Roberto Bonetti Guerra.
En Proindustria se reconocían los aportes innovadores al sector manufacturero y a la sociedad, el apoyo y la defensa de la industria nacional y los proyectos de estudios realizados, y en el caso de los Bonetti, la trayectoria profesional de ambos industriales y sus contribuciones al desarrollo del sector productivo nacional, realizadas en forma complementaria y coordinada bajo un mismo grupo empresarial.