La resistencia a Maduro y el ejemplo dominicano 

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El autor es economista. Reside en Suiza

POR FABIO RAFAEL FIALLO

Cuando franceses de idearios políticos divergentes e incluso antagónicos se batían unidos en contra del horror nazi, el escritor y militante comunista Louis Aragon escribió un poema, “La rosa y la reseda”, que constituía un elogio del espíritu de lucha de la Resistencia.

El título del poema era de por sí un llamado a la unidad: la rosa (roja) representaba a los diversos movimientos socialistas de la época, mientras que el color blanco de la flor de la reseda constituía el símbolo de la nobleza francesa. Todos unidos, pues, en contra de las tropas nazis y sus colaboradores, tal era el mensaje de Aragon.

 

Todo el poema apunta a la necesidad de mancomunar fuerzas en pro de un ideal – el de la liberación de Francia – que debe estar por encima de cualquier tipo de desavenencia o de rencilla. De ese poema se suelen citar los siguientes versos que reflejan el tenor del mismo: “Loco es hacerse el quisquilloso mientras el granizo destruye la mies. Como loco es pensar en sus querellas en medio del combate común” (traducción libre de este autor).[1]

 

            Aragon escribió esos versos en 1943, es decir, después de que el bochornoso pacto germano-soviético quedase hecho añicos con la invasión de la Unión Soviética por las tropas hitlerianas, y luego de la entrada de Estados Unidos en la guerra a raíz del ataque a Pearl Harbor.

 

El poema encajaba, pues, en el contexto geopolítico de aquel momento, en el que dos sistemas irreconciliables (democracia capitalista y totalitarismo socialista) formaban parte de la coalición antinazi. Las rivalidades habrían de resurgir en la época de la Guerra Fría, pero mientras tanto, no había lugar para hacerse el quisquilloso, ya que el imperativo común era derrotar a las potencias del Eje.

POST TRUJILLO

 

Salvando las diferencias, en una encrucijada de la misma naturaleza se encontraba la República Dominicana, a principios de la década de los 60 del siglo pasado, es decir, en las postrimerías de la tiranía de Rafael Trujillo, ejecutado finalmente en mayo de 1961 por héroes que arriesgaron su vida (la mayoría de ellos perdiéndola) para liberarnos del yugo opresor al que estábamos sometidos durante 31 largos años.

 

            En la caída de aquella dictadura, jugó un papel determinante la solidaridad internacional. En efecto, tras el derrocamiento de los dictadores Perón, Rojas Pinilla, Pérez Jiménez y finalmente Fulgencio Batista, se levantaban voces a través de todo el continente para decir que había llegado la hora de ayudar al pueblo dominicano a terminar con la dictadura de Trujillo. 

Más importante aun, el régimen dominicano había quedado fragilizado por las sanciones económicas y diplomáticas impuestas en 1960 por la Organización de Estados Americanos (OEA) gracias en gran medida al activismo democrático del presidente venezolano de ese entonces, Rómulo Betancourt.

 

            De más está decir que las manifestaciones de solidaridad internacional y las sanciones de la OEA fueron acogidas como una tabla de salvación por la inmensa mayoría de dominicanos y en particular por los valientes antitrujillistas que resistían indefensos los embates y la represión del régimen trujillista.

Por supuesto, profundas eran las divergencias que existían entre estos últimos en cuanto al derrotero político que debía tomar el país después del derrocamiento de la dictadura; pero por el momento, no había lugar para hacerse el quisquilloso, como dijera Aragon: para los dominicanos que sufrían la represión, acabar con el trujillismo era la prioridad fundamental.

 

            La aprobación y el apoyo de los antitrujillistas a la solidaridad internacional se pusieron de manifiesto a raíz de la muerte del tirano, en particular al conocerse la intención de la OEA de levantar las sanciones después de que Joaquín Balaguer, el presidente designado por Trujillo, iniciara un simulacro de apertura política, permitiendo algunas manifestaciones y actividades de la oposición sin por ello abstenerse de reprimirlas antojadizamente.

 

            Tan pronto como fueron conocidas esas intenciones de la OEA, los dirigentes de dos de las organizaciones que en ese entonces encabezaban la lucha antitrujillista decidieron viajar a Washington (sede de la OEA) para abogar por el mantenimiento de dichas sanciones mientras no se pusiese en marcha un real proceso de transición a la democracia en nuestro país. Los dirigentes en cuestión eran mi abuelo el Dr. Viriato Fiallo, de la Unión Cívica Nacional, y Manuel Tavárez Justo, de la Agrupación Política 14 de Junio (1J4).

 

            Fiallo, quien declaraba estar “tan lejos de Franco como de Kruschev” y manifestaba que su lucha no podía tener como objetivo pasar de una dictadura a otra, sea ésta de derecha o de izquierda, mantuvo siempre una posición firmemente anticomunista. Tavárez Justo, por su parte, nunca negó su afinidad con el castrismo. Ambos, sin embargo, decidieron poner de lado esas divergencias y viajar juntos a Washington para defender la causa que al respecto los unía.

Quien se abstuvo de participar en aquel viaje fue el Profesor Juan Bosch –a la sazón presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD)– que empeñado como estaba en granjearse el apoyo de los sectores trujillistas, enarboló la consigna del “Borrón y cuenta nueva” y llegó incluso a proponer un “gobierno de concentración nacional” con Ramfis Trujillo como jefe de las Fuerzas Armadas, lo que fue rechazado enfáticamente por los combatientes antitrujillistas y un amplio sector de la población.

ENCRUCIJADA VENEZOLANA

 

            Una encrucijada similar la encontramos hoy en Venezuela, donde partidarios de la oposición y miembros del llamado “chavismo crítico” ponen de lado sus querellas ideológicas y combaten al régimen que sojuzga a ese país.

 

Al igual que comunistas y demócratas liberales de Europa vieron con regocijo la incorporación de la Unión Soviética y de Estados Unidos a la guerra en contra del Eje nazi-fascista, y al igual que en República Dominicana antitrujillistas liberales y pro socialistas se unieron para exigir el mantenimiento de las sanciones impuestas por la OEA contra la dictadura trujillista, hoy venezolanos de sensibilidades políticas diferentes muestran su aprobación a la Declaración de Lima a favor de la reinstauración de la democracia en Venezuela (firmada por los doce países de mayor peso económico y político de América Latina) así como a las sanciones financieras que, con ese mismo objetivo, ha impuesto el gobierno de EEUU a personeros e instituciones del régimen venezolano.

 

Para destacar aun más la analogía con el caso dominicano, cabe señalar que la posición del Profesor Bosch de no participar en 1961 en la lucha por el mantenimiento de las sanciones impuestas por la OEA al régimen trujillista tiene su paralelo en la decisión tomada recientemente por algunos gobiernos latinoamericanos de no votar a favor de la adopción por parte de la OEA de una resolución rechazando la Asamblea Constituyente convocada por el Presidente Maduro sin respetar el procedimiento estipulado por la Constitución venezolana. Entre esos gobiernos figura el de República Dominicana, presidido por Danilo Medina, uno de los discípulos más destacados de Bosch.

 

Y que no se diga, como arguyen falazmente los cada vez más escasos defensores del régimen castromadurista, que, a diferencia de la República Dominicana durante la funesta “Era de Trujillo”, el régimen de Nicolás Maduro no es una dictadura.

 

A este respecto, basta con hacer referencia al abrumador informe sobre la deriva dictatorial del régimen venezolano que acaba de publicar la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Al presentar dicho informe, el portavoz de la misma denunció la existencia de “una política destinada a reprimir e infundir temor”, atribuyó a “las más altas autoridades del gobierno” la responsabilidad de las violaciones de los derechos humanos y pidió a dichas autoridades que “respeten el derecho de los ciudadanos a la libertad de expresión, asociación y asamblea pacífica”.

LA IZQUIERDA LATINOAMERICANA

 

Por todo ello es patético el espectáculo que actualmente ofrece cierto sector de la izquierda latinoamericana que ayer enfrentó con firmeza las dictaduras de derecha pero que hoy defiende al corrupto, inepto y criminal régimen castro-madurista o mantiene un silencio cómplice ante los desmanes del mismo.

Si esa izquierda ha perdido el prestigio que con o sin razón pudo haber tenido en el pasado, la culpa es de ella, y de ella sola. Culpa de su anquilosamiento intelectual; culpa de su obstinación ideológica; culpa, finalmente, de su indolencia y vergonzosa complicidad con el opresor mientras el pueblo venezolano libra un honroso combate por el rescate de su libertad.

f.fiallo@ymail.com

JPM

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José Flández
José Flández
7 Años hace

gran artí****… este señor es un verdadero demócrata.

Miguel Espaillat
Miguel Espaillat
7 Años hace

el autor con este artí**** da pruebas de tener basto conocimientos de la historia europea y a la vez ser un gran ignorante de la historia latinoamericana. si los tuviera, no le diera a su artí**** un final tan infeliz, donde no veo el plan cóndor, las dictaduras apoyadas por el imperio, ni el derribo de democracias derribadas también por el mismo imperio para sustituirlas por dictaduras. a fiallo se le pasa, que las dictaduras que el nombra fueron impuestas y apoyadas por el imperio y que la revolución cubana fue quien inspiró a esos pueblos a acabar con esas… Leer mas »

LaFilma
LaFilma
7 Años hace

este es el peor artí**** que he leído en mi vida y disculpa……. deja aclarar algo: en venezuela no hay dictadura….. de qué hablas? al parecer no sabes el concepto de lo que es dictadura. dios mio porqué hay gente inteligente cerrada? para concluir, maduro es el mejor presidente de latinoamerica, duela a quien le duela….. así tiene que ser un jefe de estado, no dejarse amedrentar de nadie…. no ser lacayo como los otros gobiernos entreguistas a usa…..

José Flández
José Flández
7 Años hace

excelente artí****… felicito al autor.

Rosa Fernandez
Rosa Fernandez
Responder a  José Flández
7 Años hace

asi de excelente como tu deleite …verdad???? babas……

Rosa Fernandez
Rosa Fernandez
7 Años hace

este escribidor de marras parece sacado de una pelicula de terror….su rostro lo descubre….. tiene una mescla de lincatropo y quirópteros filostómidos