La protesta equivocada contra la corrupción
En nuestro artículo titulado “Presidente Medina, Súmese a la cruzada contra la corrupción” quedamos pendiente hacer algunas precisiones, visto que de un modo u otro, todos, estamos obligados a reducir al mínimo, las malas costumbres y malas prácticas históricas en la gestión, tangencial, del presupuesto Nacional.
La actual protesta es para el cierre de la OISOE, que es el buque insignia de la corrupción del gobierno de la “Liberación» desde 1996. El problema es que estamos haciendo la protesta equivocada: Los grupos de protestas están haciendo una exigencia equivocada, poco inteligente y de corto alcance; lo que significa que no resolveremos el problema. ¿Por qué?.
Porque el Presidente Medina en cualquier momento, con un decreto, puede pasar las funciones de la OISOE a obras públicas y ésta hacer una reestructuración interna y probablemente todo continuaría igual. El mismo mecanismo mafioso podría continuar operando, por lo que la actual protesta es equivocada.
Antes de protestar «a lo loco» hay que entender la conspiración malvada que hay detrás de todos los males de nuestro país, quienes son los responsables, quien es el mandante o actor intelectual, a fin de ser efectivos en esta cruzada.
El problema no es que Feliz Bautista tenga y se jacte de 6 sentencias a su favor, que impiden un verdadero juicio de fondo, donde podría probarse (de nuevo) su culpabilidad. El problema no es que Pimentel kareh no sea sometido a la Justicia, que solo sea “investigado”; dejando ver que, el procurador no se atreve a someterlo, que podría revelar informaciones que comprometerían al entorno más intimo de Palacio, cayendo en el mismo chantaje de Bautista a Leonel: “Esta vez no caigo solo”.
El problema es otro: La Suprema Corte de Justicia y sus jueces son el verdadero problema. Para resolver dicho problema de manera definitiva, debemos lograr la dimisión del pleno de jueces de la Suprema.
El primer objetivo de la cruzada contra la corrupción debe ser un cambio total del pleno de jueces, debido a que, ellos, protegen y cubren a los corruptos del sistema mafioso instalado por el gobierno anterior, antes de salir del poder, para proteger y cuidar los bienes de los cuales aparentemente se han apropiado: Según cuentan, y para que se haga una pequeña idea del atraco al erario público, solo una persona tiene la friolera suma de más de US$ 5 mil millones de dólares -No se sorprenda, la deuda pública ronda los US$ 40 mil millones, el presupuesto anual (más de US$ 10 mil millones) aparentemente no bastaba para sus tangentes y desviaciones a empresas y fundaciones-.
No importa cuántas protestas se realicen, mientras la justicia responda a «Lío-nel» no habrán condenas a los corruptos, solo «liberados» que se burlarán y le sacarán la lengua al pueblo, mientras hacen la señal de la «L» posando a los medios.
Seguramente pocos se han preguntado ¿Por qué «Lío-nel» exigió que para aprobar la reelección los Senadores también debían re-elegirse? La respuesta es simple: Con la misma mayoría «Lío-ne-lista» en el Senado -igual que ahora- se perpetuaría el sistema de impunidad y corrupción por otros 7 años, es decir hasta el 2024.
Si el Consejo Nacional de La Magistratura se convoca en la fecha que corresponde, en el 2017, re-elegirían a los mismos mequetrefes actuales (en la Suprema) o elegirían a otro grupo de marionetas que bailen a ritmo de «perreo» o cualquier otro género degradado, propio de la actual sociedad decadente que ellos mismos vienen creando, legitimando el atraco al erario público desde el 1996:
El propósito aparentemente es hacer pasar por fortunas limpias, lavadas en su propio paraíso fiscal, en la mejor zona franca de la corrupción, del Narco-tráfico, tan conveniente a la criminalidad internacional. Como consecuencia habrá una gran brecha entre esta nueva realeza y los miserables. No hay que leer a Víctor Hugo, para estimar lo que pasará. Llama la atención saber que los mismos asesores de este macabro plan también ayudaron a perpetuar al régimen (dictatorial) de Chaves y Maduro. Si el Presidente Medina no ayuda a evitar y rompe éste diabólico plan, será percibido tanto o más culpable que “Lío-nel” de toda la desgracia nacional, por los siglos de los siglos.
Debemos provocar, como sea, que el senado, si desea ser reelecto, convoque -idealmente por adelantado- al Consejo Nacional de la Magistratura, para lograr los cambios necesarios para un correcto balance y equilibrio entre los tres Poderes del Estado, para crear como consecuencia una República más funcional y correcta o simplemente menos corrupta, donde las personas honestas también tengan derechos, independientemente de banderias o escudos políticos.
La protesta y la estrategia correcta
Las protestas deben ser más inteligentes y dirigidas a resolver (definitivamente) el problema.
Las protestas y cadenas humanas deben hacerse a nivel nacional, cada semana, simultáneamente en el Centro de los Héroes –La Feria- y en cada provincia, frente a la casa de cada “honorable” senador:
I. Para recordarle, a cada uno, cual es el sistema de justicia que queremos y que todos ellos deben reformar. Esto es mil veces más estratégico y más importante que la famosa reforma policial. La solución debe ser sistémica, empezando de arriba hacia abajo y no al revés.
II. Para recordarle -a cada uno- quienes los eligen y para qué.
III. Para recordarle -a cada uno- que es responsable de defender y representar al pueblo Dominicano, no a los bandidos, y que con sus malas acciones retrasan el desarrollo del país y el progreso de los más pobres.
Ese comportamiento enfermizo es el que ha convertido nuestra falsa democracia (representativa) en una democracia corrupta donde un poder del estado encubre al otro. La medicina correcta es la protesta continua, pero en el lugar de trabajo y donde viven los responsables, que de manera inmerecida buscan re-elegirse para cubrir, tapar y blindar el mayor daño económico de la historia, contra los más desposeído. Lo repito la única lucha realmente eficiente contra la pobreza es la lucha contra la corrupción. Lo demás es politiquería de poca monta.
Presidente súmese a la cruzada contra la corrupción, a la lucha del pueblo, de una manera más contundente, para que pueda lograr realizar su obra de gobierno de manera plena. Mientras más temprano mejor, pues se interpretará como una acción sincera y no politiquera.
Se está demostrado que ésta es una verdadera cruzada, con un propósito noble, que no parará hasta lograr el gran objetivo (ya clarificado) de cambiar y recuperar La Suprema Corte de Justicia, para que sea verdaderamente independiente, capaz de enfrentar los demás poderes del estado, si es necesario, para un verdadero balance o equilibrio democrático a fin de lograr hacer realidad el nublado concepto de «República».
Lo inteligente, Presidente, es que sea usted quien encabece y dirija ésta gran cruzada, antes de que el juego se convierta en «atraparlo a usted” cuya única culpa ha sido, a costa de su propio sacrificio, ayudar en algún momento a que “Lío-nel y su combo” llegaran al poder. Presidente, usted aún está a tiempo de enmendar los errores históricos, de enderezar el sendero del partido, tiene una oportunidad única de recuperar los valores sustantivos que le dieron origen, según la concepción original de don Juan. Si no lo hace, ni el pueblo, ni la historia se lo perdonará.
Presidente, cuente únicamente con el pueblo, que el pueblo todavía cuenta con usted.
wandyramirez@gmail.com