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La maskirovka rusa en la crisis de Ucrania
El que piense que los comunistas son agradecidos y devuelven los favores recibidos, peca de iluso y es muy tonto en materia de percepción política. Lo primero es que ellos carecen de gratitud y en añadidura a ello, las primeras víctimas de sus acciones desde el poder, son aquellos que precisamente les dieron las manos cuando lo necesitaban. La historia está llena de ejemplos y para eso, vamos a citar solo unos cuantos.
Cuando la revolución cubana encabezada por Fidel (Hipólito) Alejandro Castro Ruz se hizo del poder, todos sus célebres comandantes de batallas fueron hechos prisioneros, otros fusilados , otros «perecieron en accidentes de avión» y otros como el «El Che», lo dejaron ir para «expandir» la revolución y esa fue su tumba final. De todo ese grupo que contribuyeron que Fidel Castro asumiera el poder en Cuba, solo quedaron él y su hermano Raúl Modesto. Los demás pasaron a «mejor vida».
Cuando el traidor de Sabaneta Tte. coronel Hugo Rafael Chávez Frías fue hecho prisionero y encarcelado en la prisión militar de la isla de Orchila el 12 de abril del 2002, después de haberle dado a su régimen la misma medicina que él intentó en contra del gobierno de Carlos Andrés Pérez Ródriguez, un batallón militar comandado por el coronel Raúl Isaías Baduel rescata ha Hugo Chávez de la cárcel y lo traslada en helicóptero al Palacio de Miraflores para que asuma de nuevo sus funciones de presidente.
El agradecimiento de Hugo Chávez a ese gesto fue que el exGral. Raúl Isaías Baduel actualmente guarda prisión en una cárcel venezolana conjuntamente con su hijo Raúl Baduel Jr..
Tras la muerte de Vladímir IIich Uliánov mejor conocido como «Lenín», el que fuera la figura máxima de la Revolución Bolchevique, asumió el poder Iósif Vissariónovich Stalin, el más cruel y sanguinario de los gobernantes rusos y una de sus primeras medidas, fue la famosa «Gran Purga», la cual hizo que saliera al exilio a México a Lev Davidovich Bronstein, mejor conocido como León Trotsky uno de los artífices de la Revolución de Octubre. Stalin lo mandó ha asesinar allá en su propia casa.
Ahora vemos el caso de la Rusia actual. Cuando el socialismo se derrumbó por ser inoperante y haber llevado a la ruina a la exUnión de República Socialista Soviéticas, (URSS), Occidente les tendió las manos a la descalabrada economía rusa, insertándola entre las naciones europea para la obtención de créditos y participando en la comercialización de sus hidrocarburos para dinamizar su deteriorada economía. Una vez en cierta forma recuperada, el presidente Vladimir Vladimirovich Putin Pútina en su papel de exagente de KGB y encerrado en sus pretensiones imperiales, comenzó a realizar tropelías internacionales cuando invadió Osetia del Sur y recientemente Crimea, con el fin de anexarlas a Rusia.
Pero, aparte de las malas intenciones que siempre adornan a los izquierdistas en sus conductas políticas, quiero en este humilde aporte tratar algo que es muy usual en el proceder ruso, sobre todo, en el campo militar a la hora de ejercer dominio o conquistas. Es lo que en las prácticas del ejercicio en Rusia se conoce como «La maskirovka» o lo que es igual: la decepción militar. Viene siendo como el arte de engañar al enemigo para sus conquistas militares.
Son las acciones ejecutadas con el único objetivo de desorientar a los adversarios sobre las capacidades, motivaciones o intenciones reales de las fuerzas militares propias, promoviendo con ello que el contrario conlleve a un análisis erróneo a fin de que obtengan conclusiones falsas. Estas prácticas en el manual militar ruso, fueron llevada al máximo en la anexión de Crimea hace casi un año por parte de Rusia. Huelga decir, que ante la mirada atónita de Occidente y, sobre todo, del timorato que ocupa la Casa Blanca, el cual, como siempre he sostenido, es el mayor peligro para los Estados Unidos.
No es la primera vez que Rusia hace uso de la «maskirovka» para logar sus objetivos. Ya lo implementó en la Batalla de Kulikovo; de la misma manera en contra de Adolf Hitler Poz en la operación militar denominada «Jassy-Kishinev efectuada en el 1944 y, recientemente, el año pasado con la anexión de Crimea por parte de «fuerzas cladestinas» . En este tipo de operaciones hay una palabra clave para el tiunfo de ese lineamiento militar: la sorpresa.
Mientras el timorato y descuidado presidente norteamericano Barack Hussein Obama, se la pasa promulgando acciones ejecutivas para favorecer a 12 millones de personas ilegales de México y Centromérica que han violado las leyes migratorias, han usado documentaciones falsas, han mentido a las autoridades y se han constituídos en una carga para la nación en materia de salud, educación, viviendas, etc. De la misma manera vive jugando golf en Hawai y vacacionando con la familia; dispone de manera unilateral sin el Congreso a «negociar» sin obtener nada a cambio con la dictadura castrista, la cual luce descrépita, sin recursos y desesperada para que le levanten el embargo, los rusos poner en práctica en Europa su «maskirovka» y se hacen de Osetia del Sur y de la península de Crimea en Ucrania.
Bajo esa modalidad y en forma sorpresiva, los rusos llegaron a Crimea bajo el manto de la oscuridad, con sus uniformes verde oliva, sin ningún distintivos y enmascarados, a los cuales los lugareños les llamaron «los hombres verdes». Como era de esperarse, ante la inquietud de la prensa y al ser cuestionado sobre estos soldados desconocidos en Crimea, el presidenre ruso Vladimir Putin negó que fueran sus soldados . Ya sabemos que la negación de los comunistas en admitir sus fechorías, tiene el mismo valor que un papel de sanitario. Poco tiempo después, en marzo del 2014 el Parlamento ruso aprobó la anexión de Crimea a Rusia.
Siguiendo los rusos con su «maskirovka», en agosto del año pasado fueron mostradas por la televisión imágenes de camiones de esa nación supuestamente cargados con agua y alimentos para niños y también «ayuda humanitaria» en la zona de los conflictos ucraniana. Obviamente, fue una farsa y los camiones pintados de blanco estaban llenos de armamentos y equipos de defensa aérea rusa para los rebeldes que combaten al gobierno de Petró Poroshenko. Huelga decir que los puestos de «controles» estaban formados por soldados rusos lo que hizo expedito el paso de los camiones para «ayuda humanitaria» en la región.
En síntesis, puedo afirmar que mientras los hijos de Pedro El Grande siguen aplicando en la crisis de Ucrania su «maskirovka», el musulmán nacido en Hawai mister Barack Hussein Obama, está en lo suyo, haciéndole la vida más flexible a la tiranía castrista, minimizando el embargo, haciéndole llegar más dólares a la dictadura, promoviendo el flujo de turistas norteamericano y complaciendo ha Alex Castro el hijo del tirano para que los cubanos tomen «Coca Cola» y disfruten su «Mac Donald». Y obviamente, «esperanzado» en que el turismo norteamericano «ayude» a derrumbar la satrapía de los Castros. En buen dominicano les podemos advertir a mister Obama: !Sueña Pilarín! si él piensa que con la llegada de turistas norteamericanos la tiranía del terror va a caer.
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