La generación de los intolerantes
Soy educadora a nivel de edad preescolar desde hace más de 25 años por lo que puedo hacer una comparación generacional entre mis alumnos.
Reflexionando en esto, llama mucho mi atención el nivel de intolerancia de los niños actualmente.
¿Y esto a qué podríamos atribuírselo? – Mi mente trata de trasladarse a años anteriores y ver qué hay diferente para que estos chicos tengan tan bajo nivel de tolerancia frente a la frustración que les genera que no se haga lo que ellos quieren, en el momento en que así lo quieren.
Entonces pienso, que quizás no hay nada raro en ellos. Que no se debe a que las generaciones nuevas traen un chip diferente o a que sea algo orgánico…Sino, más bien, a la incapacidad en la que hemos caído los padres de decir NO a nuestros hijos.
En esta era moderna los padres hemos perdido el tino al educar a nuestros hijos, manejando una falsa libertad, que no es más bien, que la irresponsabilidad de nosotros como padres ya que nuestro tiempo se limita a trabajar y nuestras propias actividades. Dando así no solo poco tiempo a nuestros hijos, sino, un tiempo de poca calidad.
Entonces, quién educa a nuestros hijos…pues la electrónica y el internet ahora se han hecho cargo de hablar y educar a nuestros hijos. Asombrosamente y lamentablemente es nuestra realidad.
Cuando un niño no es capaz de estar tranquilo y deja que yo pueda hacer mi trabajo, o los quehaceres, o simplemente no me deja descansar o ver tv, ¿qué hago? le doy el teléfono celular; la tableta o la computadora para que se entretenga(embrutezca) y yo pueda hacer mis tareas.
Estamos cayendo en la boca del lobo, pues todo esto se revierte en hijos intolerantes, quienes no soportan una negativa de sus padres a un permiso, a la compra de algo que quieran, o simplemente a que se haga su voluntad.
Cuidado!!!!! Padres, estamos lanzando a la sociedad personas con alto nivel de intolerancia, lo que les hace mucho mal en el desempeño de ellos en su vida futura.
Serán adultos prepotentes e infelices. Pues todos sabemos, que no somos dueño de todo lo que sucede, que no tenemos el control de lo que pasa a nuestro alrededor.
Por lo que, exhorto a todos los que están leyendo estas líneas, dediquen tiempo de calidad a sus hijos, no permitan que sean los medios electrónicos y el internet quienes los eduquen, aprendamos a decirles que NO.
Enseñemos a nuestros hijos que no somos el centro del universo, sino, más bien, parte de él. Que vivimos en comunidad, que no siempre podremos lograr tener lo que deseamos; que a veces hay que ceder. Que el otro también importa, enseñémosle a ser felices con lo que tenemos, a amar a los demás.
No demos todo a nuestros hijos, demos todo lo que necesitan, no lo que desean. Hagamos de nuestros hijos hombres y mujeres capaces de entender a los demás, a ser compasivos, a que no todo se tienen en el momento en que se desea.
Aún estamos a tiempo, no dejemos la educación de nuestros hijos en manos de nadie más ni de algo que ni vida tiene. Nuestros hijos nos necesitan, nos demandan, ¿qué esperas? Inicia el cambio hoy mismo.
Cambiemos la generación de intolerantes por una generación de tolerantes, compasivos, amorosos hijos.
@amarloquetengo
JPM