La columna de Maduro: desfachatez de un tirano
Algo que caracteriza a los dirigentes comunistas que tiranizan actualmente algunos países, es su increíble descaro. El miércoles 2 de abril, el diario neoyorquino The New York Times, publicó una columna firmada por el dictador venezolano Nicolás Maduro, titulada: “Un llamado para paz”, donde este descarado, no obstante estar utilizando una tribuna verdaderamente democrática en la cuna misma del imperio, la que le publicó su articulo íntegramente, sin ninguna restricción, denuncia a esa misma prensa como distorsionadora de la realidad que vive hoy Venezuela. Es una contradicción flagrante que estos individuos de tendencia comunista utilicen con absoluta libertad, la prensa que denuncian constantemente como amarilla y al servicio de los dueños y los intereses de la “burguesía”, cosa que jamás permitirían a sus contrarios, en uno de los periódicos oficialistas que dirigen y que funcionan como cartillas de propaganda, que sí son en realidad plataformas de sus intereses políticos. Es claro que estos individuos de esa tendencia política no tienen ninguna vergüenza. Se sabe que cuando están en la oposición son defensores fervientes de la libertad de prensa, y todas las demás libertades que permite un régimen democrático, pero lo hacen para ellos poder accionar y exponer sus ideas libremente, y así lograr sus malsanos propósitos. Sin embargo cuando tienen el gobierno en sus manos, su objetivo principal es acabar con esa prensa que les sirvió de plataforma, para acallar a los contrarios, que antes les permitían usar esos medios libremente. No merecen la tolerancia de los demócratas estos farsantes traicioneros. El cinismo del impostor y autoritario tirano, a quien ya le demostraron que no es venezolano sino colombiano, llegó a su limite cuando en dicha columna, le pide al pueblo estadounidense que por favor no permita que el gobierno norteamericano sancione al venezolano, porque quienes se perjudicarían con tal acción serían los pobres de ese país. El mandatario afirma en su columna que “en Estados Unidos hay una narración presentada por el gobierno de ese país en la cual los manifestantes están ampliamente descritos como pacíficos, mientras dicen que el gobierno es violento y represivo”Y uno se pregunta ¿cuál es el periódico oficialista norteamericano donde el gobierno denuncia los desmanes de la dictadura Castro chavista? Que se sepa en Estados Unidos no hay prensa oficialista. La prensa aquí y en todos los países donde se profesa la democracia está totalmente en manos del sector privado y solo se manifiesta políticamente a través de sus editoriales. Pero siempre respetando la libre opinión de los articulistas, quienes muchos escriben desde una posición izquierdista y hasta ultraizquierdista. Un ejemplo lo constituyó la espía rusa de nacionalidad peruana, Vicky Peláez , quien semanalmente escribía un artículo en el Diario La Prensa de la ciudad de Nueva York, con el único fin de atacar a Estados Unidos, al neoliberalismo y defender las posiciones rusas, las de los enemigos de occidente en el Medio Oriente, y el comunismo internacional. Lo que mejor debe hacer el déspota venezolano es oír a su pueblo y renunciar a su inmerecida posición de presidente, porque evidentemente ese cargo le queda demasiado grande por su limitada capacidad. Y porque obviamente, el pueblo venezolano no se va a dejar meter la guayaba podrida del destructivo sistema comunista que los Castro y el chavismo quieren entronizar en la patria de Simón Bolívar. joseflndz@yahoo.com