España: la alternativa al chantaje ruso
El pasado año 2013, Rusia suministró a la Unión Europea el 30% de su consumo de gas. La mitad de ese volumen fue transportado a través de el territorio ucraniano. Lo que es tema de preocupación e incertidumbre en Europa, debido al prolongado conflicto entre la Rusia de Putin y Ucrania, motivado a la reciente anexión de la península de Crimea por parte de la Federación Rusa. Esto y las frecuentes amenazas rusas de cortar el suministro, ha generado la necesidad de encontrar una urgente alternativa a la alta dependencia por parte de ese continente, del combustible proveniente de los gasoductos rusos. Es por ello, que se ha fijado la atención hacia España, ya que ésta cuenta con una gran infraestructura de instalaciones gasíferas, con las que podría sustituir las importaciones desde Rusia del preciado combustible. España es considerada la puerta de entrada del gas natural proveniente del norte de África, ya que cuenta con dos importantes gasoductos conectados con Argelia y otras 6 plantas de regasificación que habría que poner a producir a toda capacidad, ya que hasta ahora están rindiendo muy por debajo de lo que deberían. Sin embargo, el obstáculo para lograr esa posible salida a la actual dependencia del gas ruso, lo sería Francia, por donde también pasaría el gas hacia los demás países de Europa. Aunque ésta ha dado muestras de que podría ceder en su oposición a la unificación con España para lograr ese propósito. Intensión que es alentada por la Unión Europea. Analistas europeos consideran que la Unión Europea necesita aumentar, además, su propia producción de gas natural. Para ello deberían quizás aprovechar la gran alternativa que ofrece el aplicar la nueva técnica del “fracking”. Tecnología que han estado usando y perfeccionando los estadounidenses con magníficos resultados, generando con ella inclusive, mas de 2 millones de empleos; la que consiste en una técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas ypetróleo del subsuelo. El procedimiento consiste, según explican expertos, en la perforación de un pozo vertical en el cual, una vez alcanzada la profundidad deseada, se inyecta a presión algún material en el terreno, con el objetivo de ampliar las fracturas existentes en el sustrato rocoso que encierra el gas o el petróleo y que son típicamente menores a 1 mm, favoreciendo así su salida hacia el exterior. Habitualmente el material inyectado es agua con arena y productos químicos, cuya finalidad es favorecer la fisuración o incluso la disolución de la roca. Aunque el uso de esta novedosa tecnología se ve imposibilitado, por la oposición de grupos ecológicos que se oponen a que esta se aplique; ya que sustentan, que atenta contra el equilibrio medio ambiental. Urge a la Unión Europea, tratar por todos los medios a su alcance, lograr superar esa dependencia del suministro energético de Rusia. Ya que esta constituye, la espada de Damocles que usan los rusos, para mantener contra la pared y bajo constante chantaje, a sus atemorizados clientes de la Europa del oeste. joseflndz@yahoo.com