ESPAÑA: Juzgan a dos hermanas por tráfico de seres humanos

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Valladolid, 26 nov.- Dos hermanas, M.L.P, de 38 años, y C.L.P., de 31, serán juzgadas en Valladolid como supuestas autoras de un delito de tráfico de seres humanos, de obligar a una prima suya a prostituirse, amenazarla y cobrar lo que ganaba, tras facilitar su llegada a España desde la República Dominicana.

La vista oral, que se desarrollará en la Audiencia Provincial de Valladolid desde el próximo 27 de noviembre, se ha señalado por hechos ocurridos a finales de 2014, cuando la víctima decidió viajar a España para buscar un futuro más próspero, según las conclusiones provisionales de la Fiscalía.

Su prima, la acusada M.L.P., la puso en contacto con un hombre, quien le hizo una oferta para trabajar en España y le presentó a otra persona que la guió sobre lo que tenía que hacer para solicitar visado y le dio unos documentos que debía entregar.

Otra persona por encargo suyo llevó a la mujer al aeropuerto de Punta Cana, le entregó su pasaporte con un visado falsificado y le dijo cual era la puerta de control por la que debía pasar.

Viajó desde allí a Alemania, hizo escala en Suiza y después fue a Madrid, donde la recogió la acusada M.L.P. y la alojó en su casa, en un pueblo de Valladolid, en la que también residía su hermana, la otra encausada, C.L.P., de nacionalidad dominicana.

Las hermanas, de común acuerdo, supuestamente obligaron a la víctima a prostituirse para pagar una deuda que una de ellas la reclamada.

C.L.P. siguió las indicaciones de su hermana también encausada y llevó a la víctima a un club, donde se prostituyó, todo ello bajo el control de C.L.P., también dedicada a la prostitución y que vigilaba el trabajo de su prima para informar a su hermana, quien la presionaba con amenazas para que trabajase más.

La víctima trabajó el en club hasta el 23 de noviembre de 2015, tiempo durante el que pagó a M.L.C. 8.150 euros, situación a la que se sumó, mientras estaba en el local, la llamada de un hombre que la exigió trabajar en la prostitución, ya que si no mataría a su madre y a su hijo y que debía pagar 8.000 euros.

La mujer acudió en tres ocasiones a una estación de autobuses en Madrid y le entregó 1.050 euros cada vez -3.150 en total-, precisan las conclusiones provisionales del ministerio público.

La víctima denunció los hechos el 5 de noviembre de 2015, lo que derivó en la apertura de diligencias previas, con la atribución a la mujer de testigo protegido.

El fiscal considera a M.L.P supuesta autora de los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y un delito relativo a la prostitución, por lo que demanda ocho años de cárcel y la prohibición de acercarse a la víctima a menos de quinientos de cualquier lugar en el que se encuentre y de comunicarse con ella durante diez años.

También le atribuye un delito de tráfico de seres humanos, por el que solicita nueve meses de prisión, y un cuarto de obstrucción a la Justicia, que para el fiscal conlleva dos años y seis meses de prisión y doce meses de multa con cuota de doce euros al día.

Para la otra acusada, el fiscal pide la misma pena que para la primera por delitos de trata y tráfico de seres humanos y pide el pago de ambas de una indemnización de 60.000 euros por daño moral.

of-am

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