¡Enamórate de la vida!
Despertar en la mañana con el toque tierno de un rayito de sol que asomándose por la ventana exterioriza con convincente alegría la llegada de un nuevo día; ¡Da sentido a la vida!
El canto de una avecilla que, desde la ramita de un árbol, reverencia la naturaleza entonando trinares musicales de felicidad; ¡Da sentido a la vida!
Escuchar el grito del nacimiento de un hijo(a), cuyo resonar victorioso nos envuelve en la más delirante de las emociones; ¡Da sentido a la vida!
Un bosque que con galanteo picarón nos presenta con glamoroso verdor la suma de sus árboles y el movimiento de una vida animal que crece en la inmensidad de sus follajes; ¡Da sentido a la vida!
El regalo de una sonrisa desinteresada que cayendo como cascada tranquila en la biología de tu ser, calma las impetuosas tribulaciones que te abaten; ¡Da sentido a la vida!
Una balada de amor que deleitando los oídos del corazón te transporta a un mundo imaginario donde lo bello se conjuga con lo hermoso; ¡Da sentido a la vida!
El danzar seductor de las olas en el mar que exhibiendo cadenciosa armonía recrea con aires de caballerosidad la niña de tus ojos; ¡Da sentido a la vida!
Un río que sobreviviendo con valentía y arrojo a los estragos destructores de un ser humano que no lo valora, nos brinda aún así sus aguas para refrescar nuestro ser interior y exterior; ¡Da sentido a la vida!
La elevación de una montaña que enseña y anima con su ejemplo, a levantarse de los fracasos y darse otra oportunidad de conquistar la cima del éxito sí te lo propones; ¡Da sentido a la vida!
Un perdón inesperado que, cerrando las heridas amargas de un pasado, te dice que vale la pena volver a empezar de nuevo; ¡Da sentido a la vida!
El baile de un merengue romántico de la luna con las estrellas que sin rubor ninguno se profesan su amor ante un universo cómplice de tan hermoso idilio; ¡Da sentido a la vida!
Unas palabras oportunas que hacen estremecer los poros de la conciencia porque encierran la verdad de un buen consejo sabio; ¡Da sentido a la vida!
Un corazón que, sumergido en el manantial de la misericordia, se abre ante el dolor y las necesidades de los demás; ¡Da sentido a la vida!
La lectura de un buen libro cuyas páginas invitan a devorar su contenido gourmet, ofreciendo así, un manjar de informaciones exquisitas para alimentar el apetito voraz del conocimiento; ¡Da sentido a la vida!
Una poesía cuyos versos se convierten en fresco rocío para el alma; ¡Da sentido a la vida!
Un “Creo en ti» y un “estoy aquí» aunque muchos te abandonen; ¡Da sentido a la vida!
Los primeros pasitos de un niño y el júbilo inusitado de unos padres que por tan tierna proeza celebran la misma cual si fuese el más esplendoroso acontecimiento del planeta tierra; ¡Da sentido a la vida!
Una fe sin dudas que conduce a lograr los objetivos o metas que nos hemos propuesto alcanzar; ¡Da sentido a la vida!
La vistosidad impresionante de un campo cubierto de flores cuyos colores nos ofrecen una pasarela jet set de belleza y de embriagante perfume; ¡Da sentido a la vida!
Una mirada más allá del caos, con el lente de la esperanza y la firmeza de un ideal, ayuda a forjar un mundo mejor; ¡Da sentido a la vida!
Saber que siempre tendrás un amigo que nunca falla y que estará a tu lado en tus aciertos y desaciertos; ¡Da sentido a la vida!
Siempre sobrarán motivos y razones para darle sentido a la vida; sólo detente a vivir cada instante, detalles y circunstancias dando lo mejor de ti.
Para eso debes estar consciente de que eres un ser único, irrepetible, valioso y auténtico en toda la creación y que tu buen vivir es un aporte invaluable para el mundo. ¡Enamórate de la vida! ¡No te rindas! ¡Recuerda que tu vida tiene sentido para ti y los demás! ¡Vive! ¡Animo!
jpm-am