El reinado de Lula se desploma

«En la usanza corrupta de este mundo la mano dadivosa del culpable desplaza a la justicia: y es sabido que el propio botín compra a la ley» (Shakespeare).

La condena a 12 años de cárcel contra el ex presidente Luís Ignacio Lula Dasilva y el apoyo que dispensan sus seguidores y allegados de partido en Brasil, es demostrado que la dignidad y la moral están en desuso  y el mundo de hoy día cavila entre corruptos apoyados por los pobres y sedientos de oportunidades.  

 

La sentencia contra el ex gobernante, aunque muchos son los sectores que los apoyan estando en la cárcel, es un ejemplo democrático; y a la vez, una condena contra un reinado que ve su trono desplomarse, lo que debe servir para que las presentes y futuras generaciones del mundo político actúen a la defensiva en contra de la corrupción administrativa que se aposenta en los países latinoamericanos.

 

Es posible que Lula administrara el estado brasileño con visión para enfrentar la pobreza, sin embargo, no es mandatorio que incólumes personajes del mundo político y gentes de baja tinta se lancen a las calles a protestar sin reflexionar sobre el gran daño que en consecuencia le hizo al  país a través de las descabelladas transacciones fraudulentas con Petrobras y otras empresas.

 

Con las protestas en favor de un corrupto y corruptor de la capacidad de Lula Dasilva, los países latinoamericanos se encuentran corrompidos e influenciados por un poder mesiánico que se desvanece y que no desmaya en su interés de influenciar a la clase humilde y analfabeta que cabila en el desierto de lo inexorable para combatir la pobreza.

 

Los homenajes antidemocráticos que con la banda de presidente recibió Lula Dasilva, por parte de gobiernos latinoamericanos, como Venezuela y Nicaragua, entre otros, no fueron más que reconocimientos al oportunismo y la venganza administrativa, contra un estado que ponía en la cúspide el manifiesto de la moral, a través de un supuesto ejercicio gubernamental pulcro entre comillas, debido a que solo sirvió como referente para engañar a sus propios votantes.

 

En Latinoamérica se ha creado una estrategia política con raíces corruptas que ha crecido impunemente y en sus ramas se estremece una burguesía sin escrúpulos que atenta contra la estabilidad económica y sostenible.

 

Lula Dasilva sedujo al presidente Danilo Medina para que cayera en las garras de la Empresa Constructora Norberto Odebrecht, al igual que a otros gobernantes, que atrapados por sus garras hurgaron  en el charco maldito del soborno con la diferencia de que hoy quien fuera su asesor es condenado a prisión, mientras ellos disfrutan de su fortuna producto de la mala administración de justicia y el incumplimiento de las Leyes.

 

Es posible que Lula Dasilva fuera un buen gobernante pero eso no le daba facultad para diezmar la soberanía brasileña y estafarla con más de 3 mil millones de dólares. Lula no está en la cárcel por su buen manejo de la economía, o quizás, porque enfrentó la pobreza como consideran sus abanderados. Está preso por las cosas malas que hizo, entre ellas, la espantosa corrupción de la compañía estatal Petrobras, a través de la cual se distribuyeron más de dos mil millones de dólares en sobornos.

 

Nuestros gobernantes, actores principales de los partidos tradicionales, no consideran los países como patrimonio del estado, lo relacionan como la parcela que heredaron de sus antecesores, por tanto, la manejan unilateralmente.

 

El hecho de que la pobreza este subordinada y vinculada a factores sumamente ordinarios, no quiere decir que debe ser opacada y desconcertada impetuosamente como una manifestación imperecedera de la cual se aprovechan los políticos para saciar su sed de gobernar.

 

La corrupción y la desconfianza surgen como problemas básicos de la pobreza, esos mismos pobres, para poder sobrevivir prefieren manifestarse a favor de funcionarios que laceran el patrimonio público y les dispensan apoyo aun siendo cuestionado por la justicia.

 

En definitiva, los países latinoamericanos son gobernados, sin excepción, por políticos que tienen como bandera corrupción y sustentan sus propagandas en el apoyo que le dispensan los pobres, mediante un poder mediático que convence sin menoscabo a aquellos escasos de conocimientos y oportunidades para poder resolver la crisis. A parir de Lula hay que predicar con el ejemplo.

JPM
Compártelo en tus redes:
ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
5 Comments
Nuevos
Viejos Mas votados
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios
martina marcel
martina marcel
6 Años hace

Lula no es un preso politico sino un politico preso muy diferente aunque suene parecido que si en el pais Danilo Medina no tuviera «su congreso» y la corrupcion no fuera el credo del PLD las cosas hoy en dia najayo estaria super poblado de politicos presos

Juan Marte
Juan Marte
6 Años hace

Un excelente cometario. Ojala sea imitado por otros tantos y nos llegue al alma para acabar con estos ladrones de cuello blanco apertrechados en el palacio

Luis Borrera
Luis Borrera
6 Años hace

Embustero. Mentiroso. Calumniador. Hipocrita. Desinformador.

José Flández
José Flández
6 Años hace

Los gobernantes de izquierda son los más mediáticos porque sus huestes están fanatizadas y resaltan y difunden todo lo que su líder populista dice que hizo a favor de los «pobres» con el dinero del erario repartido inteligentemente a través de subsidios, para asegurar sus simpatías y la consecuente dependencia de esas dádivas. No crean jamás que ningún gobernante ha sacado a nadie de la pobreza porque le regale irresponsablemente el dinero de los contribuyentes, y para colmo en cantidades insignificantes. Lo que vivió Brasil en el gobierno de Lula Odebrecht Da Silva fue el boom de los buenos precios… Leer mas »

Lazaro Vendrell
Lazaro Vendrell
6 Años hace

Danilo sabe muy bien lo que hizo, y no creo que Lula halla gastado mucha saliva para convencerlo, del negociazo que se hizo con Oderbrech. Recordemos que una Compañia China,ofertó hacer las dos plantas de Punta Cstalina, por Ochocientos Millones de dolares y financiamiento propio, finalmente, medalaganaria mente Danilo concedió el contrato a Oderbrech por US $ 1, 500 Millones de dolares y finalmente, dicho proyec to ha ascendido a DOS MIL MILLONES DE DOLARES, y todavia no hay un pres tamo garantizado, ni se sabe cuando terminará dicha obra. Ultimamente se sabe, que el gobierno está intentando terminar la… Leer mas »