Desparpajo y dispendio del Ministro de Educación
Cuando uno ve las cosas que con mucha frecuencia suceden en nuestra querida media isla, en la que por dicha o desdicha del destino hemos nacido, podemos colegir con mucha propiedad, que este sigue siendo «un país muy especial», como dijo una vez el cómico dominicano Cuquín Victoria en un comercial de una casa licorera, «Wepaaa que paisote». Ser testigos del desparpajo con que se expresan algunos funcionarios del gobierno, sencillamente es algo desgarrador que desconsuela a todos los dominicanos que tenemos vergüenza y cuatro dedos de frente. El hoy flamante Ministro de Educación, Carlos Amarante Baret, con risa burlesca ha contestado a sus críticos y justificó el despilfarro de 18 millones de pesos que fueron invertidos por el gobierno en la construcción del stand que presenta el Ministerio de Educación en la Feria del Libro 2014, y hemos quedado boquiabiertos. No obstante defender lo indefendible, el gasto millonario de Educación en la Feria del Libro, hecho que llora ante la presencia de Dios, también el señor Ministro ha declarado a viva voz que el año que viene podría invertirse mucho más en esa Feria porque el pabellón que representará a ese Ministerio será una réplica de una escuela de Tanda Extendida. Imagino que el Presidente Danilo Medina no se sintió muy bien al saber sobre las declaraciones del Ministro de Educación, porque el Presidente es un hombre humilde que no le gusta alardear del poder que ocupa. Si es cierto que en esta gestión gubernamental estamos asistiendo a una verdadera revolución educativa impulsada por el propio Presidente a partir de la aprobación del 4% del PIB para la educación, no menos cierto es, que continuamos siendo un país con grandes problemas básicos por resolver, y no se ve bien el estar haciendo derroches de esos dineros de esa manera. Ese desparpajo al hablar no le hace muy bien a la imagen de este gobierno, que desde el principio ha mostrado en muchas áreas un manejo prudente y frugal de los recursos del Estado. La mayoría del pueblo dominicano le agradece al Presidente Medina, que él personalmente haya impulsado esta revolución en materia de educación, pero de la misma manera le vamos agradecer mucho más, que por favor vele majestuosamente para que cada centavo sea invertido en lo que sea estrictamente necesario y beneficioso para la población estudiantil y el país. Que el Ministro de Educación con burla y desparpajo diga que los 18 millones de pesos están bien invertidos porque ese pabellón representa la llamada «revolución educativa» de Danilo Medina, y que el próximo año se volverá a destinar mucho más dinero para otro stand, son declaraciones muy desafortunadas y hasta descabellados. Le recuerdo al señor Ministro, que el hecho de que este manejando más de 100 mil millones de pesos como producto de la aprobación del 4% para la Educación, no le da el derecho para usarlo de la forma en que se le antoje. El pueblo se mantendrá observándolo señor Ministro, y vamos a esperar que el Presidente Medina impida que en el 2015 se vuelvan a dilapidar tantos millones de pesos para la construcción de un stand que solo estará en pie pocos días. Con esos recursos son muchos los pequeños problemas que se podrían resolver en muchas escuelas de comunidades pobres del país. «Manos a la Obra» señor Ministro, pero sin despilfarro.