Defensa Legal de Jesús a la mujer adúltera
Independientemente de que seamos o no personas de fe, como abogado en esta Semana Santa quisiera invitarles a reflexionar sobre un pasaje bíblico que siempre me ha llamado la atención: La defensa legal de Jesús en favor de la mujer adúltera según se registra en el capítulo 8 del evangelio de Juan.
Creo que todos hemos leído, o al menos escuchado, esa interesante historia, en la cual Jesús defiende a una mujer que ha sido sorprendida en adulterio y que según la ley de la época debía morir apedreada.
El relato señala que cuando presentaron a la mujer ante Jesús y le preguntaron su opinión, este prefirió inclinarse y comenzar a escribir con su dedo en la tierra. Sin embargo, ante la insistencia de los escribas y fariseos se vio en la obligación de incorporarse y lanzar con contundencia una de sus frases más famosas: «Aquel de vosotros que esté libre de pecado, que arroje la primera piedra».
¿Acaso no les parece Jesús un abogado verdaderamente excepcional? En lugar de simplemente aceptar la ley de Moisés y permitir que la mujer fuera apedreada, o en sentido contrario argumentar la inocencia de la imputada, o alegar la desproporcionalidad de la pena imponible…
Jesús desafió la ley y el sistema judicial de aquella época, invitando a los acusadores a cuestionarse respecto de sus propias faltas y pecados, lo cual fue suficiente para que estos se marcharan, retiraran la acusación y desistieran de su persecución.
En este asueto de Semana Santa al tiempo de recrearnos junto a nuestras familias, y disfrutar de los paisajes y recursos naturales de nuestra isla, no perdamos la oportunidad de tomar un espacio para desafiarnos a nosotros mismos siendo reflexivos y críticos de nuestras propias decisiones y acciones.
La ingeniosidad de Jesús y su misericordia nos recuerdan que el ejercicio del derecho no solo se trata de seguir la ley, sino también de buscar soluciones justas que aborden la raíz de nuestros problemas, y no solo sus consecuencias.
jpm-am
soy admirador de jesucristo, pero no de jehová, quien elaboró esa y otras leyes asesinas y se las entregó a moises para que se las aplicara al «pueblo elegido» de ese sangriento y asesino «dios».
muy interesante tu planteamiento.no somos quienes para juzgar a los demás. veamos nuestra viga y no la paja en el ojo ajeno.dios no castiga ni premia, todo es producto de la ley de causa y efecto. en este plano terrenal la justicia de los hombres, y en el espiritual la justicia divina, qué no es más la consecuencia de nuestros actos.
¿y el diluvio universal no fue un castigo de tu «dios de amor’? ¿o fue la consecuencia de los actos de los humanos?
excelente reflexiÓn, sobre todo porque viene de una persona joven. cristianos o no debemos reconocer la grandesa de jesÚs. el matar una mujer a pedradas pero no hacerle nada al hombre con el que la encontraban era algo verdaderamente injusto y como dice el arti**** desproporciÓnal. por eso siempre debe prevalecer la justicia.
la misericordia de dios es muy bonita, pero la ley es la ley y debe anteponerse ante todas las cosas. en los actuales proceso judiciales lo que se quiere es 18 mese de prision preventiva para los acusados. si la justicia divina quiere perdonar a delincuentes que lo haga pero la justicia terrenal que los condene.
eso debería tomar en cuenta la jueza que va a fallar la medida de coerción del caso calamar!