Danilo Medina y el Sur
Todos los sureños abrigamos la esperanza de que en un gobierno de un hombre nacido en estas áridas tierras, se iba a poner de manifiesto lo dicho por el poeta uruguayo Mario Benedetti: “El Sur también existe” A casi dos años de gobierno del presidente Danilo Medina todavía no se reflejan obras de gran importancia en todo el territorio que componen las provincias del Sur. La mayoría de los sureños invadieron los centros de votaciones, para depositar sus votos a favor de un hijo de esta tierra, porque veían en él, la realización de sus sueños de progreso. Aunque se completó el proyecto habitacional de Boca de Cachón, y se esté construyendo una avenida de circunvalación en Azua, y se espera otra en Bani, pero aún, el sur demanda mas obras. Quisiera sugerirle al presidente Medina, que tome en cuenta estas consideraciones para que en estos dos últimos dos años, el sur comience su despegue hacia el desarrollo. Pedernales: Unas de las obras más importantes que se debe implementar en esta provincia, es la de crear una infraestructura hotelera en Bahía de las Águilas que serviría para absolver miles de manos desocupadas. Además crear las condiciones para que los agricultores de la zona, puedan producir todos los productos que pudieran consumir los turistas que se alberguen en los hoteles que se puedan construir en el lugar. Barahona: Esta provincia, otrora gozaba de muchas exportaciones por su puerto, hoy está semi abandonado por lo que urge rehabilitarlo dragándolo dándole más calado, para que puedan atracar tanto buques de carga como barcos cruceros. También sería ideal poner en funcionamiento el Aeropuerto Internacional María Montes, para que sean utilizados sus vuelos para viajar a otros países, así como también, exportar productos agrícolas de la zona. Otro proyecto muy beneficioso para Barahona, es levantar un complejo turístico en las aguas termales en la comunidad de Canoa, proyecto este, que iba hacer asumido por unos empresarios italianos, pero no fue posible ejecutarlo. No se ejecutó, porque los inversionistas italianos, exigían 100 años en la administración del proyecto, eso para algunos representaba mucho tiempo y se opusieron al mismo. Neyba: La provincia Bahoruco es una gran productora de uva y peces, en ella es necesario sembrar nuevas variedades de uva y crear una gran cooperativa de vinicultores, con el objetivo de establecer una gran industria procesadora de la uva. Como Neyba tiene El Lago Enriquillo y otros afluentes acuíferos, que son ideales para la crianza de tilapia y otras especies de peces mediante la implantación de un programa de granjas piscícolas en esa zona, estaría el Estado llevando una fuente de ingreso a cientos de personas que se dedican a esta actividad pesquera. Jimani: En esta empobrecida provincia sus moradores viven mayormente de la agricultura, pero como sus tierras son muy áridas, es conveniente que se ejecute un buen complejo de invernaderos y otro de riego por goteo, con la finalidad de aumentar la producción y los ingresos de sus habitantes. Peravia: La provincia Peravia es considerada como la capital del mango, el Estado debe emplearse a fondo para seguir invirtiendo en los productores de esta sabrosa fruta, creando las condiciones para su producción y comercialización. Azua: Desde hace muchos años aquí funciona un proyecto ganadero, sin que hasta la fecha se le haya sacado el mayor provecho, pienso que Azua se pudiera convertir en el mayor receptor de leche de la zona sur. En el proyecto ganadero Isura, sería conveniente agrupar a todos los ganaderos del sur, para convertirlos en dueño de una gran industria lechera, teniendo como socios a inversionistas extranjeros procedentes de Dinamarca, Suiza u Holanda. En esa industria se procesara la leche para envasarla en cartón, convertirla en polvo, fabricar quesos y mantequillas, en fin en cada uno de los sub productos que se le puedan sacar a la leche. De esta manera se dinamiza la economía de la zona, se crean más empleos, los ganaderos reciben más beneficios que en los actuales momentos, pues ya no tendrán que seguir bajo las condiciones que le impongan las compañías lecheras del país. San José de Ocoa: El clima de esta provincia es ideal para la producción de vegetales, por ende, ella debería convertirse en la suplidora de los demás pueblos del sur y del país creándole las condiciones en la producción y comercialización de los mismos. Elías Piña: Siempre ha sido una provincia muy pobre, a pesar de los millones de pesos que se mueven cada semana en su territorio con el mercado binacional, pero lastimosamente es poco el dinero que disfruta sus moradores. Elías Piña es ideal para volver a implementar la siembra del mani, se tiene conocimiento de que un inversionista nicaragüense anda en esos aprestos, por lo tanto se le debe prestar mucha atención a este inversionista, para que los moradores de esta provincia encuentren una buena actividad que mueva aun mas su estrecha economía. San Juan: Debido a la ubicación geográfica con las demás provincias del sur y de Haití, San Juan automáticamente debe convertirse en la capital del sur, por eso las inversiones estatales deben ser mayoritaria que en las otras provincias. Se está planificando una reconversión agrícola de todo el valle de San Juan, comenzando aplicarse en 30 mil tareas de tierras, pero hay que tener mucho cuidado con la inversión que se piensa hacer. Creo que a los productores de aquí, hay que instalarle invernaderos y sistemas de riego por goteo en base a una garantía, que muy bien podría ser el titulo de su propiedad. Lo digo por las funestas experiencias pasadas, en donde desde el Estado se han financiado cosechas y proyectos, através del Banco Agrícola y después esos mismos productores piden condonación de las deudas, de un dinero que muchas veces mal utilizan en otras cosas y no en la agropecuaria. San Juan es una provincia agropecuaria por excelencia, por tanto los proyectos de desarrollo deben ir enfocados hacia esta actividad, por ejemplo aquí hay que organizar bajo un acuerdo con Haití, dos mercados binacionales cada quince días. Estos mercados pudieran ser instalados en las edificaciones del Inespre, para ir sentando la base de un gran mercado del sur, en donde todos los pueblos de la zona, puedan abastecerse de los productos necesarios en su diario vivir. Sería un intercambio de mercancías entre haitianos y dominicanos, que dinamizaría ambas economías, y a la vez se crearían cientos de empleos directos e indirectos. Cada quince días habrá un hormiguero humano de comerciantes y compradores de Bani, Azua, Barahona, Neyba, San José de Ocoa y del mismo San Juan, dándose cita en esos mercados. Talves se esté pensando que todo lo escrito aquí se necesita mucho dinero para ponerlo en práctica, pero si les vendemos la idea a inversionistas extranjeros, creo que podemos lograr parte de esos proyectos. De lo único que estoy seguro es, que si el presidente sureño Danilo Medina no hace nada por su zona, será muy difícil que otro presidente lo haga, y que alguien más de la tierra sureña, pueda alcanzar de nuevo la presidencia de la república. El propio presidente Medina ha dicho, que la única satisfacción que sentiría cuando salga de la presidencia, es que alguien le diga que gracias a él, cambió su calidad de vida. Tómese presidente un tiempecito de su vida, en leer esta sugerencia, y si le parecen bien, dedique estos dos últimos años a desarrollar el sur, para que sus pueblos puedan salir de la pobreza, Así podamos decir “El sur también existe”