Comunidad NY respalda plan de alfabetización
NUEVA YORK.- La comunidad dominicana en esta urbe se ha integrado de manera entusiasta al apoyo al Plan Nacional de Alfabetización que implementa la Presidencia de la República a través del Consulado General.
La puesta en marcha de «Quisqueya aprende contigo» ha impactado de manera positiva la vida de decenas de dominicanos que están recibiendo la alfabetización a la que no tuvieron acceso hasta ahora.
En la actualidad hay registrados en la Presidencia 21 núcleos y dos están en proceso de formación con la capacitación de 87 personas que reciben instrucción.
Los núcleos de alfabetización operan en escuelas, iglesias, organizaciones comunitarias e incluso en apartamentos de viviendas.
Esto demuestra el gran interés de toda la comunidad dominicana para que nuestros iletrados tengan la misma oportunidad que tienen los compatriotas en el territorio de nuestro país.
La puesta en marcha de «Quisqueya aprende contigo» es una de las iniciativas del Presidente Danilo Medina que mejor recepción ha tenido en la comunidad, debido principalmente a que incide directamente en una población que la ve como la única oportunidad posible de aprender a leer y escribir en su idioma.
Pero no solo los dominicanos se han interesado por la alfabetización, sino que también otras comunidades hispanas le han dado seguimiento.
Así podemos citar el caso de un trabajador puertorriqueño, quien al enterarse de la existencia del programa decidió acercarse a uno de los núcleos, donde actualmente está recibiendo la instrucción.
Líderes comunitarios, facilitadores y los propios alfabetizados han expresado su satisfacción por la ejecución de este plan.
Y nadie mejor que los propios beneficiarios del plan para valorar y agradecer la iniciativa presidencial que coordina el Consulado.
«Le agradecemos profundamente al Presidente Danilo Medina por darnos esta oportunidad de aprender a leer y a escribir. Nos sentimos personas nuevas, ahora ya no tenemos que firmar con una cruz» señalaron, los beneficiados.
Lamentan que nunca pudieron acudir a la escuela, por lo que ahora tratan de aprovechar el tiempo y aprender a desenvolverse por sus propios medios.
«Nunca es tarde para aprender y en eso estamos, porque saber leer y escribir no tiene precio», afirma otro alfabetizado.
«Es como una carga que uno se quita de encima cuando no tiene que valerse de otra persona para saber lo que dice un papel», agregó otro.