Aventura de aventuras: la vuelta al mundo
Por GEORGINA CRUZ
Magallanes lo intentó y aunque murió tratando, uno de sus barcos lo logró; y Cantinflas famosamente lo hizo en el celuloide: es la aventura de una vuelta al mundo.
Indudablemente el viaje épico por excelencia, lleva a sus afortunados participantes a trazar un círculo por el planeta y ver una procesión de culturas: latinas, polinesas, australianas, orientales, africanas y así sucesivamente.
Por el camino, las aventuras hacen ola: un día uno puede estar buceando en aguas cristalinas desde una casita en zancos en la Polinesia francesa; otro puede estar comprando artesanía en las Islas San Blas de Panamá; aún otro, contemplando témpanos de hielo gigantescos como castillos en la Antarctica o las “cabezas grandes” de enigmáticos moais en Isla de Pascua, Chile.
En otra ocasión se puede estar disfrutando de un espectáculo cultural en Bali, Indonesia; o tratar de decifrar jeroglíficos en templos egipcios en Luxor; o tomar un funicular en Singapur; o pasear por las callejuelas de la Ciudad Vieja en Jerusalén. En varias paradas se pueden admirar algunos de los más bellos jardines del mundo, como el Festival de Tulipanes de Keukenhof en los Países Bajos, en otras, visitar algunos de los mejores museos del mundo, como el Rijksmuseum en Amsterdam, y las más impresionantes iglesias como la Basílica de San Pedro en Roma, con la Pieta de Miguel Angel, y mausoleos que son maravillas del mundo como el Taj Mahal en Agra en la India.
¡Y todo esto en un sólo viaje! Mi esposo Humberto y yo hemos tenido la dicha de disfrutar todas esas aventuras y muchas más en cinco cruceros alrededor del mundo en el barco Amsterdam de Holland America Line. Estas travesías de más de 100 días cada una, que visitan típicamente más de 40 o 50 puertos (algunos por dos días) se ofrecen por varias líneas de cruceros cada enero.
Algunos de estos cruceros zarpan de la Florida y otros de Nueva York, y aunque todos son tremendas aventuras, algunos no son verdaderas circunnavegaciones del planeta. Según el Capitán Jonathan Mercer del barco Amsterdam, una verdadera cincunnavegación “navega del, y regresa al, mismo punto, cruza el Ecuador, cruza todas las líneas de longitud, y cubre un mínimo de 21,600 millas nauticas”.
Para nosotros eso era importante pues queríamos trazar un verdadero círculo por el planeta y porque no queríamos tener que hacer un vuelo largo desde Europa donde algunos cruceros concluyen la vuelta al mundo.
BENEFICIOS
Ventajas de cruceros alrededor del mundo incluyen mejor entretenimiento incluyendo artistas conocidos (Melissa Manchester en uno de nuestros cruceros) y personalidades como el Arzobispo Desmond Tutu (en otra travesía). Y con frecuencia grupos folclóricos locales presentan espectáculos en el barco y ofrecen bienvenidas con música y danzas en el puerto. Hay más actividades incluyendo grupos polineses o australianos que ofrecen clases de ukulele, artesanía, etc. La tripulación se selecciona con esmero –las líneas quieren poner a sus mejores empleados en su viaje más importante. Y hacen regalos conmemorativos a los pasajeros –incluyendo en nuestro caso, recuerdos diseñados por Tiffany.
La comida es mejor, con frecuentes cenas temáticas con especialidades regionales y delicias incluyendo langostas y otros mariscos y caviar. Y los pasajeros disfrutándolas son personas retiradas –generalmente entre 60 y 85 años y muchos son veteranos de varias vueltas al mundo. Como estos cruceros también se pueden tomar en segmentos de unas tres semanas de duración, los pasajeros que optan por ellos tienden a tener 40-50 años.
Aunque las líneas de cruceros anuncian itinerarios para viajes alrededor del mundo, algunos factores causan cambios incluyendo mal tiempo, disturbios políticos y enfermedades como Ebola. En estos casos, se sustituye otro puerto. ¡A mí me gusta decir que una vuelta al mundo siempre viene con una que otra sorpresa –por eso ya compramos boleto para nuestra sexta en enero!
JPM