Aumento salarial igual a mayor desempleo?
“Los salarios de los trabajadores venezolanos aumentaron un 52% durante el 2015 por decreto, y ahora se quiere una ley de precios justos para combatir la especulación y acaparamiento, así como un cambio del modelo económico por uno productivo que permita diversificar e incentivar el aparato productivo». link: www.mppp.gob.ve/2015/05/52
Aprender de ese caso y evitar los mismos errores, es crucial.
Por ejemplo, en Quisqueya, nadie quiere emplear gente con todas las prestaciones, solo temporera u informal, se contratan a diario, por muchas razones, mire algunas:
Como en una carrera de ‘corre…, que te alcanzo’, el empleo informal está creciendo tanto en Quisqueya como el trabajo formal, llamado empleo, con todas las de la ley.
Los sindicatos saben eso, por eso, luchar por el 25% de aumento para unos miles, no se compadece con los millones de informales trabajadores que hacen lo mismo, a menor precio.
El pariente lejano, Adriano Sánchez Roa, senador y vocero del PLD, se lanzó con un proyecto de aumentos del 32%, con parámetros para salario mínimo mensual actuales, del sector no Sectorizado vigente, equivalentes a RD$11,292.0 en las empresas grandes, RD$7,763.0 en empresas medianas y RD$6,880.0 en las empresas pequeñas.
Subir esos sueldos en base a la clasificación empresarial que se establece en la Ley 488-08 para las Pymes y pequeños debe mantenerse, so pena de quebrar muchas empresas.
Un reajuste salarial no se deberá aplicar retroactivo a Julio del 2014.
Eso no es legal. Proyecto Sánchez Roa pide mucho, sindicatos un 25%
Ahora subir sueldos un 15% es justo y factible, no 25% en esas 3 clasificaciones, pues muchos no ven la espiral inflacionaria que conllevan. Eso debe explicarse en esta etapa política y de promesas electorales.
Espaciar un aumento consensuado del 15%, es lo justo, pues sabemos de la alta liquidez siempre producto de elecciones y campañas y eso afecta costo de vida de todos y costos del sector privado con una baja productividad.
¿Para qué aumentar, si los demás sectores subirán precio de todo y caemos en inflación y quejas otra vez?
El sector no sectorizado tendrá sus aumentos y qué de los servidores públicos y de los trabajadores informales privados, a esos, se los llevo el diablo.
Según mi cuadro anexo, los informales no domésticos representan el
23, 5% del empleo total solo en la Capital.
Esto incluye los asalariados no registrados y los trabajadores por cuenta propia sin capital, una categoría de altísima rotación mínima productividad.
Hay que agregar a la cuenta otros 6 puntos por empleo doméstico no registrado, nuestras sirvientas, choferes y cocineras que no tienen pensión, ni seguro por desempleo.
Ese grupo, siempre se queda afuera y nadie los respalda. Los aumentos salariales del Comité de Salarios sólo se imponen para un 14% del total de los trabajadores, dejando a discreción de los patronos el resto, que representan un millón 426 mil trabajadores.
La gente quiere trabajar, ganar para sobrevivir pues la escalada alcista que se ha registrado en una serie de artículos de la canasta familiar, tras el aumento del 3% al itebis en 2015, impulsa a la informalidad laboral la cual alcanza al 46,8% del total de los ocupados en Quisqueya, llegando en el segmento de, 15 a 24 años al 61, 6%.
Eso da pena, y si sumamos los haitianos busca vida, el % es mayor.
El número que habitualmente se comunica es que uno de cada cuatro dominicanos trabaja de manera informal, pero este dato excluye a los trabajadores independientes, con los cual esta cifra alcanza prácticamente a uno de cada tres.
Controlar la escalada alcista que se ha registrado en una serie de artículos de la canasta familiar, tras el aumento del 3% al itebis no se puede lograr, pero si se pueden aumentar los salarios para que todos coman con ingresos dignos.
Hay una caída del empleo formal en los años recientes -que pasó del 35,5% en el 2012 al 33,6% en el 2014-proceso que confluye con una reducción en la cantidad de empleados informales–que cayeron en 2012 a 2,8 y en 2014 y un incremento de la cantidad de cuentapropistas, que crecieron desde 2,4 millones de trabajadores a 2, 6 millones en 2014.
En un contexto en el que la presión tributaria continúa alcanzando niveles récord en Quisqueya, vivenciamos un extraño –o no tan extraño- fenómeno: ante la mayor presión tributaria una porción de la actividad económica no se paraliza, sino que se informaliza y presenciamos una “curva de Laffer de la informalidad.
“Mientras que la curva de Laffer original muestra la mayor presión tributaria disminuye el nivel de recaudación como consecuencia de la caída del nivel de actividad (menos producción, menos ventas), en nuestro país observamos un efecto adicional.
En el marco de un bajo cumplimiento efectivo de la ley (enforcement), la mayor presión tributaria se traduce en mayor informalidad.
Los datos de la informalidad en la R.D. revelan las dificultades para competir que enfrentan quiénes cumplen con la ley, las cuales contemplan no sólo los costos monetarios sino también los altos requerimientos burocráticos a cumplimentar.
Por su parte, desde la política, nos hacemos de la vista gorda porque se asume que es “mejor ser informal que criminal”.
“Búscatela como sea, no robando, ni matando, pero engañando sí, porque el rico, el fisco y el político engañan, entonces nosotros los de abajo lo hacemos también”, me dijo un hijo de machepa.
En estas circunstancias, los costos de funcionamiento de un Estado cada vez más grande, porque hay que poner a trabajar a las masas, asfixian a una porción de la población que cumple las reglas del juego.
Si nos llevamos del Banco Central RD, la inflación es y ha sido tan baja, que no amerita el 32% de aumento solicitado y eso jamás se aprobará contra el empresariado, creo más justa buscar un 15% ahora y subirlo anualmente en base a otros parámetros.
Esto no va a cambiar. Adiós, paz laboral.
Mire ejemplo de Venezuela: No hay capacidad del sector empresarial, ni del gubernamental para crear los empleos que demanda el mercado. Protestas vienen y represalias, también.