Armas para la República del Señor
Por EURIPIDES AMARO
Necesitamos muchas armas para defender nuestros hijos, nuestras esposas, nuestras familias, nuestras comunidades, nuestra nación. Armas poderosas, inagotables, incautables,que cada dominicano pueda adquirirlas aunque sea muy pobre, que sepa usarlas, aunque sea iletrado. Los fundadores de la nación americana estaban muy claros en este principio. Los estados mas religiosos exigieron las conocidas enmiendas a la constitucion. La enmienda no. 1 garantizaba sus libertades, incluyendo la religiosa y la enmienda No. 2, que permite poseer armas, garantizaba la defensa de las libertades.
Cualquier legislación,reglamento,
En la película 300 sobre la batalla de las Termópilas, el rey Leónidas I, en la escena esto es Esparta!, mata a los mensajeros siniestros de Jerjes I, quienes habían ido a pedir la entrega de su tierra y su pueblo como esclavos. El gigante Goliat desafiaba a Israel, hasta que un joven pastor, David lo enfrentó, lo venció y puso fin a la ofensa a Dios y a su pueblo. Asiria rodeó a Jerusalén, con un ejército muy poderoso. El rey Ezequías, no podía enfrentarlo, clamó al Dios Altísimo, y al día siguiente, el angel de Jehová lo libró de la invasion. Daniel oró para perdón de pecado y liberacion de la esclavitud.
Los casos anteriores son ejemplos de grandes crisis nacionales en las cuales la población, sus tierras, sus bienes, los hijos, la libertad y la soberania bordeaban el abismo o sucumbieron. Ellos emplearon armas diferentes para un mismo propósito. Los grandes males por los que atraviesa la República Dominicana y otras naciones han generado un debate nacional en múltiples direcciones. Pero hasta ahora,la discusión no toma en cuenta la principal arma de combate con que contamos: el poder de Jesús para enfrentar el mal, salvarnos y librarnos de los adversarios, la bendición de Dios para prosperarnos.
Leónidas I y sus soldades murieron en la batalla, a pesar de su destreza militar y sus instrumentos de guerra. David, siendo un muchacho, definió su armamento: “Isaias 17:45. Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo a ti en el nombre del Señor de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado. Isaias 17:47 y para que sepa toda esta asamblea que el Señor no libra ni con espada ni con lanza; porque la batalla es del Señor”. David tuvo que luchar. El Espíritu de Dios estuvo con él en la batalla, dándole la victoria.
El rey Ezequías no podía pelear contra un enemigo tan numeroso, por tanto oró al Señor, diciendo: “Isaias 37:20 Y ahora, Señor, Dios nuestro, líbranos de su mano para que todos los reinos de la tierra sepan que solo tú, oh Señor, eres Dios”. Daniel oró para que Dios los perdonara y restaurara la nación, retornando a su tierra la poblacion deportada a Babilonia, y así fue. Si volvemos a Dios, El sacará a Dominicana de esta crisis. El es el todopoderoso y escucha a su pueblo que clama por justicia,proteccion y liberacion. Jesucristo es el protector de República Dominicana.
El único Dios verdadero, el Dios de la Biblia es el fundador de las naciones. Instruyó a la familia el mismo día de su creación (Adán y Eva) para que poblaran toda la tierra . Repitió la misma orden a Noé y sus tres hijos, Sem,Cam y Jafet, después del diluvio. Nimrob, el primer dictador del mundo impidió que la humanidad reunida en la llanura de Sinar se asentara en otros lugares, por lo cual, Dios confundió sus lenguas (torre de Babel) y les obligó a dispersarse, formando pueblos, lenguas y naciones. De Sem,Cam y Jafet provienen todas las familias y razas originales que constituyen todos los paises del mundo.
El plan de Dios para la humanidad incluye la formación de naciones soberanas e independientes, habitadas por hombres libres, que vivan para la gloria de Dios y bajo su amparo. En la Biblia se establecen los principios para alcanzar el favor divino. Busquemos los medios señalados por Dios para que República Dominicana alcance plenamente las bendiciones prometidas, las cuales son obtenidas “no por poder ni por fuerza, sino por el Espíritu del Señor”. De esos medios o armas espirituales es que tenemos que apropiarnos y usarlas efectivamente. Son gratis, accesibles, inagotables, incautables.
El pacto de Dios con las naciones para bendecirlas es simple: “ Deut 28:1 Y sucederá que si obedeces diligentemente al Señor tu Dios, cuidando de cumplir todos sus mandamientos que yo te mando hoy, el Señor tu Dios te pondrá en alto sobre todas las naciones de la tierra. Deut 28:2 Y todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán, si obedeces al Señor tu Dios. Deut 28:3 Bendito serás en la ciudad, y bendito serás en el campo”. Los líderes o fundadores de naciones como Estados Unidos y Alemania hicieron pacto con Dios,ésta es la clave de sus libertades y prosperidad.
El juramento de los trinitarios era un acuerdo para formar la nación Dominicana. Bajo el nombre o autoridad de la Santisima Trinidad, se comprometian ante Dios para crear la República. Era un pacto con Dios, en el cual pedian libertad y bendicion esta tierra. Y lo que Dios bendice, nadie puede maldecirlo. Esta es nuestra arma poderosa contra los que denigran, deshonran, calumnian,difaman,desacreditan y maldicen nuestro pais. Habiendo hecho pacto con Dios, si acudimos a El en sus términos, tendremos la proteccion,abrigo, cuidado y bendiciones prometidas. Ven a Jesús, ésta es la clave.
Veamos algunos datos que hablan del pacto de Dios con la República Dominicana. El nombre “Dominicana “ viene de “Dominus”, el Señor. Somos la Republica del Señor! .El nombre histórico de la isla y de la capital “Santo Domingo”, o sea el día santo de la cristiandad, el día del Señor, el santo domingo. El gentilicio“los dominicanos”, equivale a “los del Señor”. De los nombres antiguos de la Isla, Quisqueya, significa “ tierra madre” y ciertamente, Dios hizo que de aquí salieron casi todos los colonizadores del continente americano.
Veamos los símbolos patrio. La bandera tiene una cruz en el centro que extiende hacia las extremidades y divide la bandera en cuatro rectángulos: los de arriba son azul (en el lado del asta) y rojo, y los de abajo son rojo (en el lado del esta) y azul. En el centro de la cruz existe el escudo de armas de la República Dominicana. La cruz habla de Jesus. Los colores, desde el punto de vista bíblico significan, el azul, es celestial, el rojo, es espiritual y el blanco, la pureza y humanidad de Jesús. Otra interpretación dada es el rojo es la sangre derramada por los patriotas y el blanco, la paz y unión entre dominicanos.
El escudo: tiene los mismos colores de la Bandera Nacional dispuestos en igual forma. Lleva en el centro la Biblia abierta en el Evangelio de San Juan, capítulo 8, versículo 32, y encima una cruz, los cuales surgen de un trofeo integrado por dos lanzas y cuatro banderas nacionales sin escudo, dispuestas a ambos lados; lleva un ramo de laurel del lado izquierdo, que representa la inmortalidad y uno de palma al lado derecho, que simboliza la libertad. Está coronado por una cinta azul ultramar en la cual se lee el lema “Dios, Patria y Libertad”. Es obvia la alusion y vínculo con Jesucristo de todos esos elementos.
Resumiendo. Las armas para la República del Señor que necesitamos es volvernos a Dios, pedirle perdón como individuo y como nación. Clamar salvación a Jesús. Orar insistentemente para que toda especie de mal contra tu casa, contra tus hijos, contra tu familia, contra tu comunidad, contra la República Dominicana, sea frenado, eliminado por Jesús. Que toda maldición sea quebrantada. Una nación con un corazón humillado delante de Dios, no será rechazada por El. Sus enemigos serán derrotados. Esa es nuestra arma espiritual poderosa. Disparala!. Usala ahora, hoy es el día de la salvacion!
Terminemos con el himno. Dios nos hizo una nación y puso la Biblia en su escudo.Jesucristo dio por insignia la cruz de nuestra bandera. Dios es quien defiende nuestra patria y nuestra libertad. Aunque por cobardía o convenios cedan los gobernantes, no recularemos antes los ataques salvajes, desproporcionados. Dios nos hizo un estado soberano y peleará nuestra batalla. Jesús frenará el asalto a nuestra dignidad, a El clamemos. Nos acorralan porque Jesucristo nos hizo un pueblo en busca de su gracia, su misericordia. Una nación que no ha mendigado su libertad.
“Que si fuera mil veces esclava, otras tantas ser libre sabrá”