Añejas disputas salariales se recrudecen en la MLB

imagen

NUEVA YORK.— Los dueños de equipos de Grandes Ligas y el sindicato de peloteros han retomado sus añejas disputas salariales que se remontan a hace medio siglo, en el que han habido ocho paros laborales.

Los jugadores propusieron reanudar la temporada en la pandemia del coronavirus con un calendario regular de 114 juegos y salarios prorrateados, con lo que cada pelotero obtendría alrededor del 70% de su sueldo original.

Esa propuesta fue presentada el domingo, cinco días después de que la oficina de Grandes Ligas ofreciera un plan para un calendario regular de 82 encuentros y nuevas reducciones de salarios que dejarían a cada jugador con entre 23 y 47% de su salario estipulado, una medida en la que los jugadores con mayores ingresos quedarían sujetos a los mayores recortes.

MLB asegura que se perderían 640.000 dólares adicionales por cada juego adicional de campaña regular que se lleve a cabo. El sindicato ha dicho que no cree que esos cálculos sean correctos y pidió a la MLB documentos y datos adicionales.

El comisionado de Grandes Ligas Rob Manfred discutió el siguiente paso el lunes con los dueños de equipos.

Si se reanuda la pretemporada a mediados de julio de cara a iniciar la campaña a comienzos de julio, se debe llegar a un acuerdo antes de la próxima semana.

Jugadores y equipos acordaron el 26 de marzo “completar la temporada 2020 y la postemporada dentro de lo económicamente viable”, con estas tres condiciones:

— Sin restricciones gubernamentales para jugar con aficionados en los parques de temporada regular

— Sin que haya restricciones de viaje entre Estados Unidos y Canadá.

— La decisión de Manfred, después de consultar con el sindicato y expertos de Salud, que no existe riego para jugadores, personal y aficionados para llevar a cabo los encuentros con público en los 30 parques de campaña regular siempre y cuando MLB y el sindicato “discutirán de buena fe la viabilidad económica de jugar en estadios vacíos y en sitios neutrales apropiados”.

Los jugadores afirman que el acuerdo del 26 de marzo cubrió el tema salarial y no están obligados a retomar el tema. MLB asegura que sí lo están si existe el plan de utilizar estadios vacíos, que es la situación actual.

Algunos jugadores, incluyendo a Blake Snell, ex Cy Young de la Liga Americana, han dicho que no vale la pena que jueguen por menos dinero. Algunos directivos han dicho que los equipos deberían ofrecer un calendario más corto, incluso de 50 partidos.

La desconfianza entre ambas partes se encuentra en su nivel más alto desde la huelga de 1994-95, la más reciente de ocho paros que empezaron en 1972. Hay un montón de razones:

SALARIOS

Los salarios se han mantenido estable durante un periodo en el que los ingresos se han incrementado a un 4% anualmente, según cálculos. Eso es un indicio que el contrato colectivo que se pactó en noviembre de 2016 ha beneficiado más a los clubes que al gremio de peloteros,

Las planillas alcanzaron los 4.000 millones en 2016, de acuerdo con cifras compiladas por la oficina del comisionado que incluyeron los salarios de temporada y otros desembolsos. Las planillas se han mantenido alrededor de esa cifra. Alcanzó los 4.200 millones este año, al tomar en cuenta el total al 28 de marzo.

Un apático mercado en la agencia libre tras las campañas de 2017 y 2018 provocó el enojo de los jugadores. Un mercado más activo durante el último receso invernal no ha calmado a los peloteros ni a los directivos de su sindicato.

PERDER A PROPÓSITO

Los jugadores también están indignados por lo que describen perder a propósito, algo que los clubes definen como una reconstrucción. Ven a los equipos que tiran la toalla como un elemento nocivo para toda la industria, lo que ha provocado mermas en la concurrencia a los estadios en las últimas cuatro temporadas.

Manfred sostiene que cada club decide por su cuenta si se considera en condiciones de ser contendientes. Los equipos sacan provecho del sistema actual al traspasar veteranos y recurrir al draft y el fichaje de talento juvenil procedente de Latinoamérica para volver a ser candidatos. Los campeonatos de Kansas City en 2015 y en 2017 son mencionados como los mejores ejemplos de esa fórmula.

El sindicato radicó una querella en febrero de 2018, argumentando que los Marlins de Miami, los Atléticos de Oakland, los Piratas de Pittsburgh y los Rays de Tampa Bay no hicieron uso apropiado de los fondos que recibieron mediante la repartición de ingresos. El contrato colectivo especifica que un equipo debe usar el dinero “en un esfuerzo para mejorar su rendimiento en el terreno”.

MLB defiende a los equipos al afirmar que el dinero se puede usar en otras facetas que no sean la nómina de Grandes Ligas, con los fichajes de amateurs y el refuerzo de su estructura de ligas menores como un par de ejemplos. Manfred destacó que Oakland se clasificó a los playoffs en 2018 y Tampa Bay el año pasado.

MANIPULACIÓN DEL TIEMPO DE SERVICIO

Los jugadores se quejan reiteradamente que los clubes manipulan su tiempo de servicio para demorar la agencia libre y la elegibilidad para el arbitraje salarial.

El árbitro Mark Irvings desestimó el reclamo de Kris Bryant contra los Cachorros, y aceptó la argumentación del ejecutivo Theo Epstein para demorar el debut del tercera base al inicio de la temporada de 2015. Irvings falló que no se pudo demostrar un “motivo perverso” y que el sindicato no pudo demostrar que se actuó de “mala fe para manipular el tiempo de servicio. Pero no dio un dictamen sobre si la manipulación de servicio es válida en cualquier circunstancia.

Manfred sostiene que los clubes tiene facultada para definir sus rosters.

of-am

Compártelo en tus redes:
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
0 Comments
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios