PUERTO PRINCIPE.- Al menos 307 personas han muerto entre abril y agosto pasados víctimas de la violencia e inseguridad que se registra en siete sectores de la zona metropolitana de Puerto Príncipe, según reveló un informe parcial difundido por un organismo de la Iglesia católica de Haití.
“El fenómeno de la violencia y la delincuencia abarca muchos más territorios. Hay muchos más lugares donde la gente no puede circular. Los actos de violencia son cada vez más repugnantes”, denunció Jocelyne Colas Noel, coordinadora general de la Comisión Episcopal para la Justicia y la Paz (CE-JILAP).
El estudio se fundamenta en investigaciones, denuncias y la información que circula en los medios de comunicación.
“En los últimos cinco meses el área metropolitana de Puerto Príncipe ha experimentado una serie de grandes episodios de violencia en los que innumerables personas han perdido la vida”, dice el documento.
Muchas de estas personas han muerto por disparos y algunas en accidentes de carretera.
El informe recomienda la independencia del Poder Judicial; las reformas judiciales; un cambio en el papel de la Fiscalía; la aproximación de las fuerzas policiales a la población de los barrios, y un presupuesto adecuado para que la Policía y el Poder Judicial puedan realizar su trabajo.
Asimismo, solicita más respeto de los derechos humanos; el fin de la represión policial contra los manifestantes, y el fin de la presunta complicidad entre las autoridades con las bandas armadas del país.
La inseguridad y los actos de violencia han aumentado de manera alarmante en las últimas semanas en Haití. Las bandas armadas están ocupando más territorio, las poblaciones civiles están siendo atacadas y se están perpetrando masacres.
La Policía anuncia que las investigaciones avanzan y hay varios arrestados por el ataque.
Las manifestaciones, sin embargo, no han cesado desde el crimen contra Dorval. Durante las últimas dos semanas casi todos los días los manifestantes han tomado las calles para exigir que se aclare su muerte.
Estudiantes, militantes de oposición y abogados se manifiestan para exigir que las autoridades detengan la ola de violencia que arropa al país, principalmente a Puerto Príncipe.
Organizaciones de derechos humanos acusan al Gobierno de confabularse con las organizaciones criminales.
El poderoso líder de banda, el expolicía conocido como ‘Barbecue’, ha sido señalado de estar involucrado en casi todas las masacres que han tenido lugar en los últimos tres años en barriadas humildes en todo el país.