Una carreta repleta de retóricas y soberbia.
“Nadie está más vacío que aquel que solamente está lleno de sí mismo”.
Una de las definiciones de “retórica” en el diccionario español es: Lenguaje afectado y pomposo.
Para más claridad, colocan esta oración como ejemplo: “Utilizó mucha retórica, pero en el fondo no dijo nada interesante”
Esto es exactamente lo que está sucediendo en la actual campaña electoral. Carromatos sin ninguna carga, que como dice el refrán; “Cuanto más vacía está la carreta, mayor es el ruido que hace”.
Se le ha sacado en cara al candidato Gonzalo Castillo, su parquedad en el hablar, contario a su contrincante en esta lucha electoral, que continúa con sus desfasados discursos grandilocuentes.
Mucha perorata y poco contenido, mientras el Lic. Castillo ha retomado el discurso práctico, sencillo y lleno de propuestas, utilizados por el Profesor Juan Bosch.
Esto ha enervado a la facción minoritaria, porque no hay cosa más contundente que la verdad y siguen en su afán de seguir utilizando sofismas y diatribas, ofreciendo proyectos virtuales que no son más que pompas de jabón.
Gonzalo no promete sueños, sino que se ha comprometido a seguir y mejorar en lo posible, las iniciativas que han dado frutos en la actual gestión, como es el rescate y el futuro desarrollo de terrenos de vocación turística, que estaban en manos de reales delincuentes como Bahía de las Águilas.
Gonzalo se ha comprometido a renegociar contratos de lesa patria, como responsablemnte lo hizo el actual gobierno, con el oneroso, 97% para la Barrick Gold y solo 3% para el pueblo dominicano, luego de que esta multinacional recuperara totalmente su inversión.
Gonzalo ha dicho que revisará otros contratos como la autopista a Samaná, donde el estado, increíblemente, se comprometió a pagar el llamado “Peaje Sombra” garantizándole a la compaña constructora pingües beneficios, aunque no circule por esa carretera ni siquiera una motocicleta.
El Lic. Castillo, con los pies firmemente sobre la tierra, va a seguir y en algunos casos aumentar, los programas que han dado muy buenos resultados en su aplicación, como son las Visitas Sorpresa, que, a partir del 2020, no solo van a ser rurales sino también urbanas.
Expandir a las ciudades el programa de Asistencia Vial en las carreteras, ponderado hasta por opositores a este gobierno, con un componente adicional que es el de la seguridad ciudadana.
Sin pausas, continuar implementado uno de los mejores programas de toda nuestra historia, como es el sistema de emergencia 911, el cual ya cubre el 76% de nuestro territorio.
Ni que decir de la tanda extendida y la salud del pueblo, con nuevos centros educacionales y modernos hospitales.
Seguir sembrando el país no solo de árboles para la reforestación, sino también de ciudades Juan Bosch, Barquitas, Domingo Sabio, El Riito, Boca de Cachón.
Esas retoricas de soberbios que se creen predestinados, no caben en el programa de gobierno del Licenciado Gonzalo Castillo.
Gonzalo no promete un Nueva York chiquito, sino lo que está haciendo el actual gobierno del Lic. Danilo Medina,
¡Una República Dominicana cada vez más grande!