Trump y Putin: ¿La Paz Mundial o la catástrofe nuclear?
«No podemos dejar derramar una gota de sangre estadounidense sin derramar la sangre del mundo entero… Nuestra sangre es como la corriente del Amazonas, constituida por un millar de nobles afluentes que desembocan en un solo cauce. No somos una nación, antes bien somos mundo; porque, salvo que podamos proclamar que fuimos engendrados por todo el mundo, como Melquisedec, no tenemos ni madre ni padre… Nuestro linaje se pierde en la paternidad universal. … Somos los herederos de todos los tiempos y con todas las naciones dividimos nuestra herencia». Herman Melville
La administración del Presidente Donald Trump antes de cumplir los primeros 100 días de su gestión, ha empezado con una agenda de guerra como ejecución principal de su política exterior; siendo el primer mandatario en la historia norteamericana que no le ha dado espacio a la vía diplomática como herramienta para dirimir los conflictos internacionales.
Su primera acción fue impregnar a Siria con una lluvia de misiles en un ataque sorpresa, como represalia por el supuesto uso de armas químicas por el gobierno sirio contra objetivos civiles. Esto tiene la lectura inequívoca de que al Pentágono llegaron nuevos y briosos halcones; volaron las palomas demócratas del ex presidente Barack Obama: hay una nueva política exterior que no será contemplativa.
Inmediatamente a esta acción le enseña el músculo a Corea del Norte, desplegando un portaaviones y un grupo de ataque en el mar de la China Meridional, que según el sitio Web de la Marina estadounidense, informó que se trata de un portaaviones de la clase Nimitz, Carl Vinson, y el destructor Wayne E. Meyer, entre otros buques. La operación está bajo la dirección del contraalmirante James Kilby.
Por lado, Japón está preparando el envío de varios buques de guerra al mar de la China Oriental para unirse al portaaviones estadounidense USS Carl Vinson en su lucha por disuadir a Corea del Norte de seguir llevando a cabo pruebas de misiles y ensayos nucleares.
Esta situación está creando mucho nerviosismo en el área; los países que hacen frontera con Corea del Norte han reaccionado pidiéndole a EE.UU que no produzca “ninguna acción que constituya una agresión a Corea del Norte o medida que suponga un desafío para la soberanía y seguridad de China”, manifestó el portavoz de la Cancillería china, Geng Shuang
Paralela y simultáneamente, el gobierno norteamericano a las maniobras frente a Corea del Norte, y una semana después de lanzar el ataque contra el gobierno de Siria, Estados Unidos ha lanzado en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, una GBU-43/B, conocida como “la madre de todas las bombas”, con la supuesta intención de atacar objetivos del Estado Islámico. Es primera vez en que EEUU utiliza en una operación militar está potente bomba de 9.8 TM, y de las cuales 8,4 son explosivos de alta potencia en su cono armado, es la mayor bomba no nuclear.
Según el ministerio afgano de Defensa en un comunicado «El bombardeo destruyó reductos estratégicos de Dáesh (acrónimo árabe del EI) y un complejo de túneles profundo y mató a 36 combatientes del EI» en el distrito de Achin, en la provincia oriental de Nangarhar. Aparte de los daños materiales esta acción tiene como finalidad crear un impacto psicológico en todas las áreas de inestabilidad y guerra, dejando explícitamente establecido que el imperio del norte inicia un nuevo ciclo global de guerras a diferentes escalas.
Volvamos a la crisis en la Península de Corea del Norte, su Ministerio de Asuntos Exteriores de ha respondido a la decisión de Estados Unidos de enviar un grupo de ataque de portaaviones, asegurando que Pyongyang está «listo» para responder «a todo tipo de guerra» que decida Estados Unidos. En un comunicado difundido por la agencia norcoreana de noticias, KCNA.
Los estrategas de guerra de Corea del Norte, Rusia, china e Irán, están estudiando todos los escenarios posibles de una confrontación regional que tenga como escenario el Mar de China Meridional y la Península de Corea, o un ataque simultáneamente a varios objetivos del eje de contrapeso militar a Estados Unidos de América. Lo más probable que el Pentágono tenga todas las cartas sobre la mesa y cuando se decidan las acciones militares informar a sus aliados, tratando de proteger los más vulnerables, como sería a Israel de parte de Irán y Corea del Sur y a Japón por Corea del Norte.
La gran incógnita es la respuesta de la República Popular de China, si se mantendrá neutral o se definirá con Rusia y aliados, este sería el enigma más importante de desentrañar, porque durante estas escaramuzas estadounidenses la reacción del gigante asiático ha sido en el marco de la diplomacia. El canciller Wang Yi de China ha advertido que “el conflicto podría estallar en cualquier momento”, a medida que la tensión aumenta entre Estados Unidos y Corea del Norte, “Llamamos a todas las partes a abstenerse de provocar y amenazar a la otra, ya sea en palabras o acciones, y no dejar que la situación llegue a una etapa irreversible y difícil de manejar.” añadió Wang.
El mundo no vivía tensiones una situación como la actual desde la «Crisis de Misiles» que fue el conflicto entre los EE.UU. y Cuba, con la Unión de Repúblicas Socialistas Sovieticas (URSS) como telón de fondo de la crisis en octubre de 1962, la cual se produce cuando Estados Unidos descubrió la bases de misiles nucleares de alcance medio soviéticos en territorio la isla de Cuba. El mundo estuvo al borde de un holocausto nuclear, fue un momento crítico, período conocido como La Guerra Fría, fue una estrategia del líder soviético Nikita Serguéievich Jruschov, el comandante Fidel Castro en una entrevista explicó con lujo de detalles todo lo sucedido durante la «Operación Añádir» que fue el código utilizado por la Unión Soviética en esta operación súper secreta que consistía en desplegar misiles balísticos de alcance medio, aviones caza, bombarderos y una división de infantería mecanizada en Cuba.
El 26 de octubre el gobierno soviético remitió un mensaje a la en la que Jruschov al presidente Kennedy, planteándole llegar a un acuerdo en la que EEUU renuncie a derrocar el gobierno revolucionario de Fidel Castro. Los misiles fueron retirados y la paz retornó a la región.
La situación actual tiene altos niveles de peligrosidad por que la ONU, como organismo mundial llamado a buscar una salida diplomática a la crisis actual, parece haber perdido sus capacidades para impulsar una agenda diplomática para lograr un acuerdo entre las partes.
Para entender lo que sucede el conflicto entre Estados Unidos de América y Corea del Norte, debemos hacer una síntesis del estado de guerra entre las dos naciones que se remonta a 67 años. El 25 de junio de 1950, Corea del Norte invadió a Corea del Sur por orden de Kim II-sung, constituyendo este episodio bélico el primer gran affaire de la guerra fría. La rápida intervención de EEUU y la ONU hizo recapitular a Corea del Norte, en una conflagración donde participaron también el ejército de China y la URSS. Tras el triunfo de la revolución maoísta, cambió el equilibrio geopolítico de la humanidad, dando paso a la lucha histórica entre oriente y occidente, entre capitalismo y comunismo.
Historiadores norteamericanos han convenido en aceptar que el ataque de Corea del Norte tomó por sorpresa al presidente Harry S. Truman, ya que el 20 de junio Dean Acheson expresó durante una comparecencia ante el Congreso que la guerra era poco probable, contradiciendo un informe de la CIA difundido a principios de marzo, que había previsto la invasión de Corea del Norte a Corea del Sur, justo en el mes de junio del año 1950.
Los estrategas de las diferentes potencias temían que esta conflagración se convirtiera en una tercera guerra mundial pues, por un lado, Corea del Sur y la ONU contaron con un ejército constituido por fuerzas de EEUU, Australia, Bélgica, Canadá, Colombia, Filipinas, Francia, Reino de Grecia, Países Bajos, Nueva Zelanda, Luxemburgo, Reino Unido, Sudáfrica, Reino de Etiopía, Turquía y Tailandia. Debemos acotar que EEUU organizó el Grupo de Operaciones Especiales Smith y una División Militar de Puerto Rico, en la que participaron muchos latinoamericanos residentes en esta isla.
Los resultados fueron fatales: las bajas infligidas en Corea del Sur, EEUU y los aliados ascendió a más de un millón de víctimas entre militares, civiles y desaparecidos, las pérdidas de Corea del Norte fueron casi del doble. El 27 de julio del año 1953 se firmó el armisticio en Panmunjum entre ambas partes, el líder norcoreano Kim Jong-un, quien desde su ascenso al poder ha puesto su ejército en máxima alerta de guerra, ha realizado maniobras militares y lanzando los últimos misiles con dirección al mar de Japón, vale decir que Corea es hostil a Japón por ser quien dominó la Península coreana desde principio del siglo pasado hasta la Segunda Guerra Mundial cuando los nipones pierden la guerra.
Abogamos por la puesta en marcha acciones diplomáticas de naciones, organismos internacionales, premios Nobel de la Paz y personalidades independientes con credibilidad e imparciales, para lograr que se disminuyan las acciones y retóricas bélicas; una cumbre entre líderes Trump y Putin, porque el mundo tiene la impresión que el encuentro entre el secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, y el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, no logró disminuir las tensiones entre ambas naciones.
Hay serias preocupaciones por los perfiles psicológicos , carácter, temperamento y personalidad de cada uno de los principales líderes con capacidad de dar el primer paso, el presidente de los Estados Unidos de América Donald Trump y el Presidente de Corea del Norte Kim Jong-un, cuyos estilos son agresivos y competitivos.