Suiza, Argentina y Francia ganan en el Mundial de Fútbol
BRASILIA.- Haris Seferovic anotó en los descuentos y Suiza superó el domingo 2-1 a Ecuador en el debut de ambos en esta Copa del Mundo. Seferovic coronó un fulminante contragolpe para marcar en el último suspiro de los tres minutos de descuentos que otorgó el árbitro Ravshan Irmatov. «Ese error del último minuto nos costó el juego», señaló el técnico de Ecuador, Reinaldo Rueda. «Un resultado inmerecido por lo que se hizo en la cancha». Enner Valencia abrió la cuenta por Ecuador con un gol de cabeza a los 21 minutos, y Admir Mehmedi igualó a los 48. Suiza quedó como líder del Grupo E con tres puntos. Francia y Honduras jugaban más tarde por el mismo sector. «Pecamos, tres minutos que había que controlar el juego. Si no podíamos ganar, era buscar el empate. Nos desordenamos en el último minuto», apuntó el colombiano Rueda, quien condujo a la selección hondureña en el pasado Mundial de Sudáfrica. «Un rival difícil. Cada partido es diferente hay que levantar la cabeza», analizó Rueda. Valencia, campeón goleador del pasado torneo mexicano con el Pachuca, se elevó en el corazón del área y remató de cabeza una falta cobrada por Jefferson Montero. Mehmedi igualó por los suizos de cabeza, en un partido en el que imperó el vértigo sobre el orden táctico. «Por ahí se hicieron las cosas bien, pero hay que seguir mejorando», apuntó Valencia. ARGENTINA VENCE A BOSNIA RIO DE JANEIRO.- Cuando Argentina la estaba pasando mal, Lionel Messi bajó de las nubes y clavó un golazo que se tradujo el domingo en el triunfo 2-1 sobre Bosnia-Herzegovina que marcó el debut de ambos equipos en la Copa Mundial. El cielo del Maracaná se iluminó a los 65 minutos cuando Messi pasó entre un bosque de piernas y lanzó un disparo que se fue a la red con una dosis de suspenso, ya que pegó en un palo y entró, para estirar la diferencia que los argentinos habían sacado con un madrugador gol en contra de Sead Kolasinac a los tres. Vedad Ibisevic descontó a los 84. “Quería sacar la energía de otras ocasiones, en que las cosas no se daban, siempre es un gusto anotar con la selección”, señaló Messi, que marcó su segundo gol en un Mundial casi ocho años después del primero, que consiguió el 16 de junio de 2006. Hasta entonces, la “Pulga” del Barcelona cumplía con una actuación para el olvido, fiel reflejo de lo mal que jugó Argentina ante una Bosnia que llevó peligro por arriba y por abajo y que erigió al arquero Sergio Romero en figura de su equipo, al tapar al menos tres claras pelotas que apuntaban a la red en este duelo por el Grupo F. “Es el primer partido, la ansiedad, los nervios”, comentó Messi a ras de cancha. “Era importante comenzar ganando. Tenemos cosas por mejorar, pero es importante empezar con tres puntos”. En lo que fue el gol más rápido de este Mundial, Messi cobró un tiro libre por izquierda que Marcos Rojo peinó desviado, pero la pelota rebotó en Kolasinac y se tradujo en el primero de Argentina, ante un estadio Maracaná repleto con unas 75.000 personas, la mayoría con los colores albicelestes del equipo sudamericano. íPobre Bosnia, te espera una goleada! Pero no, ni por asomo. Argentina se hundió en la intrascendencia, perdió el mediocampo donde Javier Mascherano la veía pasar, la defensa sufría con cada pelota terrestre o aérea y Messi y su compinche Sergio Agüero casi no la tocaron. “Messi es el mejor jugador de mundo”, fue la síntesis que hizo Sabella de Messi, quien jugó con altibajos pero convirtió un golazo con esas apariciones fantasmales. Romero salvó el empate al jugarse la vida con el cuerpo tras un remate de Izet Hajrovic y después el lateral Rojo fue amonestado por falta contra Kolasinac en dos muestras claras de la desorientación de los argentinos, lejos de lucirse en el juego colectivo y menos en el individual. Messi se atrevió a una incursión ofensiva que no pasó a mayores y al promediar la etapa buena parte del público pudo haberse enterado que el arquero bosnio se llama Asmir Bewgovic. Fue cuando conjuró un disparo de Mascherano, con Messi, Agüero y compañía sin despertarse de la siesta. FRANCIA GANA PORTO ALEGRE, BRASIL.- El primer gol con la ayuda de la tecnología asistió a Francia a una contundente victoria 3-0 ante una Honduras que debió haber sido menos hosca y tener más ambición en su debut de la Copa del Mundo. Luego que un penal cobrado por Karim Benzema adelantó a Francia en el epílogo del primer tiempo, el Mundial puso a prueba la tecnología que ayuda a los árbitros para determinar si el balón efectivamente cruzó la raya de gol. Y lo fue, a los 48 minutos, cuando Benzema remató de zurda un centro servido desde la derecha. La pelota pegó en el segundo palo sin traspasar la raya, pero luego rebotó en el portero hondureño Noel Valladares y fue un autogol. El arquero intentó sacar el balón, pero ya era muy tarde. Cada arco tiene siete cámaras apuntadas sobre la raya para determinar si una pelota cruzó la línea. El árbitro brasileño Sandro Meira Ricci, al igual que todos los árbitros en este Mundial, utilizan un reloj especial que recibe una señal y le indica si el balón cruzó, como sucedió en este caso. Benzema acabó por sentenciar el partido a los 72, esta vez sin dejar ningún tipo de recelo, con un remate cruzado y violento que infló la red. Fácil trámite para Francia, favorito en el Grupo E pese a que no tiene la condición de cabeza de serie. Aparte de plantear un partido de pusilánime, en el que apeló al contragolpe, Honduras se complicó más al quedarse en inferioridad numérica por la expulsión de su volante Wilson Palacios por doble amonestación tras cometer la falta sobre Paul Pogba que derivó en el penal ejecutado por Benzema. “Fue un partido anormal de todos modos, te expulsan un jugador tan rápido”, comentó el técnico de Honduras, Luis Fernando Suárez. “Después creo que ellos hicieron las cosas mejor que nosotros”. Los himnos nacionales no se entonaron. of-am