Senador Wilton Guerrero: ¿ festín de derroche ?
Por JUAN FRANCISCO MOJICA
Tengo más de dos años desde el 2013 a la fecha pidiendo al senador por la provincia Peravia, Wilton Guerrero, que sea transparente con los recursos del Estado y que cumpla con su deber de informar a la población como administra los fondos de compensación social del Senado.
Sin embargo, el senador peraviano sigue violando sus disposiciones internas y la ley que ellos mismos aprobaron.
El senador dice que ha administrado los recursos del Senado o del pueblo apegado a la moralidad, pulcritud, ética profesional, responsabilidad y transparencia.
Pero ni el Senado ni la Contraloría ni Impuestos Internos ni la ciudadanía tienen detalles sobre los gastos del senador.
Está en el portal digital que el senador recibe $50,000 de gastos de representación, $25,000 de dietas y 25,000 de hospedaje. Percibe $190 mil mensual para gastos de alquiler de oficina, luz, agua, teléfono, combustibles y otros. Y le ingresa $570 mil mensual por concepto de los fondos de compensación social o barrilito.
Como presidente de la Comisión de Ética del Senado y miembro de 9 comisiones, recibe de viáticos cerca de 80 mil pesos mensuales, asista o no a las sesiones. Sabemos que nunca ha reunido la Comisión de Etica.
Pese a sus denuncias y fabulas en la lucha contra el narcotráfico, no tiene un solo programa de ayuda.
Solo ha publicado una declaración jurada de bienes en 2010 donde reportó poseer recursos por $15 millones. Es decir, viola la ley 311-14de declaración de patrimonio.
Se esmera en resaltar que tiene un 97% de asistencia a las sesiones del Senado y a sus reuniones. Pero calla ante las críticas de que no ha propuesto un solo proyecto de ley tal como establece el artículo 93.q de la Constitución.
No tiene un informe contable de gastos sin embargo dice que gastó el 18% en gastos corrientes, el 32% en educación, salud y deporte, el 22% en viviendas y el 28% en programas de ayudas y gastos fúnebres.
Nunca ha explicado las dos exoneraciones que le entrega el Senado sin límites para importar dos vehículos sin pagos de impuestos en los cuatros años del hemiciclo.
La oficina senatorial en Baní tiene bienes pero nadie sabe el origen, el costo, y los trabajos realizados.
Todos los años reparte a los niños y a las madres pero nunca publica el número de cédula de las personas que el senador ayuda ni el RNC de las empresas beneficiadas.
Nadie sabe qué cantidad se gasta, ni donde ni con quién o si le quedan recursos disponibles.
Pero aun en medio de todo esto lo que le estamos pidiendo al senador es que explique en que gasta 570mil mensual, que son 6millones 400mil al año y que representa más 27millones de pesos en los 4 años que tiene como senador.
Todo esto deja claro que durante todos estos años, al igual que con las ONG, lo que hubo y hay es un festín de derroche y de mal uso de recursos del barrilito.