Ruidos que no convienen al proyecto Leonel 2020
El 23 de agosto pasado fue interpuesta una querella en la fiscalía del Distrito Nacional en contra de los ingenieros Freddy Pérez, José Silfa Valencia y Ramón Andújar Ramírez, acusándolos de estafa, asociación de malhechores y abuso de confianza, por su ex socio, el empresario Carlos Gómez Ureña, representado por los abogados Julio Santamaría, Daniel Izquierdo y Huáscar Tejada.
Luego, el 25 de noviembre la prensa nacional recoge el emplazamiento a la fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos por parte de los abogados de Gómez, quienes alegan que el también fiscal Franklin Céspedes apoderado del caso se ha negado a avanzar en la pesquisa, reclamando a la representante del Ministerio Público dar curso a la querella interpuesta por su cliente hace varios meses.
Cuatro días después, el 29 de noviembre el señor Freddy Pérez emplaza mediante acto de alguacil a su ex socio Carlos Gómez, para que se retracte en las siguientes 72 horas de las acusaciones y las declaraciones públicas que este había hecho en televisión, radio y medios escritos o de lo contrario él procedería en su contra.
Transcurrido esos días, el pasado miércoles 19 de diciembre y en plena época de navidad, el señor Pérez se despacha con una contra querella a los señores Carlos Gómez, y su abogado Julio Santamaría, a quienes acusa de difamación e injuria, un derecho que le asiste en procura de “limpiar su nombre y el de su familia”.
Créame señor Pérez que sentimos mucho verlo en esta situación, ahora bien ya que usted no respeto el asueto navideño, que son días de recogimiento para compartir con nuestros seres queridos y celebrar el nacimiento del niño Jesús, el nuevo año 2019, consideramos que esta acción suya debió ir acompañada de una “renuncia o licencia de sus funciones” como coordinador del sector externo del expresidente, doctor Leonel Fernández, hasta tanto pueda resolver este impase con las partes a través del diálogo, negociación y en última instancia en los tribunales.
Al proyecto político Leonel 2020, del cual soy parte no le es conveniente los ruidos provocados por su desatinada decisión de ir a la ofensiva en este caso, que por demás es un tema personal y nada tiene que ver con este proyecto, aunque si le perjudica. A pesar de que hablo en términos propios, éste es el sentir de la gran mayoría del colectivo que componemos el mismo, por lo que le sugerimos tener mayor ecuanimidad, cordura y prudencia en lo adelante, y a la vez le manifestamos que puede contar con mi solidaridad y colaboración.