¿Qué es una Ley de Partidos?
Ante las grandes expectativas creadas, es comprensible que muchos se pregunten: ¿qué es una Ley de Partidos? Tal ha sido la confusión creada que muchas personas están convencidas de que a partir de su aprobación quedarán resueltos todos los males que afectan los procesos electorales.
La respuesta es, a mi modo de ver, la siguiente: una Ley de Partidos, es sencillamente un estatuto general que se instituye con el fin de garantizar la democracia interna y la transparencia de los partidos políticos, con el cual deben sintonizarse los estatutos particulares de cada uno de ellos.
De su lado el reconocido profesor norteamericano, Kenneth Janda, considera que una Ley de Partidos “también se refiere al cuerpo de leyes de estado en relación a lo que los partidos deben y no deben hacer, que es legal e ilegal en política partidista”.
La Constitución del 2010 se convirtió en una fuente para la elaboración de la Ley de Partidos, al constitucionalizar en su artículo 216, la democracia interna y la transparencia con la que deben funcionar los partidos políticos, además de: “…1) Garantizar la participación de ciudadanos y ciudadanas en los procesos políticos que contribuyan al fortalecimiento de la democracia; 2) Contribuir, en igualdad de condiciones, a la formación y manifestación de la voluntad ciudadana, respetando el pluralismo político mediante la propuesta de candidaturas a los cargo de elección popular; 3) Servir al interés nacional, al bienestar colectivo y al desarrollo integral de la sociedad dominicana”.
En consecuencia, la Reforma Constitucional creó un elemento legal deficitario, tomando en consideración que el referido artículo 216 establece que la conformación y funcionamiento de los partidos políticos debe sustentarse en el respeto a la democracia interna y la transparencia, de conformidad con la ley. En ese sentido, la ley llamada a hacer cumplir esta disposición constitucional es la de partidos, sin perjuicio de que la Ley Electoral 275-97 contiene más de cuarenta artículos relativos a los partidos.
Es probable que a más de tres lustros de haberse depositado, infructuosamente, el primer Proyecto de Ley de Partidos en el Congreso Nacional, resultara mucho más apropiado haber encabezado el presente trabajo con la interrogante: ¿Por qué ha resultado tan dificil aprobar la Ley de Partidos? La respuesta inmediata la podemos encontrar en la famosa fórmula de la ley de hierro de la oligarquía delsociologo alemán Robert Michels, quien sentenció a principios del siglo pasado en su obra “Los partidos políticos”, el gobierno eterno de las oligarquías partidarias. Estas élites, que son las que deciden cuales leyes se aprueban y cuales no, se resistirán siempre a auto-regularse.
Es pertinente aclarar que los diversos proyectos de Ley de Partidos que se conocen en el Congreso Nacional, se refieren exclusivamente a temas tales como: reconocimientos de los partidos, afiliación y desafiliación de los militantes, elecciones de directivas y cargos de elección popular, patrimonio, la fiscalización por parte de la JCE de las primarias, la precampaña electoral, financiamiento público y privado, entre otros.
Como se ha podido apreciar, la Ley de Partidos, solo regulará la vida interna de los partidos políticos, al tiempo que, como ha ocurrido siempre, la Ley Orgánica Electoral es la que rige los procesos electorales.