Penalizarán porno no autorizada en NY
NUEVA YORK-Este estado ha aprobado una nueva norma para asegurar penas contra todas las personas que
graben o difundan imágenes íntimas de otras sin su consentimiento, en una
medida destinada a luchar contra el llamado «porno de la venganza»,
que se ha popularizado en los últimos meses en EEUU a través de Internet.
«Nadie debe ser
humillado viendo su imagen emitida sin su consentimiento, y esta legislación de
sentido común asegura que cualquier víctima de esos actos tendrá la ley de su
lado», señaló en un comunicado el gobernador del estado, Andrew Cuomo.
La nueva ley, firmada
hoy por Cuomo y que entrará en vigor el 1 de noviembre, considerará delito el
uso de cualquier aparato para ver, emitir o grabar a otra persona sin su
consentimiento cuando practica actividades sexuales.
Hasta ahora, los cargos
sólo podían presentarse en caso de que en las imágenes apareciesen las partes
íntimas de la persona, explicó la oficina del gobernador en un comunicado.
Ese resquicio legal fue
el que impidió a la policía de la localidad neoyorquina de Clarkstown tomar
medidas en un caso reciente, que fue el que llevó a impulsar la reforma.
El senador David
Carlucci, promotor de la iniciativa, subrayó en la misma nota que
«Internet no debe ser una herramienta para humillar o explotar a
otros» y aseguró que la modificación disuadirá el uso de la Red con esos
fines. «Con el rápido avance de las nuevas tecnologías, necesitamos un
enfoque del siglo XXI con nuestras anticuadas leyes sobre vigilancia»,
defendió.
La privacidad debe ser
«primordial»
La asambleísta estatal
Amy Paulin consideró también que la protección de la privacidad es
«primordial» y señaló que si alguien está en un momento o una
situación privada tiene «derecho a esperar que ese momento permanezca
privado».
En los últimos meses,
las autoridades de Estados Unidos han tomado medidas para frenar el llamado
«porno de la venganza», que ya es delito en varios estados.
Este fenómeno cobró
repercusión con el nacimiento de páginas web creadas para dar cabida a las
imágenes sexuales de la venganza y servir así de instrumento y altavoz con el
que amantes no correspondidos de todo el mundo pudieran canalizar su ira tras
una ruptura no deseada o dolorosa de la manera más cruel.
En estas webs, que la
Justicia ha ido cerrando a medida que las descubría, podían verse imágenes
explícitamente sexuales donde no sólo la víctima era reconocible sino que se
añadía como pie de fotografía su nombre completo, su centro de trabajo o
incluso su dirección postal y teléfono.
Como resultado de ello,
muchas de las víctimas acababan recibiendo llamadas de desconocidos con
amenazas e insultos, además de tener que afrontar la humillación de haber sido
vistas sin ropa o practicando sexo por sus jefes, sus amigos y sus familiares.